jueves, 26 de mayo de 2011

When I'm inspired...

Todos tenemos un proceso para darnos inspiración, ¿no?
En mi caso es sencillo: me inspira la lluvia, tal vez es raro, pero cada que llueve me siento con muchas ganas de escribir y contar historias, la lluvia es tan hermosa, me encanta escucharla.
Además, me inspiro cuando veo películas. Cada que termino que ver alguna que me gustó muchisimo, me digo a mí misma "Tienes que escribir una historia que sea tan maravillosa como para que la hagan una película"
Me inspiro obviamente después de leer algún libro, porque admiro a todas aquellas personas que solo con su imaginación, crean historias que me adentran a nuevos mundos, que me hacen enamorar y odiar, llorar y reír.

Pero hay algo que me inspira más que nada...y supongo que todos les pasa igual. Me inspiran mis sentimientos.
Solo tengo una regla: "Salta lo malo", esto quiere decir que cuando me pasan cosas verdaderamente malas, prefiero no mencionarlas nunca cuando escribo. Porque me digo; "¿para qué? Si ya lo viví una vez, no quiero hacerlo dos veces"
En fin, me inspiran mis momentos de melancolía, tristeza, de odio hacía el mundo...
Y me inspira el amor.

Todo acerca del amor es inspirador, ¿no? Cuando te rompen el corazón, cuando alguien te mira de manera diferente, cuando sientes que amas a alguien, que te estás enamorando...

Cuando estoy inspirada, cuando escribo...eso es amor.

sábado, 21 de mayo de 2011

Y si se acaba el mundo, al menos escuché el nuevo disco de Lady Gaga.

Escuché la noticia el lunes, cuando estaba realizando una tarea en la computadora, y de repente "El 21 de mayo es el fin del mundo"
En vez de preocuparme, obviamente me dio risa, ¿cuántas veces ya han dicho que el mundo se acabará? Desde que tengo memoria, lo dijeron en el 2000, 2006, y ahora en 2011.

Ya son las 11:38am y yo no veo señales del apocalipsis...

Más bien tengo preocupaciones de otro tipo. Como que el miércoles tendré un concurso de matemáticas y no he estudiado aún, como que tengo que hacer un ensayo acerca de la política y no sé ni cómo empezar, como que tengo un cuarto muy desordenado y soy demasiado floja para ordenarlo.

Me doy cuenta de que, entre más creces, más presión hay, ¿estoy en lo correcto?
Esta semana ha sido una muy agitada, he pasado noches en vela, he estado hasta altas horas de la mañana haciendo tareas, con preocupación, con nervios por los exámenes...
¡Como quiero acabar con la escuela!

De verdad no sé cómo he hecho para mantenerme en pie. Doy gracias porque al fin es sábado y tengo tiempo para estar con mis amigos y familia. Pero este fin de semana también lo pasaré estudiando lo más que pueda, porque no quiero desepcionarme a mí misma.

Vida; quiero ponerte pausa, es una lástima que no pueda...

domingo, 15 de mayo de 2011

Dije a mi madre: Quiero ser escritor.

Lo supe cuando tenía apenas 14 años, y escribí mi primer cuento. Me gustó tanto escribir que no paraba de hacerlo, aproveché cada oportunidad, cada concurso en la escuela, cada libreta que mamá me compraba, en fin, hacía de todo para seguir escribiendo.

Cuando tenía 14 años empecé a escribir un diario, fue de los años más bonitos de mi vida, porque escribir lo que me estaba pasando me permitió verlo de una manera diferente, ¿got it?


Escribía en un blog, que me permitió conocer a gente que jamás hubiera imaginado, de Mexicali, de Veracruz, de Colombia, y hasta muy cerquitas de mí...

Siempre leo y leo que nosotros, los seres humanos, tenemos el privilegio de saber nuestra misión en la tierra desde muy temprana edad, pero lo posponemos por diferentes razones; las dudas, el miedo al fracaso, la pereza...etc.

También desde siempre me he preguntado qué voy a hacer de mi vida. Y siempre tengo dudas. Ya no tengo mucho tiempo para decidir, un año se pasa rápido y voy a tener que hacer una elección...

Lo que más me duele es que siempre he querido irme lejos, MUY lejos. Porque siento que el lugar en donde vivo no es suficiente, porque no hay tantas oportunidades como yo quisiera.

"Qué voy a hacer?" me digo una y otra vez.


No quiero mirar atrás y darme cuenta de que tomé la decisión equivocada...






Quiero reencontrarme con mi vieja yo y decirle "Hola, espero no defraudarte"

domingo, 8 de mayo de 2011

Leni (9)

-Of all the things I'm going through, you never stopped to tell me why -

-No te vayas Leni. –me dice mientras una enfermera entra al cuarto, noto como sus ojos van de mi dirección a GoodBooks –Sé qué piensas que he perdido la razón. Pero si me escuchas, conocerás mis motivos.
-No sé si quiera –respondo irritado –No sé si estoy preparado para ir tan lejos como tú. –la enfermera sale del cuarto y de nuevo estamos solos. Siento como si toda nuestra relación dependiera de este momento -¿Sabes? No tengo idea del por qué un día te encontré en la mitad de la calle peleando con una chica, fui un tonto, ¿no? Debí de haberme dado cuenta entonces de que ibas a ser un problema. Y luego nos hicimos amigos, ¿recuerdas? Nos unió la música. Te esperaba cada día al salir de la escuela. Decía que quería oírte cantar, pero sólo era un pretexto. –Noto como al escuchar mis palabras sus ojos se tornan aún más oscuros –Eras un misterio que quería descifrar… ¡Y mira cómo estoy ahora!
-¿Tú crees en el destino Leni?
-No lo sé, ¿por qué lo preguntas? –noto que de nuevo una sonrisa se dibuja en su rostro. Aunque trato de mantener la calma, su extraño comportamiento no me lo permite.
-¿Sabes? Traté de matarme porque creía que en esta vida no habría algo que valiera la pena. Salí a la calle con una sola misión; yo debía morir. Creí que había llegado mi tiempo –se toma un respiro, luego continúa: -Pero entonces conocí lo que hay allí –señala con su dedo índice a un punto en el espacio y veo sus ojos enfocados, ¿qué estaba viendo? –Allí no hay nada Leni, nada.
-Goodbooks…
-No, espera Leni, déjame terminar. Tuve que ir a ese lugar para darme cuenta de que tú vales la pena, de que a ti es a quién iba a extrañar.
-¿Hablas en serio?
-Pero antes, antes de que esto pase, debes ayudarme a encontrarlo.


Regreso a casa y me siento tan confuso que mi cabeza da mil vueltas. ¿Qué fue todo aquello?, y ¿cómo fue que pasó?
De un día para otro todo el mundo se me vino encima. “Y siento el peso del mundo sobre mis hombros” pensé.
Todo había resultado de una manera disparatada. ¿Era posible que alguien como GoodBooks hubiese intentado matarse?
Yo sé que hay millones de personas en el mundo en este momento que están planeando su muerte; adolescentes que creen que sus problemas ya no tienen salida, que se han contagiado alguna enfermedad mortal, que sienten que la vida no tiene sentido. Pero, ¿GoodBooks? Ella… ¿cómo pudo llegar a eso?
Pensé en sus palabras “tienes que ayudarme”, y sentí un nudo en el estomago.
No pude llegar a otra conclusión; había algo o alguien que había salvado a GoodBooks, ella no pudo salir sola de todo aquello. Nadie va por el mundo parándose en medio de una carretera y saliendo con heridas leves después de un choque. Nadie excepto GoodBooks…Ella, siempre Ella.
Y ahora me pedía que encontrara al tipo que manejaba el auto, ¿para qué?, ¿qué iba a conseguir con eso?
Le di mil vueltas al asunto y decidí que con GoodBooks nada resultaba normal.


Luego de hacer un poco de investigación, me di cuenta de que el “accidente”, o mejor dicho “intento de suicidio por parte de GoodBooks”, había acaparado el mínimo de atención por parte de la prensa. “Esas cosas ya se ven como comunes” pensé.
No se mencionaba el nombre de GoodBooks por ninguna parte, sólo se podían leer cosas como “Adolescente se salva de la muerte” y “Adolescente sobrevive de milagro”, así que yo no era el único que pensaba que toda la situación resultaba extraña.
Había revisado tantos diarios que mi vista no daba para más, hubiese pedido refuerzos, a Crybabies o a Trash, pero en este caso decidí que lo mejor era actuar por mi cuenta. Nunca entenderían. Nunca nadie va a entenderlo…
Estuve a punto de rendirme cuando vi un nombre en el periódico que llamó mi atención, según la descripción era un hombre de mediana edad, desempleado y sin incidentes criminales.
Apunté su nombre en una hoja de papel y encendí la computadora.


-¡Hola Leni! –me saluda GoodBooks, por un momento pienso que estoy teniendo alucinaciones, pero luego la observo bien y noto que tiene unos cuentos moretones en el cuerpo: definitivamente es ella y esta parada en frente de mí.
-¿Qué haces aquí? –Respondo confuso -¿No se supone que debes estar en el hospital, en reposo?
-He salido hoy mismo, los doctores me habían dado de alta días atrás, pero la psicóloga aún quería hacerme algunos análisis. Debo seguir viéndola algunos días por semana, pero si te soy honesta, estoy cansada de responder a las mismas estúpidas preguntas: "¿por qué lo hiciste?, ¿en qué estabas pensando" –dice haciendo un tono burlón –No tiene sentido, ¿no crees?
Me tomo una pausa antes de responderle, debo evaluar la situación, por alguna extraña razón, siento que la chica tengo enfrente no es GoodBooks.
-De hecho, creo que tiene mucho sentido –digo al fin –No creo que puedas ir por la vida intentando matarte sin que la gente se pregunte por qué.
Sonríe de manera triste, pareciera que no se esperaba ese tipo de respuesta viniendo de mí.
-En fin Leni, ¿me vas a ayudar?
-No lo sé, quiero saber por qué quieres dar con ese hombre. No creo que tenga deseos de verte.
-Eso que importa Leni –se encoge de hombros –soy yo la que debo encontrarlo.


-¿A qué has venido? –me responde la mujer luego de examinarme con la mirada durante unos segundos.
-Es por Ella, no sé qué rayos le sucede, pero creo que todo está yendo demasiado lejos.
-¿Por qué crees que lo hace? –noto como esto no es un interrogatorio normal, la doctora se muestra demasiado ansiosa, como si me respuesta fuera a darle todo lo que había estado buscando.
-Dice que tiene una misión –contesto y me siento como un idiota, ¿Qué clase se respuesta es esa? –sé que suena absurdo, pero está convencida de ello.
-Tú la conoces mejor que nadie, ¿no es así?
-No creo que haya alguien en este mundo que conozca a GoodBooks –siento como mi mirada se pierde por un momento, los recuerdos vienen a mi mente uno por uno y me ponen la piel de gallina –Ni si quiera estoy seguro de conocerla.
-Leni, quiero que seas honesto conmigo –me dice en un tono neutral, se levanta de su escritorio y camina en mi dirección; es como si la estuviera viendo por primera vez. Saca una fotografía de su bolso y me la entrega –Dime todo lo que sepas de este hombre.


“Sólo un poco más” me repetí a mí mismo “Sólo un poco más”. Debía soportar todo aquello por unos cuantos días más y todo habría terminado. GoodBooks conocería a aquel hombre, y dejaría todo ese asunto de “Tengo una misión” por la paz. Pero había algo en mí que me decía “Sabes que no será así”, y qué si GoodBooks me había mentido. Según sus propias palabras, estaríamos juntos al final. ¿A qué se refería?, ¿Juntos como una pareja, juntos como amigos? No lo sabía. Como siempre.
Según las indicaciones de la doctora, debíamos de encontrar al hombre primero; hablar con él. Porque si GoodBooks lo encontraba primero, y llegaba de sorpresa, no sabíamos cómo iba a reaccionar. ¿Y si le hacía daño? Después de todo era un hombre del que no sabíamos nada.
Llegué a una calle donde la basura estaba por doquier, ¿qué clase de barrio era aquel?, y, ¿por qué se me ocurrido venir de noche?
Crucé la calle y me encontré con los restos de un campo de fútbol. No había iluminación por ningún lado. Tenía miedo.
Es curioso como todos nos enseñan a que los chicos no debemos tener miedo, ¡por favor!, sólo somos humanos, sentimos miedo, lloramos, nos enamoramos. Pero pareciera que ser hombre y mostrarse vulnerable no podía combinarse.
Empecé a caminar más rápido “Si voy a hacer esto, al menos quiero darme prisa” pensé.
Justo cuando el campo llegaba a su fin, me encontré enfrente de un edificio color blanco, grande. Cuadraba perfecto con la descripción que me había dado la doctora.
Me tomé un respiro antes de continuar caminando.


-¡Te buscan Leni! –me gritó mamá desde la planta baja. No tenía idea de quién podría ser, pensé en Crybabies o Trash, me había pasado la semana alejado de todo y de todos, y, aunque no lo había pensado, los extrañaba.
Bajé lo más rápido que pude, apenas y me dio tiempo de arreglar mi pelo, colocarme unos jeans y una camiseta.
Antes de llegar a la puerta mamá me detiene.
-Espera un minuto Leni –me toma por el brazo y me jala hacía ella, ¿qué estaba pasando? –Te he notado muy raro desde la última vez que ella vino a verte, ¿pasa algo?, ¿por qué esa chica esta toda llena de moretones?
-Te explico luego mamá, debo hablar con ella, ¿sí? –asiente con la cabeza, aunque no la veo convencida.
“Todos creen que ella no es buena para mí” ...




*El próximo Leni será el final, i'm excited.

miércoles, 4 de mayo de 2011

Y al fin lo encontré...

Encontré algo que nunca pensé. Es más, si hace un año me hubieran dicho; "Vas a sentirte así el año que viene", me hubiera reído hasta que me doliera la panza.
Pero no me lo explico. No, no puedo.
Supongo que cuando algo sumamente extraño pasa, lo único que puedes hacer es aceptarlo, aunque en mi caso es complicado. Muy complicado.

Quién iba a decir que con 17 años me iba a encontrar a mí misma comportandome como niña pequeña. Como una de esas que se ríen cuando no tienen explicación para las cosas, como una de esas que inventa excusas tontas que nunca resultan creíbles. Que vergüenza.

Pero bueno, voy a empezar desde el principio.
Hace tanto tiempo que comencé la búsqueda de "esa persona", que ya me había grabado en la mente cómo debía de ser (suena absurdo, lo sé, pero es la verdad). Me planteé las características que debía tener, CADA cosa.
Hubo muchas personas que resultaron dañad@s debido a esto. No lo puedo negar, a veces me siento culpable. Pero luego pienso, "bueno, todo pasa por algo"

En el último mes, TODO lo que había creado se vino abajo. De verdad, todo.
Y sólo por un día en que me dije "Ya, hasta aquí. Voy a romper todas las reglas con las que vivo" No era como si me fuera a drogar o algo así, no. Cosas simples como estar con amigas con las que casi nunca estoy, rebelarme un poquito (nada más poquito), cambiarme el peinado, hablarle a gente con la que nunca había hablado...hasta hubo peleas por comportarme así.
¿Ves como cuando la gente empieza a "cambiar" todo a su alrededor cambia? Como las personas que por verme comportarme distinto sintieron que me estaban perdiendo. Que locura, y todo por una simple decisión.
Todo por hacer cosas nuevas, salirme de la rutina.

Pero luego vino él. Y allí terminó todo.
No hay una sola cosas que pidiera que él la tenga. Pero como dice la gente "el amor es ciego", "no se puede mandar al corazón".
Y tienen tanta razón.

Lo acepto. Lo acepto. Lo acepto.


...Encontré lo que me estaba haciendo falta

lunes, 2 de mayo de 2011

Leni (8)

-She might as well leave me for dead-


Trash conducía con tranquilidad. Después de encontrar a GoodBooks, al fin todo había terminado.
Ella dormía en la parte trasera del auto mientras Trash y yo escuchábamos la radio.
-Todo esto es muy raro Leni, todo acerca de ella es raro.
-Ya lo sé –no tenía algo mejor que responder.
-¿Quién era el tipo que la estaba persiguiendo?, y, ¿por qué la persiguió en medio de un centro comercial? No entiendo, nada tiene sentido.
-Tampoco tengo idea –respondo encogiéndome de hombros –Después de que eso pasó intenté detenerme a mí mismo, de verdad lo hice, pero no funcionó, hubo algo que me dijo que tal vez estaría en peligro. Y luego de no encontrarla creí que algo malo le habría pasado –me tomé un respiro antes de continuar y volteé a ver a GoodBooks –Cuando al fin la encontré y vi que estaba bien, ya nada me importó. Y luego llegaste tú. Gracias Trash, sin ti no hubiese sabido qué hacer.
-No me agradezcas –me dice con recelo – Ella solo estaba agotada, por eso se desmayó. En fin, creía que habías dejado esto atrás Leni.
-¿A qué te refieres?
-A ella.
¿Y qué le iba a responder? “lo intenté, intenté salir con otra chica, pero no dio resultado, porque no dejo de pensar en ella.”
-¿Leni? –Musita Trash después de que no ve respuesta de mi parte –Ella significa todo para ti, ¿cierto? Solo quiero que tengas algo en mente; esta chica no está bien, me preocupa. Tiene muchos problemas. Pero escúchame Leni: son sus problemas, así que aléjate de ella si sabes lo que te conviene.


Unos cuantos días después y yo sentía que la vida había seguido su curso normal. No había visto a GoodBooks, pero eso era normal en ella; siempre aislada.
No había pensado demasiado en el comentario de Trash, tal vez y de verdad me había vuelto loco por ella. Tal vez necesitaba salir un poco y despejarme las dudas, que me invadían a cada momento.
-Hey Leni –me susurra Crybabies, que está sentado en un banco a mi lado -¿estás bien? No estás concentrado en clases, eso es raro viniendo de ti.
-Estoy bien –miento.
-Oí a Ethan mencionarle a sus amigos que GoodBooks no quería salir de su casa, cree que está deprimida o algo así. También oí rumores acerca de que GoodBooks fue perseguida por un psicópata el fin de semana ¡Puedes creerlo Leni!, te aseguro que tu no sabías nada, ¿verdad?
-¡Shht!, cállate Crybabies –murmura Trash, y luego dirige una mirada hacía mí, no es cualquier mirada, es una que dice “recuerda lo que te dije”


¿Conoces la canción “I am made of chalk”?... ¿sí? …pues así me siento… ¿por qué?...recuerdas como al principio se oye sólo ruido y no eres capaz de entender nada, piensas “eso no es más que un sonido distorsionado, no tiene ningún sentido”, pero luego la melodía cambia y logras apreciar lo bello de esa canción, piensas “estaba juzgando mal, esto suena hermoso”. Pero aún así no logras comprender los sonidos; le das la interpretación que quieres.
Yo soy como esa canción. Tal vez no logres comprender mis motivos, pero después de conocerme, aunque sea solo un poco, me juzgas y crees que sabes todo de mi, entonces te haces una idea de cómo soy y crees saber la razón de mi comportamiento.
Pero nadie lo sabe…no…ni siquiera yo.


-¿Leni? –una voz conocida me habla, trato de identificarla pero no lo logro. -¿Leni? Contesta, por favor. Soy Ethan.
Como no lo reconocí, aquella maldita y estúpida voz, y ahora resulta que me necesita para algo, porque si no, ¿por qué me estaría llamando?
-¿Qué quieres? –trato de responder sonando enojado.
-Necesito que vengas a mi casa, ven lo más rápido posible.
Espera un momento, ¡este imbécil me está dando órdenes!, y ¿quién se cree que es?, es mejor que tenga una buena razón si no quiere recibir lo que merece.
-¿Y por qué iría a tu casa? Además, ni siquiera sé dónde vives, no seas idiota.
-No estoy para bromas Leni, esto va en serio –lo noto exasperado, tal vez y esto sí sea serio –Si no puedes venir a mi casa yo iré a la tuya –tras unos segundos de meditar, concluye: -estaré allí en menos de 10 minutos.


-¿Cómo sabes dónde vivo? –pregunto sonando más curioso de lo que pretendía. Ethan de verdad se ve desesperado, su lacio pelo está alborotado y pareciera que un payaso hubiese escogido su ropa, además, su cara no ayuda demasiado.
-Eso que importa, ¿puedo pasar? –asiento y el entra a la casa, me siento extraño con Ethan dentro, ¿esto es el fin del mundo?
-¿Qué pasa hombre?, ¿por qué tanto misterio?
-¿Has recibido el correo? –Saca una carta de su bolso–Esto llegó al mío hoy –me la da y la examino: nada interesante, es de una dirección que no reconozco y tiene como firma un nombre que no me es familiar.
-¿Qué es esto? –Pregunto sin más -¿te quieres burlar de mí?
-Ojalá se tratara de una broma, pero no es así. –hace una pausa como pensando cuál será su siguiente paso y solo murmura: -Ábrela.
Después de un segundo me doy cuenta de que se trata de algo relacionado con GoodBooks, qué otra razón tendría Ethan para acudir a mí. Solo ella nos unía. Mis manos comenzaron a temblar y mi corazón se aceleró. “¿Ahora qué hiciste GoodBooks?” pensé.
Abrí la carta con cuidado y descubrí una caligrafía hermosa.
“Adiós Ethan”
¿Eso era todo?, ¿Por qué Ethan me estaba mostrando una carta con un mensaje así?, ¿Qué tenía que ver con GoodBooks?


Me tomó más de un minuto juntar toda la información en mi cerebro, y cuándo al fin lo comprendí, la euforia me hizo sonar alterado.
-¡Es ella! GoodBooks –Comprendí que era una estupidez; tanto tiempo y yo ni siquiera sabía su nombre.
-GoodBooks, Alice. Llámala como quieras. ¿Comprendes lo que esa carta significa Leni?
Sin pensarlo corrí en dirección a la calle, debía revisar el buzón, estaba completamente seguro de que una carta estaba esperándome allí, una carta de Ella.
Abrí el buzón y tomé todas las cartas, en total eran cinco y revisé una por una buscando su nombre. No…no…no…no… ¡Es ella!
Regresé a la casa y encontré a Ethan aún más impaciente, caminaba de un lado a otro y sudaba.
-¡Aquí está!
-No esperes más y ábrela.


Veo todo en cámara lenta. Mi cara debe de estar revelando mis emociones, ¿cómo es que soy capaz de mantenerme en pie?
Me siento como en una escena de película, esa en donde todo sale mal. Pero esta es la vida real y no sé cómo reaccionar.
En la sala de espera de un hospital, completamente solo. ¿Dónde estaban los padres de GoodBooks? Si ni siquiera sabía el nombre de GoodBooks hasta hace apenas unas horas, ¿cómo iba a saber quiénes eran sus padres?, podrían ser cualquiera entre todas las personas a mi alrededor.
Todo aquello parecía un sueño tan vivido, uno de esos en los que solo quieres despertar y decir “sólo he estado soñando”.
Veo a un médico acercarse a una mujer de mediana edad, al igual que GoodBooks tiene una melena negra azabache, y cuando se da la vuelta, en su perfil puedo notar el color de sus ojos, no tengo ninguna duda; ella es su madre.


-Hola –me dice sonriendo, puedo notar como en sus ojos hay alegría, ¿por qué está contenta? –Estás aquí.
-¿Te encuentras bien?, quiero decir, sí…eh… ¿estás bien?
-Que no te intimide Leni, ella no es importante, nunca lo ha sido, no sé por qué está aquí. Cuando me pidieron que les diera el número de algún familiar no pensé en ella, yo no tengo familia ¿sabes? Nunca la he tenido.
-GoodBooks yo…
-Espera Leni –me interrumpe –Creo que tienes el derecho que saber toda la verdad, pero antes quiero que se vaya –dice dirigiéndose a la mujer que está con nosotros en cuarto, ¿cómo puede alguien dirigirse así a quien es su madre? La mujer, al comprender el mensaje, sale de la habitación sin más, al igual que los ojos de GoodBooks, los suyos también son sumamente expresivos y en ellos percibo un enorme vacío –Ya está Leni, ahora puedo decirte todo. Sé que debes estar pensando que soy una pésima hija, pero por favor no me juzgues sin antes conocer mi lado de la historia. Sé que he estado actuando raro, pero tengo un motivo –sonríe de nuevo, esto cada vez se torna más extraño –Quiero algo más que esto Leni.