lunes, 31 de agosto de 2020

Qué es real, qué no

Vivo pensando constantemente en que, en realidad, no sé verdaderamente cuál es la verdad de las cosas. Y es que si nos ponemos a pensar, incluso desde que nacemos, el viaje hacía la incertidumbre es inevitable. Cuando tenía apenas 3 años mi mamá me enseñó a leer y escribir, desde entonces, en mi pequeña mente pensante se formularon un montón de dudas que no he podido resolver, y la principal es: ¿de dónde rayos venimos?
Sí, yo sé, a través de la historia un montón de respuestas han sido arrojadas al mundo, al universo, a mi mente: que si los dioses griegos, que si Dios, que si Alá, que si Jehova, Adán y Eva, una explosión, extraterrestres, evolución y ya...
¿En qué creo?, y sobre todo, ¿cómo puedo creer en algo de lo que ni siquiera puedo estar segura?
Por mucho años creí fielmente en la iglesia, hasta que entré a la prepa, luego a la universidad y muchas verdades fueron arrojadas a mí como un balde de agua fría. Entonces, simplemente dije: no más, soy una mujer de ciencia, la evolución es la respuesta a mis dudas (claramente no era verdad, porque incluso la ciencia no me dice de dónde rayos se generó todo esto).
El caso es que el fin de semana pasado estaba en casa de mi mamá, viendo videos, as always y ¡bum!, algo que jamás en la vida se me había ocurrido se pone delante de mí: La teoría de la evolución es falsa.
¡¿Qué?!, ¿he vivido engañada todo este tiempo?, ¿cómo puede ser?
Así que entro a Google y busco respuestas, y ni siquiera termino de leer los artículos porque me entra una sensación que no me deja en paz: pánico.
¿Qué es verdad?
¿Será entonces que Dios en realidad sí existe?, ¿que lo que no deberían existir son las religiones sino simplemente el amor?
Dios es amor, dicen.
Ay, mi corazón se encoge, e intenta rezar por las noches pero no le sale, ni siquiera sé cómo volver a creer en algo en lo que dejé de creer hace más de 10 años.
El caso es, que estoy más confundida que nunca, pero quiero encontrar respuestas, aunque no las haya, no del todo, sino que dependen...
de mí.

jueves, 27 de agosto de 2020

A.W.

 Estuve esperando, y esperé tanto que en los huesos de mis costillas comenzaron a formarse telarañas, y entre mis dedos crecieron algunas florecillas. 
Quisiera poder decirte lo mucho que significaste, a veces, los recuerdos en mi mente se ven borrosos, a veces, mi ansiedad me hace recordar las cosas que no fueron tan buenas, en realidad, creo que solo fue una cosa, pero no quiero hablar de eso.
He estado soñando con Nueva York, contigo y tus labios, con nuestras manos entrelazadas.
Me vuelve loca la espera, hace días me escribiste mientras tu cuerpo estaba intoxicado con alcohol, me pareció romántico al principio, luego lo pensé bien y me pareció casi trágico.
Quisiera que mi mente no estuviera inundada de tanta cursilería y que no le importara un carajo acerca del amor.
Cuento los días para volverte a ver, en mi mente todos los días es 15 de febrero del año que viene y todos los días bailamos la misma canción: en medio de la pista, tú con traje de gala y yo con un vestido (aún no elijo el color) largo y hermoso.
Cinnamon, in my teeth, empieza a sonar y yo descanso mi cabeza en tu hombro, y todo tiene sentido al fin. En mi mente compro un boleto de impulso y te escribo a las 5am para decirte, ¡Sorpresa!

Y luego recuerdo que tengo casi 27 años y ya no puedo vivir de fantasías y metáforas, que la vida real me espera, soy feliz, te lo juro, pero sé que podría serlo aún más si estuvieras a mi lado.

Si no nos separaran kilómetros, y no solo de distancia.

Incluso yo sé que no hago sentido, que no puedo poner tantas expectativas sobre tus hombros. He aprendido, ¿lo sabes, verdad?, es una lástima, porque ahora puedo verlo en todos lados menos en mí, y la espera, ah, la espera me mata todos los días. 

Es una maldición y una bendición que estés tan lejos. 
Te extraño
te espero
mientras muero.

miércoles, 26 de agosto de 2020

La rutinaria vida de una ventintitantosñera...

 Me despierto 6.30 am, a veces pospongo la alarma hasta las 7, pero lo hago con mucha culpa, pues sé que se me hará tarde. Me levanto, voy al baño, me lavo la cara, me pongo mis cremas, bloqueador, me visto, me maquillo, escucho música o un podcast, escribo en mi diario, tomo café, desayuno, pongo mis cosas en la mochila y me voy a trabajar. Dependiendo de cuánto tarde el camión en pasar, puedo llegar en 30-50 min a mi trabajo. 

Trabajar no se siente como trabajar muchas veces, la mayoría del tiempo tengo oportunidad de hacer otras cosas como ver videos o leer, o si tengo evaluaciones pendientes o sesiones que planear, lo hago. A las 2pm o antes regreso a casa, como, a veces tomo una siesta, dependiendo que día sea o tomo mi clase de portugués, o voy a mi práctica de Jarana. Luego trabajo a veces de 4 a 6 a veces de 4 a 7pm. 

Fin del trabajo, ¡al fin!, me cambio para ir a correr junto a mi mamá, si un día no puedo ir por alguna situación el particular, entonces hago ejercicio en casa.

Luego de ejercitarme hay varias opciones: o salir con mis amigos, o ir a la playa, o leer, o ver netflix o youtube. 

Cenar, ver más videos, leer, dormir.

La mayoría de las personas creen que tener una rutina es aburrido, o monótono, yo he descubierto que tener una rutina me da algo que amo con todo el corazón: seguridad. Y cuando me siento segura también tengo paz, a veces estoy teniendo un día lleno de estrés después de haber dado clases o terapia y luego voy a correr y automáticamente me siento bien. 

lunes, 24 de agosto de 2020

No netflix por una semana: qué pasó

 Ya pasó una semana, finalmente puedo volver a usar Netflix, y la verdad es que siento que no me perdí de nada. Excepto en los días en que me sentía en extremo aburrida, sí quería abrirlo para ver alguna serie, pero me resistí. Y en vez de eso, la verdad es que sí vi youtube, pero no demasiado, y ¡leí mucho!, le comparto aquí el libro que terminé:


"Such a fun age" de Kiley Reid

Buenísimo, entretenido y divertido, es todo lo que puedo decir.

También comencé a leer dos más:


"Adults" de Emma Jane Unsworth, que apenas lo comencé ayer y mis primeras impresiones es que es un libro un poquito raro, pero veremos.

y


"Using your brain for a change" de Richard Bandler, un libro acerca de Programació Neurolingüistica que hasta ahora me ha resultado bastante interesante.

Así que, en realidad, creo que dejar Netflix por una semana me ayudó bastante y ahora me pregunto qué deberé de dejar por esta semana, ¿instagram?, ¿youtube?...

lunes, 17 de agosto de 2020

Desafío semanal: no netflix

 Una nueva semana comienza, una nueva oportunidad de hacer cosas increíbles, y en mi caso, a seguir con mi rutina. Pero, cada que me meto a pinterest de repente me aparecen cosas interesantes y me gusta guardarlas para después. En este caso, vi una imagen que decía "weekly challenges", y la guardé.

Entonces, aunque me parece demasiado difícil, voy a hacer el de esta semana que es:

UNA SEMANA SIN TV

En mi casa, pues ni siquiera tengo TV en casa, pero sí tengo una aplicación que uso bastante seguido y es netflix, entonces, aunque sé que me va a costar mucho trabajo, esta semana me voy a abstener de ver series. Y no voy a borrar la aplicación, la voy a dejar ahí solo para demostrarme que sí tengo fuerza de voluntad.

Y ya sé, que quizá no es la gran cosa, pero yo me entretengo bastante viendo series, puedo ver series el día entero, especialmente los fines de semana, entonces, ya les contaré qué pasa en mi semana, espero, que con esta prohibición pueda escuchar más podcasts y leer. We'll see. 

domingo, 16 de agosto de 2020

Diana

 Hay una canción que describe a la perfección mi sentimiento, pero no puedo acordarme de su nombre ahora, así que lo único que puedo hacer es acostarme, ni siquiera logro llegar a mi cama, así que me siento en el suelo y poco a poco siento el peso de mi cuerpo y cómo lentamente cae al suelo, como un niño que está demasiado cansado cae en los brazos de su madre. No me imaginé que dolería tanto. Lo vi en las películas, lo leí en los libros y mi padre me lo advirtió una y otra vez: "no te hagas ilusiones", pero no pude evitarlo, no pude contener mi emoción al saber que la celebración de primavera sería con un baile, en medio del pueblo, en mi lugar favorito, y sería adornado con miles y miles de flores, las chicas usarían vestidos hermosos y yo, al fin, estrenaría el traje que había comprado cuando se supone que asistiría a una boda.

Diana es la mujer hermosa que pueden imaginar, en verdad, lo es. La vi por primera vez cuando ambos teníamos 6 años y entramos a la primaria, mis ojos no podían comprender cómo un ser humano podía ser tan perfecto, así que en mi mente, comencé a llamarla "Ángel", porque solo un ser celestial podía ser comparado con su belleza. Pero el Ángel y yo nunca nos hicimos amigos, ella era la niña más popular, y yo el pequeño ratoncito que se la pasaba leyendo, sentado siempre en la misma banca a la hora del recreo. Los años pasaron y Ángel se fue haciendo más y más hermosa: su cabello negro creció larguísimo, sus ojos castaños parecían más bien dos bolas de cristal, a veces los miraba sin que ella se diera cuenta, intentando ver mi futuro, su cuerpo creció, al igual que el mío: pronto dejé de ser un ratoncito, para convertirme en una jirafa. Medía 1.82 con solo 12 años. 

El único que sabía de mi devoción por Diana era mi padre, se lo conté un día mientras cenábamos, y el solo dijo "ten cuidado, no te ilusiones", yo tenía 14 años y comprendí hasta mucho después de dónde había salido esa advertencia: cuando él tenía apenas 20 años, se enamoró perdidamente de mi madre, quien lo rechazó siempre, hasta que un buen día, llegó llorando a sus brazos, "estoy embarazada" le dijo "mi vida se acabó", mi padre, sin dudar ni un momento, le pidió que se casaran, nadie sospecharía que el bebé no sería de él, y aunque mi madre no lo quería, al menos no tendría que soportar la vida por su cuenta. Mi madre aceptó, pero al poco tiempo de que nací, se fue, desapareció por completo de nuestras vidas y jamás volvimos a saber de ella. 

Cuando anunciaron el baile de primavera, mi corazón se llenó de emoción, porque finalmente podría expresar mis sentimientos hacía Diana, sabía que no era el único que la invitaría, pero al menos debía intentarlo. Compré un ramo de girasoles, porque a lo largo de nuestros años de juventud logré descubrir que eran sus flores favoritas, me puse la ropa más formal que encontré en mi closet: un pantalón de lino color café, zapatos negros y una camisa blanca. En nuestro pueblo, todos sabían dónde vivían los demás, así que sabía a la perfección cuál era la casa de Diana, durante todo el tiempo que compartimos los mismos lugares en común, jamás había conocido a sus padres, sabía que vivía con su abuela, sabía que tenía un hermano menor al que a veces veía, y sabía que había comenzado a trabajar en la paletería de 3 a 7pm. Pero era domingo, así que seguro estaría en casa.

Me paré frente a la puerta, sopesando mis dos posibilidades: si Diana decía que sí, me convertiría en el ser más feliz del universo, y decía que no, bueno, no había pensado en realidad hasta ese momento qué pasaría si decía que no, pero suponía que dolería, y dolería demasiado. Cuando toqué, no me imaginé lo que ocurriría a continuación, verán, mi padre, aunque ocultaba bien su dolor, a veces lloraba por las noches, yo lo escuchaba a través de la pared y lloraba con él, acompañando su dolor, a veces, cuando él se iba a trabajar y yo me quedaba solo en casa, iba hasta su cuarto y sacaba la foto que conservaba en el cajón junto a su cama; era una foto de mi madre, era hermosa en verdad, con ojos castaños y cabello negro y lacio, una pequeña nariz que apenas resaltaba de su rostro y labios pintados de rojo, en la foto sonreía con una emoción desbordante, y cuando la veía, yo también sonreía con ella.

Cuando la puerta se abrió, la mujer delante de mí sonrió, y yo sentí que algo dentro de mi despertó, tenía los labios rojos, el pelo negro y lacio y una nariz pequeñita. "Hola", dijo ella, "¿buscas a Diana?, debo decirte que no eres el primero, más de 3 chicos han venido hoy, por lo que veo tengo una hija bastante popular", Diana se acercó a la puerta, me miró confundida, "¿estás bien?", preguntó, yo me sujeté como pude de la puerta, "¡Mamá!", gritó el Ángel, "parece que se va a desmayar", y al otro lado de la ciudad, mientras mi padre trabajaba en la fabrica, se escuchó un sonido que nadie había oído jamás, un estruendo que años después se convertiría casi en leyenda, el sonido que estremeció al pueblo entero: nadie, nunca volvería a escuchar un corazón rompiéndose así de fuerte, así como lo hizo el mío. 

viernes, 14 de agosto de 2020

Hoy es viernes

Hoy es viernes, y mientras iba camino al trabajo, me llegó un mesaje tuyo, y entonces, me di cuenta de que no había pensado en ti, hacia tiempo ya.
Toda esta narrativa que construí en mi cabeza: de que serías mi salvador, de que las cartas me habían dicho que serías el indicado para mí, de que en mi corazón, la completa y absoluta idea de que eras tú el hombre que me complementaría reinaba. 
Todas estas ideas se han ido desvaneciendo poco a poco con el paso de los días, ha pasado un mes desde que estuve en tus brazos, desde aquel "lo siento, adiós", y yo en el elevador, de vuelta al 5to piso, de vuelta a la realidad.
Pero no quiero que pienses que esto es un reclamo, no, esta es mi manera de darte las gracias: este ha sido uno de los mejores meses en mi vida, llegué a casa y sentí como algo se desprendía finalmente, como una costra que has estado tratando de quitar, no se va, hasta que llega su tiempo.
Dejé de tomar, dejé de fumar, dejé las aventuras de una noche. Comencé un curso de psicología, de autosanación, caminé de nuevo cada tarde, me dormí temprano, reí como loca con mis amigos, fui sola a ver el atardecer, entré en el oceáno y me bauticé a mí misma:
Zuleyma Janeth, yo te perdono, yo te amo, yo te cuidaré a partir de hoy...y para siempre.
Leí 3 libros, empecé a estudiar portugués, escuché podcast y mucha música nueva, después de muchos intentos fallidos, comencé a meditar. ¡Todo en un mes!, ¿puedes creerlo?
Quizá, estoy escribiendo esto porque tengo miedo, sí, a pesar de todo tengo miedo y es palpable. Hoy, cuando vi tu nombre en la pantalla de mi celular, sonreí automáticamente, cómo quisiera que estuvieras aquí, como quisiera escuchar tu risa horrible que aturde a cualquiera, como quisiera ver tu sonrisa y sentir tu mano aferrada a la mía, sudorosa, mundana, normal.
Somos solo 2 personas que se encontraron en donde deberían encontrarse, sé que tu vida está cambiando también, te compraste un teléfono, ¡al fin!, vas a encontrar un nuevo trabajo, yo lo sé, y quizá vas a mudarte.
Yo tengo a New York en mente desde hace semanas, quisiera verte de nuevo, encontrarnos en la ciudad de mis sueños y poder agradecerte en persona.
Hoy es viernes y tengo la certeza de que será un gran día. 

domingo, 9 de agosto de 2020

¿Qué es del amor sin obstáculos?

 Desde pequeña me enseñaron

que al amor hay que engañarlo, 

hay que ponerle trampas para que caiga

y cuando lo tengamos en brazos

existirán

irremediablemente

personas, circunstancias o pensamientos que nos querrán separar.

Y ahora he crecido,

y me pregunto, si verdaderamente es necesario.


Un amor sin obstáculos, ¿qué es?

Libertad de amar, una jaula que no tiene llave,

paz y tranquilidad.

¿A quién se le ocurrió?

Que para amar hay que vencer la adversidad, 

hay que derrotar al monstruo. 


Desde pequeña me enseñaron

que si amas a alguien tendrás que sufrirlo:

por las noches y mientras el sol oculta su calor,

mientras el amado está lejos, 

o una mujer malvada se entromete en el camino.


Y ahora que crecí, me pregunto,

¿qué sera del amor sin los obstáculos?

energía que viaja sinfín, la sangre en mis venas

poesías, canciones y novelas 

que no hablan de pasión desbordante

sino de dos corazones que se encuentran

y saben al instante que jamás, nunca jamás

volverán a ver atrás.

domingo, 2 de agosto de 2020

Reformulando mis lemas de vida

1. " amor se encuentra joven" por el amor propio se debe trabaja desde joven. 

2. "el amor verdadero es simple" por el amor verdadero soy yo, lo demás viene desde ahí.

3. "la fantasía es mejor que la realidad" por la fantasía me permite escribir, pero sé que eso solo eso, fantasía, y una vez que se termina, puedo seguir con mi vida.

4. "no funciono sin amor" por el amor está en las cosas más simples, como ver el atardecer, y me inspira todos los días.

5. "debo aprender a enamorarme sin ver borroso" por me enamoro desde la seguridad, confianza y mi amor propio me permite establecer límites.

6. "tengo un corazón sentimental y medio ciego" por mi corazón me permite apreciar la vida y le doy las gracias.

7. "debo aprender a amarme como amo a los demás" por primero me amo a mí, de ahí nace el amor por los demás.

8. "la mitad de mí quiere vivir en la ciudad, la otra no quiere irse" por me permito vivir la vida entre dos mundos: la ciudad y la playa.

9. "mi vida debe tener un propósito" por vivo mi vida con amor, con la convicción de que si tengo paz, eso le doy a los demás.