Por pensamientos me refiero específicamente a plática en el cráneo, una perpetua y compulsiva repetición de palabras, de estimaciones y cálculos.
No digo que pensar sea malo, como todo lo demás, es bueno con moderación, un buen sirviente pero un mal maestro.
Todas las personas que se hacen llamar civilizadas se han vuelto cada vez más locas y autodestructivas porque a través de pensar excesivamente, han perdido el contacto con la realidad.
Es por eso que
confundimos señales
con el mundo real.
La mayoría de nosotros preferiría dinero que riquezas tangibles, un gran evento de alguna manera se arruina a menos que tomemos fotografías, leer acerca de él al día siguiente en el periódico es extrañamente más divertido que el evento original.
La mayoría de nosotros preferiría dinero que riquezas tangibles, un gran evento de alguna manera se arruina a menos que tomemos fotografías, leer acerca de él al día siguiente en el periódico es extrañamente más divertido que el evento original.
Esto es un desastre, porque como resultado de confundir el mundo real con puras señales estamos destruyendo la naturaleza, estamos tan metidos en nuestras mentes que hemos perdido nuestros sentidos.
Es momento de despertar.
¿Qué es la realidad?
Obviamente, nadie puede decirlo porque no son palabras, no es algo material, es solamente una idea.
La realidad es...
no se puede explicar con palabras.
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