He pasado 5 veranos de mi vida huyendo del calor, en europa, en Canadá, guadalajara y Estados Unidos.
Pero este año solo pase un mes y medio en casa de los papás de mi suegros y regresar en agosto fue, digamos que difícil. Sobre todo porque es acostumbrarse a que todos los días vas a sudar hasta que tus blusas y vestidos quedan completamente empapados, vas a tener que ponerte desodorante hasta cada hora, y bloqueador como loca, solo para seguir sudando aún cuando estás en la sombra.
El calor es bueno, prefiero el calor que el frío pero no en este extremo. La lluvia no llega, el arroyo no lleva agua y en el mar el agua está tibia.
¿Qué nos queda? Esperar a que la lluvia lo calme todo, como siempre. Y luego remojar la piel hasta que se ponga suavecita y arrugada, bailar en el mar y sudar dejando todas las toxinas fuera del sistema.
Sí, odio el calor pero aquí he vivido prácticamente toda mi vida. Sí, odio sudar pero soy una de las personas que más suda en el mundo, hasta empapo el papel en el que intento escribir en estos días. Sí, odio el agua caliente pero la fría tampoco me gusta tanto.
1 comentario:
¡Ay la calor! odio el calor, soy del equipo del frío porque se pone una sudadera y santo remedio, pero el calor ese si no se quita nunca, podríamos estar a temperaturas bajo cero y yo en playera haha. Sobre todo a la hora de dormir, no puedo dormir con calor, prefiero el frío y con ropa calientita y tapado duermo como tronco hehe. Le paso lo que hago para el calor igual y le sirve, me compré un ventiladorcito de esos de los chinos que es baratísimo, me compré también un atomizador chiquito, lo llené de agua y cuando estaba sentado o acostado me rociaba el rostro y el cuello y ponía el ventilador a unos 40 cm más o menos de mi y quedaba helado haha.
Publicar un comentario