Seguí teniendo mis dos trabajos, estoy bien, tengo muchos niños a los que amo. Comencé a dar clases de ballet folclórico y cada que mis niños se presentan soy como una mamá orgullosa y feliz. También estoy tomando clases de guitarra y ya casi me sé dos canciones de Natalia Lafourcade.
Creo que este año no sufrí por amor, creo...no más de lo normal. No tuve un gran amor o algo por el estilo, estoy bien.
Fue el año de la música: descubrí muchísimos grupos y cantantes nuevos y fui a dos festivales de música: Lollapalooza en Berlín y el Corona Capital en la Ciudad de México.
Ya estoy en Guadalajara para terminar el año, y según yo, dejé mi casa ordenada, así que todo bien.
Empecé el año en compañía de mis mejores amigos y familia: justo a las 12 me fui a felicitarlos y tomamos hasta morir: champaña, tequila, ginebra, cerveza... y al día siguiente yo no podía ni pararme, pero valió la pena, me divertí muchísimo.
Tuvimos un fin de semana de locura total: nos metimos al mar a hacer skinny dipping y es de las cosas más locas que he hecho en la vida, luego anduvimos de bar en bar, pidiendo raite y viendo criaturas extrañas a la mitad de la noche: legendary.
Volví a ver a Cucu y conocí a Miss Fame en Vallarta.
Me hice un tatuaje en honor a mi cantante favorita, Marina and the Diamonds, que dice Living la dolce vita.
Fuimos al concierto de Bruno Mars en GDL.
Volví a ver a Cucu, esta vez acompañada de mi mejor amigo, y también conocí a Sailor Fag.
Mi mejor amiga de la prepa ya es mamá.
Boda de la jefa de mi BFF.
Vimos a Bomba Estéreo en Vallarta.
Lectura.
Mi sobrina preciosa nació.
Organicé mi primer evento drag en mi hometown.
¡Hungría! fue la mejor experiencia de mi vida: hacer el voluntariado me hizo extremadamente feliz y me enamoré de ese país con todo el corazón.
Alemania fue increíble también: volví a ver a mi mejor amiga de la secundaria después de 7 años, fui a Lolla y conocí a mi drag favorita, Bianca del Río.
Comencé a dar clases de ballet folclórico y mis niños tuvieron su primera presentación.
Cumplí ¡25! (sí, ya me siento vieja, sobre todo al pensar que empecé este blog ya hace 8 años y en enero serán 9)
Ir al Corona Capital fue una experiencia increíble: hice amigos nuevos y vi a mis bandas favoritas, lloré de felicidad, no miento.
Vine a la feria del libro, como ya es tradición.
No sé cómo voy a lograrlo, pero 2019 tiene que ser aún más increíble y maravilloso que este, así que: aquí vamos, mis deseos son viajar, ser muy feliz, trabajar mucho, y tener amorrrrr siempre.
