viernes, 29 de abril de 2022
Baby Jack
En fin, supongo que debo explicar todo desde el principio: cómo llegué aquí de nuevo, sí de nuevo.
Lo que nadie explica en las clases de religión o ciencia es que la reencarnación sí existe, pero no es el cuento hermoso que los hindús creen, lo diré alto y claro: ES UN DOLOR DE CABEZA.
Créeme, nadie quiere nacer una y otra vez, especialmente si tienen que pasar por la pubertad, o si te toca una familia horrible o si naces con una rara enfermedad sin cura, pero eso sí, o el universo tiene sentido del humor, o esto es un experimento que un científico loco está realizando en un laboratorio, no lo sabemos, quizá nunca lo sabremos.
Esta es mi tercera vida, soy bastante joven, he conocido a bebés que ha vivido hasta 200, me gusta decirles cosas como: ¡Suicidate!, solo para reírme de lo patética que es la existencia. ¿Hay manera de salir de este ciclo infinito?, no, no la hay, o al menos nadie la ha descubierto aún.
Así que aquí estoy, de nuevo, con mocos en la nariz, comiendo verduras licuadas que parecen vómito, además, como ya mencioné, mi mamá es una idiota que cree que me está dando lo mejor, y su cosa favorita en el mundo es comer espárragos con atún sellado.
En realidad, no sé si ella o mi papá son peores seres humanos, ella es vendedora de productos que compras por catálogo y crees que son indispensables y maravillosos, hasta que los tienes en casa y te das cuenta de que no sirven de nada. Él es…es…la verdad no sé qué es, pero todos los días se pone una camisa de cuadros y sale de casa muy temprano y llega hasta muy tarde, siempre borracho. Mi mamá se vuelve loca, está desesperada porque su marido le ponga atención, y él la ignora aún más por eso.
Para su edad, obviamente ya no recuerdan que un día fueron otras personas, todos dejamos de recordar nuestras vidas pasadas alrededor de los tres años, alguno que otro se obliga a recordar, pero de nada sirve, un día te vas a dormir y al día siguiente: nada, solo existe el aquí y ahora.
Me da miedo olvidar, pero sé que lo haré, no puedo evitar pensar en lo ridícula que es la existencia y en lo mucho que pasamos el tiempo intentando darle un sentido. ¿Cielo?, ¿infierno?, nada de eso existe, lamento informarle a todo el mundo que su existencia no es más que un pequeño punto en una galaxia donde hay millones más. Sí, la vida apesta, te mueres, ¡y luego vuelves a nacer!
En mi vida pasada era un hombre millonario, tenía una empresa de embotellamiento de agua y me pasaba los días volando en mi jet privado, con prostitutas a mi lado; yo lo tenía todo. O al menos todo lo que el mundo te dice que debes desear: un buen trabajo, montones de dinero y buena apariencia. Pero todo eso aburre, al final, me metí demasiada coca y terminé en el baño convulsionando hasta morir, completamente solo. Fue un alivio salir de esa vida, y fue una pesadilla tener que entrar a una nueva. Creí que iba a ser mujer, hasta ahora solo he sido hombre, y a decir verdad, la paso bien con esta cosa entre mis piernas, pero quiero experimentar estar del otro lado… algún día.
Sé que esta existencia será horrible y quiero morirme ya, no es mi obligación quedarme si no me gusta, ¿verdad?, pero ya lo he intentado todo, y la imbécil de mi mamá no me deja de mirar ni un segundo: si quiero aventarme de la silla de comida, ella me atrapa, si quiero aventarme de las escaleras, ella corre tras de mí, si quiero ahogarme en la tina de baño, ella me saca, incluso pensé que sería fácil asfixiarme con la almohada, pero ella está ahí todo el tiempo, no duerme, le dijo a mi papá que yo soy un bebé raro con tendencias suicidas, y, ¿quién no lo sería en esta familia?
Me vuelvo loco de pensar que tendré que esperar más tiempo, quizá años para matarme, y para ese entonces quizá ya no recuerde cómo llegué aquí, quizá nunca haga nada y me quede estancado en esta miserable vida. (Seamos realistas, seguro voy a estar estancado aquí)
Esto es en lo que pienso mientras mi mamá y sus amigas me pasan entre sus sucias manos y dicen cosas estúpidas como: “¿no te encanta lo inocente que se ve?”
miércoles, 20 de abril de 2022
Cartón de leche
En Arizona, esperando el asiento del pasajero, siempre la misma historia y aquí va de nuevo:
martes, 19 de abril de 2022
Tefi y Mauricio: ahora
domingo, 10 de abril de 2022
Far, far away
He estado leyendo Jurassic Park, una novela acerca de 1920, y poesía.
He estado yendo al gimnasio por las mañanas, y jugando pickleball.
He estado pasando el tiempo con mi sobrina, yendo a la playa, al parque, o a la alberca.
He estado escribiendo acerca de la vida, ya sea la mía o de mis amigas.
He estado ocupada, trabando, tratando de ahorrar, aburrida a veces, sin saber qué hacer.
Porque te extraño.
Porque hoy, quedan 24 días para volverte a ver.
Y aunque la gente me dice que no es mucho tiempo, la verdad es que no tienen idea de lo que hablan.
Han pasado casi tres semanas.
Y se siente como una eternidad.
Los kilómetros que nos separan,
no puedo esperar para volarlos, para vencer la distancia, para dejar de sentirte
tan
tan
lejos.
miércoles, 6 de abril de 2022
Girls in the city: Esty
Esta vez voy a contar la historia de Esty. Su mamá la nombró Esteban cuando nació, ¿pueden creerlo?, ¿qué clase de madre le hace eso a su hija?, tal vez piensen que una madre terrible, pero en realidad, la mamá de Esty es bastante buena, a veces un tanto sobre protectora, pero en general, no es mala en absoluto (excepto porque la nombró Esteban...)