Siento que estoy en un proceso donde estoy a la vez perdida pero a la vez en el camino correcto, no sé ni cómo explicarme.
Me desperté hoy en esta casa donde he vivido ya por casi dos años, pero me desperté sabiendo que es el último día que estaré aquí: ha sido un largo viaje. Entré a la universidad y viví con mi tía por dos años, después con una amiga y finalmente aquí, y hoy me mudo. Aún no me la creo, han pasado muchísimas cosas, todo ha cambiado de la noche a la mañana.
Encontré trabajo demasiado rápido, y, no me malinterpreten, creo que es genial, pero también creo que hay algo o alguien que me cuida desde algún lugar de este universo y me llena de bendiciones, porque no es normal encontrar un trabajo así solo una semana después de haber terminado la carrera. Estaré trabajando con niños, haciendo evaluaciones, dando terapia, y todo en una escuela de música donde seguramente aprenderé (finalmente) a tocar la guitarra. Me siento extraña cuando llego al trabajo y me presentan a todo el mundo como "la psicóloga", me siento extraña porque hago lo que más me gusta en el mundo y ¡me pagan!, la verdad ni siquiera se siente como trabajar. Soy demasiado afortunada, lo sé muy bien.
Y con este trabajo llegó el momento de mudarme, llegó el momento de volver a donde pertenezco.
Tengo muchísimo por arreglar, ya hace unas horas se llevaron mis cosas y la habitación quedó vacía, y yo aquí, esperando a que se hagan las 6 pm para irme.
Escuché una canción y automáticamente me puse a llorar: tantas cosas que pasaron en esta casa, en este cuarto, y llegó el momento de decir adiós.
La verdad no sé si estoy perdida o voy por el camino correcto, pero poco a poco lo descubriré.
Estoy feliz, estoy nostálgica, siento que hoy cambia mi vida por completo.
Y hay algo más que contar, pero eso tendrá que esperar a mañana. Por hoy: basta decir que este es el comienzo del resto de mi vida.
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