Que eres un niño jugando con cerillos y yo tengo un cuerpo de papel.
Conocerás una chica con una voz más suave y brazos más fuertes y ella no tendrá secretos violentos o una afección por el vino tinto u ojos que nunca se mantienen secos.
Vas a caer en su cama y yo regresaré a pasar los viernes por la noche con chicos que nunca se aprenden mi apellido.
He perseguido a cada tonto que ha intentado dormir conmigo.
Crees que es romántico tener relaciones con la chica que escribe poemas acerca de ti.
Crees que entenderé tu tristeza porque vivo dentro de la mía.
Pero apareceré en tu puerta a las 2 am, con los ojos salvajes y sin poder dormir.
Y voy a intentar encontrar algo de paz en los huesos de tu pecho y tu no me dejarás entrar.
Me dirás que me vaya a casa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario