Crecer es descubrir que somos fans de algunas cosas y otras las detestamos, hay etapas en la vida donde nos gustan algunas cosas y luego ya no; por ejemplo, yo solía amar a muchas bandas que ahora ya no resuenan conmigo. Nunca pensé que me iba a gustar correr pero aquí estoy, entrenando para un medio maratón de nuevo.
Pero hay cosas más complicadas, cosas que llegan con la adultez, como por ejemplo el trabajo. Yo tengo tres trabajos; doy clases de inglés a niños, tengo una tienda de segunda mano donde trabajo dos días a la semana y tengo un bar donde trabajo tres días a la semana.
El trabajo que me "mantiene" (lo pongo entre comillas porque pues es el que me da más dinero, es donde hago la mayor parte de mis ingresos), es el bar, pero también es el trabajo que menos me gusta. Entonces la cosa se pone complicada.
Sé que muchas personas tienen trabajos que detestan, que no soportan pero que están ahí porque tienen miedo de no encontrar algo más, algo mejor, quizá por comodidad o porque lo han hecho toda su vida y no se ven haciendo nada más. Tengo amigas que tienen trabajos así, y yo siempre me preguntaba "¿por qué lo hacen?, ¿por qué siguen en un trabajo que las hacen miserables?" y nunca pensé estar en una situación similar.
Empecé este bar con mi ahora esposo, porque era su sueño y decidí apoyarlo, el objetivo siempre fue que en un año consiguiéramos empleados y ya no ir tanto, pero el crecimiento fue menor del que esperábamos y ahí seguimos trabajando, y a mi no me gusta en absoluto. Detesto el servicio al cliente, tener que hacer plática a la gente, fingir que me caen bien, que me importan sus historias, lidiar con gente prepotente que por ser americanos o canadienses se creen mejores que yo o asumen que ni siquiera puedo hablar inglés.
Y bueno, podría la lista podría seguir, pero el caso es que este negocio es el que me da más dinero, entonces, ¿qué hago?, he pensado mucho mucho mucho sobre si cerrar o no, pero si cierro, ¿qué voy a hacer después?, porque aunque amo enseñar y trabajar con niños, ese es el trabajo que menos dinero me da, y ahora me encuentro a mi misma en una situación en la que nunca pensé estar, preguntándome "¿por qué lo hago?" porque sigo en un negocio que no amo. Y me digo a mí misma que es complicado, pero que en algún momento voy a descifrar como hacer más dinero haciendo lo que amo: eseñar y escribir.
1 comentario:
Ufffff comadre, está en una situación; a mi ver, más allá de lo complicado, mire, 2 cosas que son el gran secreto de los millonarios: los gringos dicen "work smart, not hard" GRANDÍSIMO error, debe trabajar de las 2 formas, si trabaja inteligentemente y arduo, el mundo es suyo comadre, la otra cosa es EL GRAN secreto para no trabajar un día y que le paguen, para lo cual creo que me saqué la lotería, le explico al regresar de estos bonitos comerciales:
https://www.youtube.com/watch?v=mhc0HBbn8Ds
Mire comadre, no es lo mismo:
- Trabajar en lo que nos gusta.
- Trabajar en lo que somos buenos.
- Trabajar en lo que nos deja dinero.
Precisamente como usted dijo en esta bonita entrada, el bar es lo que le deja pero no le gusta, ese es un caso, por otro lado puede trabajar en algo que le gusta pero no le deja. Lo ideal sería: Trabajar en lo que nos gusta, que nos deje dinero y que seamos buenos en ello, suena a utopía pero es mi situación, lo peor es que no sé cómo decirle a la gente el secreto del éxito porque siento que tendrían que volver a nacer, el diseño gráfico lo llevo desde chiquito, me encanta y la facultad me hizo bueno en ello y deja, de hecho me voy de vagaciones con mis ahorros, ya sabrá a fin de mes a dónde me voy a ir, porque voy a cerrar el bloguito por un rato en lo que regreso pero dejaré el tuiters para informalres de todo, prometo fotitos y tal vez videos.
Publicar un comentario