domingo, 27 de octubre de 2024

Refúgiate

No sé si estoy soñando, o solo es daño colateral de mis acciones. Todo empezó inocentemente, como la mayoría de las cosas en esta vida, pero de pronto se volvió complicado sin darme cuenta. Para empezar debo decir que no creo en Dios, ni en deidades de ningún tipo, pero me gusta divertirme y hacer bromas a mis amigos, y así es cómo empezó todo: me retaron a subir un video a internet, diciendo que había tenido una aparición de Dios, lo relaté todo con muchos detalles, soy muy bueno inventando historias, siempre me ha gustado la fantasía y el terror, así que fue fácil decirle al mundo que yo sabía cómo se veía Dios y claro que me volví viral.
Por supuesto que muchas personas solo se rieron y me llamaron idiota, pero lo sorprendente llegó después de unas semanas, cuando me contactaron para hablar en la televisora local, ni siquiera lo pensé dos veces y dije que sí, me hicieron una entrevista y traté de actuar lo más serio posible, hasta me puse una corbata y toda la cosa. Por dentro no podía aguantar la risa; estos idiotas no podían encontrar algo más interesante que mi estúpida historia. Pero algo dentro de mí también sabía que habría consecuencias, y pronto las descubriría.

Para empezar mi mamá se desmayó cuando me vió en la televisión de la sala, me recibió casi aventándome un chanclazo y diciéndome que si Dios no me castigaba ella lo haría por mentiroso y además pretencioso.
-Mira que salir en la tele diciendo tantas mentiras, solo a ti se te ocurre Ramiro, eres un pendejo, y Dios te va a castigar, de mi te acuerdas. 
Pero cuando le dije cuánto me pagaron por esa entrevista se le iluminaron los ojos y casi se desmaya de nuevo:
-¿Estás hablando en serio Ramiro?
-Sí mamá, y ya mejor cómete un plátano porque parece que te hace falta potasio, de tanto desmayo.                                                                                                                                                                         
El video de Youtube tuvo millones de vistas, al parecer el mundo necesita entretenimiento sin importar de qué se trate. Pronto mis amigos me convencieron de subir un segundo video, mi mamá me hizo una última advertencia:
-Vas a ver que tu suerte va a expirar y yo no quiero estar ahí para ver, en cuánto tengas suficiente dinero te me vas de la casa.
Yo acababa de cumplir 17 años, pero estaba haciendo más dinero que mis papás, y todo por un video y gente crédula.
En fin, terminé saliéndome de mi casa dos meses después y cinco videos más. Rente una casa para mí y mis dos mejores amigos que me convencieron de subirlos, mi vida era un sueño o eso pensaba; me puse brákets para acomodarme los dientes que siempre había tenido chuecos, me compré ropa nueva, un carrito madreado pero que jalaba bien, y hasta le daba dinero a mi mamá que a duras penas aceptaba.

Hasta que pasó.

Empezó con comentarios agresivos, "si te veo te voy a matar por burlarte de Dios y de nosotros", siempre el mismo usuario, al principio no le presté mucha atención hasta que de pronto me dejaba comentarios más y más agresivos, y lo bloqueé de mi canal, pero de alguna manera consiguió mi whatsapp y me empezó a mandar mensajes ahí. 
-"sé donde vives, un día de estos me voy a pasar por tu casa y vas a ver, cabrón"
No sabía qué hacer, le tuve que contar a mis papás que me dejaron quedar en su casa mientras se arreglaba el asunto, mi mamá no paraba de decirme que era toda mi culpa por jugar con cosas de Dios. Bloqueé el número pero luego apareció otro:
-"no te vas a deshacer de mí tan fácilmente, sé dónde estás"
Finalmente mi papá me acompañó a la estación de policía a ver si ellos podían hacer algo, pero solo me dijeron que tuviera cuidado y dejara de subir pendejadas al internet.
Lloré por primera vez en años, borré los videos del internet y me sentí tan estúpido y asustado que terminé rezando por las noches a un Dios que no sabía si estaba ahí pero le pedía que por favor no dejara que algo me pasara.

Unas semanas después parecía que todo había vuelto a la normalidad, aún seguía viviendo con mis papás, por si acaso, pero mi mamá me empezó a insistir que me regresara a mi casa.
-No sé si me voy a poder seguir quedando ahí, ¿cómo voy a pagar la renta?
-Lo siento mijito pero una vez que te sales de la casa, aquí no vuelves.
No podía creerlo. Le conté a mis amigos y ellos dijeron que podían aportar para la renta pero que probablemente tendría que conseguir un trabajo "real", terminé siento mesero de un restaurante en donde el dueño siempre se quedaba con las propinas y me hacía lavar los portavasos una y otra vez porque le tenía miedo a los gérmenes.

Y es aquí donde llegamos al día de hoy, que vine de nuevo a visitar a mis papás, mi mamá cocinó chiles rellenos y arroz, hablamos de lo ridículo que había sido mi "ascenso a la fama", ella se río sin parar. 
Su celular sonó y me pidió que se lo trajera, que estaba conectado en su cuarto. Cuando fui a desconectarlo vi que había dos celulares conectados y no sabía cuál era el de ella, así que desbloqueé el primero, pero no encontré nada que me diera señales de que ese era suyo:
-¡mamá!, ¿cuál de los dos celulares es tuyo?
No hubo respuesta, así que me metí a los mensajes para checar, y es ahí que casi me desmayo. Ahí estaban un montón de mensajes que reconocí al instante:
"te voy a matar por burlarte de Dios", "sé dónde vives no te puedes esconder de mí", "eres una basura y espero que te mueras"
No lo podía creer, en shock me llevé el celular en la mano y salí corriendo de la casa. 
No sé si estoy soñando, o solo es daño colateral de mis acciones. Lo que sé es que a esa casa no regreso, nunca más.

jueves, 24 de octubre de 2024

la célula que explota

Nada me va a detener, pueden poner mil barreras, pueden tratar de tirarme al suelo como lo han hecho un montón de veces pero nada me va a detener. Supongo que debería explicarme primero, pero no tengo mucho tiempo ya que estoy creciendo a velocidades que no comprenderían, así que lo haré lo más rápido que pueda.

Fui creado en un laboratorio, en un pequeño frasco de apenas 10cm de diámetro, había un montón de doctores o cientificos o algo similar cuando desperté y todos celebraron como locos. Lo que pasa es que el gobierno les ordenó que hicieran un arma, pero un arma que pareciera indefensa y que fuera letal, ustedes saben, lo han intentado hacer un montón de veces. Pero cuando desperté, supieron que finalmente habían dado en el blanco. 

Escuché un montón de cosas mientras crecía: cómo el gobierno quiere matar a medio mundo pero es un secreto a voces y nadie tiene un documento o algo que lo confirme pero lo han estado intentando por muchos, muchos años. Hasta que llegué yo y entonces pasaron un montón de cosas que se salieron de control, para empezar no pensaron que fuera a crecer tanto, empecé como una pequeña masa, como la masa de las tortillas, digamos, para que me entiendan, del tamaño de una papa y al día siguiente ya tenía el tamaño de una sandía, y así, fui creciendo a un ritmo que no se había visto antes. 

No tengo forma pero digamos que soy como un imán de todo lo malo, una vez que estoy cerca de ti, no te puedes salvar; la muerte llega de una u otra manera, a veces en forma de una enfermedad, a veces en forma de un accidente, no sé cómo funcionan estas cosas pero nadie se salva, y cuando digo nadie, en serio me refiero a nadie, ni siquiera mis creadores se salvaron, los maté a todos sin excepción, y ahí es cuando las cosas se empezaron a poner feas, porque no han logrado detenerme o "eliminarme" como ellos lo llaman. 

Han intentado un montón de cosas, pero todas han fallado, y yo sigo tocando timbre tras timbre y en toda casa que toco, les llega la muerte de alguna manera, a veces me quedo para ver, pero la mayoría de las veces estoy tan aburrido que mejor sigo mi camino. A veces me pregunto a cuánta gente he matado ya, a veces me pregunto si un día pararé, pero yo fui creado para esto, entonces no creo parar hasta exterminar a todos los humanos de este planeta tan extraño.

¿Qué pasará después? no lo sé y no me importa, yo solo estoy siguiendo mi propósito, así que si estás leyendo esto, solo quiero advertirte que un día voy a llegar a ti, como un puñal en la espalda que nunca esperaste, ¿ves cómo no te dije en realidad cómo luzco?, es para que no te espantes y también para que no me esperes ni me busques, solo ten por seguro que llegaré, más pronto de lo que esperas.

jueves, 17 de octubre de 2024

La campana de cristal

 En muchas ocasiones en mi vida he tenido la campana en mi cabeza, tapando, nublando mi vista, haciendo todo más bien como una mancha borrosa. Cuando eso pasa no me queda más que irme a la cama y pasar ahí varias horas, contemplando, "¿qué está mal?", "¿por qué no puedo crear nada digno?", "¿esta es la vida que siempre soñé?"
En el árbol de la vida tomé la manzana equivocada quizás, pero ya es muy tarde, muchas de las otras manzanas se echaron a perder y se me fueron oportunidades para siempre, ¿dónde podría estar ahora de haber tomado una diferente? nunca lo sabré. 
También hice cosas ridículas como dejar de comer por semanas, porque no tenía ganas de seguir viviendo, porque todo lo que hasta ese momento consideraba real se hizo pedazos de la noche a la mañana.
Nunca estuve en un psiquiátrico, nunca tomé medicinas, simplemente algo en mí cambió, como un rayo de luz que viene por la mañana y se cola por la ventana y te abraza mientras te dice que todo estará bien.

Aún así la campana de cristal nunca se va por completo, me sigo preguntando si estoy donde se supone que debería de estar a mis casi 31 años.
Sin hijos, sin un anillo en el dedo corazón.
Pero quién dicta las normas, y quién no me asegura que en alguna vida pasada no fui una mamá miserable, y en esta vida tengo la oportunidad de vivir cómo antes había deseado: sin hijos.

No sé por qué me identifico tanto con el sentimiento de la tristeza, estar al límite, o querer pasar días enteros en la cama o estar en lo alto de una montaña; es todo un extremo o nada. Pero aún así estoy bien, pensando en las posibilidades infinitas que tengo en la vida, luchando para que la campana no se pose de nuevo sobre mí, hay algo que me persigue, un sentimiento como de nostalgia por todas las vidas no vividas.

domingo, 13 de octubre de 2024

Suficiente

 Ya no quiero hacer cosas en contra de lo que soy: estoy cansada.

Esta es la cosa: muchas chicas ya han hablado de este tema, lo sé, estoy consciente, hay muchas canciones, películas, series, etc hablando sobre esto, pero cuesta trabajo no ir en contra de una misma, y a la vez, sentirse cómoda con lo que una es. 
Controversial, lo sé, uff, ser mujer es un show de televisión en sí, uno que es bueno a veces pero luego quieres saltarte varios capítulos porque la protagonista está llorando otra vez sin razón aparente. 

Crecemos con la idea de que tenemos que buscar ser la mujer perfecta para encontrar un hombre. Así, desde el principio es "amm, no, no te confundas, no tienes que ser perfecta para ti -lo que sea que eso signifique- tienes que ser perfecta para los demás, especificamente para los machos", porque a final de cuentas, claro que queremos ser amadas y aceptadas y ¿cómo vamos a hacerlo sino nos vemos como las demás se ven?

Eso quiere decir
-no tener pelos
-tener el pelo controlado, ni un poquito de frizz por favor
-no tener bigote
-estar delgada pero no tan delgada, pero no caer en la categoría de "gorda"
-tener un buen culo y unas buenas bubis
-medir más de 1.70
-ser rubia, y si no naciste rubia natural pues pintate el pelo mija
-tener el tono de piel tan claro como una barbie o como las protagonistas de las novelas mexicanas que por alguna extraña razón son todas güeras.

Y, ¿qué voy a hacer si soy todo lo contrario a esto?
Soy chaparra, mido 1.55, soy más peluda que muchos hombres que conozco, tengo el pelo extremadamente grueso y negro, que se alborota al más mínimo movimiento, sudo como puerco, en serio, sudo hasta cuando hace frío, a veces me huele mucho la axila y me huelen los pies, sino me depilo diario me salen tantos pelos que me hacen desesperarme, tengo la piel morena y aún me salen espinillas aunque me lavo la cara a diario, no voy a tener el vientre plano nunca, etc, etc.

Quise ser rubia por mucho tiempo, hasta lo intenté y de verdad me veía ridícula. Me depilé completamente con cera y fue doloroso, me hice la manicura y pedicura por años, me planché el pelo a diario, me puse cremas para blanquearme la piel, hice ejercicios para aplanar el abdomen, me vi en el espejo y me odié, quería quebrarlo y que de él saliera otra Janeth: la Janeth que no es imperfecta.

Hasta que fue suficiente.
No sé si son los 30s haciendo finalmente su -efecto- pero me siento mejor que nunca. Y decidí que ya no voy a hacer cosas en contra de mí misma: no me voy a pintar el pelo y voy a tratar de domarlo, mi pelo negro me gusta y a veces no me queda más que hacerme una coleta y darme por vencida contra el frizz, no me voy a depilar a diario, me voy a depilar cuando se me pegue la gana y sienta que ya es tiempo, eso lo decido yo, y no la gente que me ve en bikini y me dice "cómo que ya te hace falta depilarte", no voy a gastar y gastar cada semana tratando de "arreglarme", ¡porque no hay nada que arreglar!
Me veo en el espejo y sonrío porque la Janeth que está ahí viéndome ha entendido al fin:
Que se jodan todos si no les gusto, mientras yo me guste voy a estar bien.

sábado, 12 de octubre de 2024

tú y yo

Todo era blanco y negro, pero logré descifrarlo
no conté las horas ni los segundos, pero sé que me tomó bastante tiempo.
Todo el mundo me decía que estaba equivocada
y de repente pasé de la equivocación a la razón.
Tantos silecios y tantos sonidos al mismo tiempo,
y me pregunto si ellos algún día se abrazarán tan fuertemente cómo lo hacemos nosotros,
o si en cambio, son opuestos porque no pueden dejar de pelear.

A veces arriba y a veces abajo, como una montaña rusa,
pero en ningún lugar podíamos ver nuestros errores.
Déjamos de jugar, nos encontramos en el punto medio,
en el lugar donde las cosas se arreglan.

Estábamos tratando con mucha fuerza no ser cómo los demás:
como nuestros padres, como sus errores antes de tenernos,
como las parejas que se van a la cama sin hablar.
Resulta que tenemos en nosotros muchas cosas de los demás,
que no podemos escapar.

Pero sí podemos decidir cómo seguir adelante. 
Todo era blanco y negro hasta que logré descifrarlo:
tenemos muchas cosas en contra, a veces pareciera imposible.
Y estoy segura de que entre los demás y nosotros, en ese espacio que nos separa
es donde están las respuestas.

viernes, 11 de octubre de 2024

A quien corresponda

Sé que debió haber sido difícil para ti cómo le fue para mí, separarnos por tanto tiempo. Nunca pensé que una relación nos separaría, recuerdas cuando soñabamos que un día tendríamos nuestras casas tan cerca de la otra, que seríamos vecinos y nuestros esposos serían también mejores amigos. Éramos ingenuos; pensando que podíamos tenernos y tenerlo todo a la vez. 

Sé que perderte fue como perder una parte gigante de mí; me sentía incompleta, como si un gran vacio se hubiera formado en mi interior, verte por la calle y saludarnos como dos extraños, como dos personas que apenas y se conocieron, cuando solíamos compartirlo todo.

Sé que nadie nunca entenderá cómo fue que crecimos juntos, siendo una pareja tan extraña: un par de locos con pelucas un viernes por la noche grabando videos y bailando al ritmo de canciones de Rihanna. Sé que todos pensaban que cosas raras pasaban entre nosotros cuando cerrabamos las puertas, y sé que los dos nos seguiremos riendo de todos los rumores que hubo por aquí y por allá.

En realidad, sé que jamás podré tener una amistad como la que tuvimos. Nadie nunca podrá igualar el amor que sentí por ti, las risas, las lágrimas, los secretos y todas los chistes internos.
A veces tienes que dejar ir a las personas para poder crecer, y a mi me costó muchísimo soltarte. Pero sé que tenía que hacerlo si quería avanzar, si quería convertirme en la mujer que siempre quise ser, dejar mi etapa de party girl atrás para entrar a la adultez.

Sé que a ti te da mucho miedo hacerlo, que te cuesta el compromiso y le huyes a toda costa, pero sé que te llegará la hora, a todos nos pasa.

Sé que nuestros respectivos orgullos son grandes, y que tuvimos que inventarnos historias para justificar por qué nuestra relación cambió. Pero me da mucho, muchísimo gusto que poco a poco, volvamos a estar en la vida del otro; no será fácil, porque ir de mejores amigos por siempre a -no te hablo por tres años - a amigos de nuevo no es una ruta fácil, pero sí confío en que podamos darnos un espacio en nuestras vidas, quizá no cómo antes, pero de alguna manera, lo lograremos...

viernes, 4 de octubre de 2024

Cosas que me preocupan

 -no tener dinero suficiente
-que mi carro se descomponga en medio de la carretera y que no haya señal
-morir en un accidente de auto
-no tener dinero suficiente para ahorrar y así comprar una casa/terreno algún día
-que mis negocios fracasen
-que el gobierno cierre mis negocios
-enfermarme de algo raro que no tenga cura
-que mi novio se enferme de algo raro que no tenga cura
-que el internet se vaya a la mierda y mis ahorros del banco también
-no tener motivación para escribir
-llorar sin razón aparente
-que me aparezca un animal extraño mientras me estoy bañando
-que tiembre o haya un desastre natural mientras duermo sin ropa
-que mis renteros se mueran
-que mis papás se enfermen de cosas raras
-que mi sobrina se vuelva transexual
-no entenderle a la tecnología cuando me vuelva vieja
-correr sin dolor
-poder correr 21 kilómetros sin parar
-bailar y no poder parar
-cantar y que se me salga un gallito delante de la gente
-nadar y que de repente ya no pueda flotar
-caminar y tropezar e irme de hocico
-no traer paraguas cuando empiece a llover mucho
-que se me revienten las sandalias por pisar popó/un chicle
-caerme por estar caminando y mirando mi celular y que alguien me grabe
-decir algo estúpido y que alguien me grabe y lo suba al internet
-no intentarlo

jueves, 3 de octubre de 2024

El regreso de la Mujer Salvaje

 Un buen día, en lo alto de un acantilado una mujer cerró los ojos y se lanzó al vacío. Lo que no sabía, es que el viento la tomaría en sus brazos y la llevaría a recorrer lo alto de los cielos, ella sintió el frío abrazo de las nubes, pero se negó a abrir los ojos. Estaba buscando un escape, dejarse llevar, olvidar las voces que escuchaba por las noches que no paraban de repetir "¿qué estás haciendo con tu vida?, ¿a dónde vas a parar?"
El viento la arropó como pudo, pero un día la arrojó al océano y ahí una ola la atrapó, y aún con los ojos cerrados, la mujer dejó que un montón de lágrimas salieran, se mezclaron con el agua salada del mar y formaron pequeños remolinos donde los peces bailaron. La mujer se dejó mecer día y noche por la ola, los peces le llevaban comida, los pájaron le hablaban sin parar, pero ella seguía sin reaccionar, sin decir palabras o abrir los ojos. 
Un día la historia de la mujer llegó hasta una vieja tortuga que decidió ir a su encuentro:
-¿Qué estás haciendo aquí, tan lejos de casa? Abre los ojos mujer, que en ellos está tu fuerza, deja que sople en ellos el viento y te regrese a casa.
Después de no haber pronunciado palabras en mucho tiempo, la mujer finalmente hablo:
-No tengo a dónde ir, no tengo por quién vivir, solo quería desaparecer, pero el viento y las olas se empeñan de no dejarme morir.
-Aún no es tiempo de que te vayas -respondió la tortuga, que con un suave soplo hizo que los ojos de la mujer se abrieran.

La mujer autómaticamente reconoció en esa vieja tortuga el espiritú de alguien más.
-¿Quién eres? -le preguntó -¿por qué has venido a mi encuentro?
-No eres la primera mujer que se pierde y termina en medio del océano, tienes que regresar a casa, yo me haré cargo de que vuelvas a salvo, pero antes, tienes que ir conmigo al fondo del mar y ahí encontrarás aquello que te hacía falta.

La mujer tomó a la tortuga en sus brazos y ésta la llevó a recorrer las profundidades del mar, por primera vez la mujer sintió una emoción inexplicable en su pecho: quería gritar, quería bailar con los peces.
-Ve a bailar -le dijo la tortuga. 
Y la mujer, danzó y movió su cuerpo sin parar, los peces la rodearon formando un remolino enorme. Cuando al fin la mujer se cansó, los peces también dejaron de moverse y ahí, en medio de las profundidades marinas, la mujer vió a otra mujer delante de ella.
No podía creerlo, era idéntica a ella. Observó a la mujer por un buen rato hasta que ambas se unieron en un abrazo. 
-Te extrañé - le dijo la otra mujer - me abandonaste hace tanto tiempo que no sabía que hacer conmigo, tuve que refugiarme aquí en el océano con la esperaza de que un día vinieras a buscarme.
-¿Quién eres?
-Soy la mujer salvaje que vivía en ti y dejaste ir con la esperanza de que la domesticación te trajera lo que tanto anhelabas. Lo que no sabías, es que solo estando juntas podremos ser una sola, podremos estar al fin en paz.

Entonces la tortuga las tomó a ambas de la mano y las llevó a la superficie. La mujer finalmente pudo volver a casa: estaba completa, había recuperado a su otra mitad. Regresó al acantilado donde días antes había cerrado los ojos y le dio gracias al viento, al mar y a la tortuga.