Nunca te expliqué cómo funcionaba
lo siento.
Ahora vas por las calles preguntándole a la gente qué hiciste mal
ahora tratas de olvidar y los recuerdos no quieren borrarse
ni siquiera con alcohol barato
ni cuando duermes.
Lo siento, nunca te dije las consecuencias
y mientras jugábamos el juego todo estaba bien.
Ahora buscas a mis amigos para preguntarles por mí
bailas con otras en la misma cama
vomitas hasta creer que me has sacado por completo.
Pero no me voy, ¿verdad?
Una vez que me tocas no vuelves a estar solo.
Ahora tendrás que llevarme a todas partes
incluso si mi recuerdo se siente como estarte ahogando constantemente.
Sueñas con mis dedos en tu piel mientras acaricias otros cuerpos
sueñas con mi regreso y único que encuentras son palabras que no dicen nada.
Y ahí está: la constante, la locura, las alucinaciones.
El delirio de amor que nadie va a poder curar.
Porque cuando me tocan nunca vuelven a estar solos.
Soy fantasma
soy maldición
soy canciones a la mitad de la noche
soy lágrimas en la ducha
soy sueños de los que parece que no despiertas.
Me llamas pesadilla
me llamas la indicada
me llamas
y no hay respuesta.
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