Una noche más llorándole a mi almohada. Tenía varios días sin llorar, eso es muy raro viniendo de mi. Tengo una necesidad constante de estar en control, de saber que todo estará bien, de ver hacia adelante para planear que las cosas me salgan como espero. Todo me parece un misterio, ya no encuentro respuestas donde antes las hallaba a la primera; todo es territorio desconocido.
Siempre me he jactado de adaptarme a las situaciones muy bien, llevo más de un mes en esta nueva casa y ya desarrollé una rutina que solo varía de vez en cuando: así soy. Necesito un plan que seguir o me pierdo. Necesito la seguridad de que al final del día, tendré todo en orden. Y si por algún motivo mi universo se altera, me pongo ansiosa y me duele el estomago al instante. Como en este momento.
Es de noche y sé lo que sigue en mi rutina: esperar. A que sean las 11, a que sea un nuevo día. A que el sueño llegue y con él al fin descanse de estos pensamientos que me acosan y no me dejan en paz.
Una noche y todas las que faltan aún...
lunes, 29 de septiembre de 2014
domingo, 28 de septiembre de 2014
Soy un fantasma y estoy enamorada de un ángel
Este mes en especial, se siente como una avalancha de recuerdos que viene hacia mí, y por más que corro no logró escapar de ella. Viene, y me va a aplastar. No sé si podré sobrevivir.
Me siento invisible; una vez, hace muchos meses yo escribí "No quiero ser un fantasma de tu pasado, uno que te acosa por no poder encontrar consuelo en los brazos de alguien más". ¿Me convertí en ese fantasma?, ¿acaso no me ves?, ¿no sientes mi presencia?, ¿no sientes mi anhelo?
Mi anhelo hacia el pasado que me mata lentamente. Que no me deja en paz.
Eres mi ángel, eres quien me salvó de convertirme en aquello que más temía, pero tal vez te convertiste en el ángel malvado que descendió del paraíso. Nunca puedo dejar de preguntarme, ¿por qué? y entre más me lo pregunto más dudas surgen. Tienes que venir, tienes que quitarte todas esas dudas y emociones que hacen que tu mente se nuble, tienes que darte cuenta. Date cuenta; siempre estaré aquí. Los fantasmas no mueren. No puedo vivir pero tampoco puedo irme. Tengo miedo. De que tu condición de ángel te vuelva inalcanzable al final, y entonces la pregunta cambiará por un ¿de qué sirvió todo?
En algún momento tuvimos la misma condición. Fuimos humanos y nos adoramos mutuamente, y cometimos las más grandes locuras. ¿Qué pasó? No dejo de dudar, no dejo de atravesar paredes en busca de respuestas, y en las noches no puedo dormir, y a veces entro a tus sueños solo para darme cuenta de que ya no estoy en ellos, yo ya no habito ahí; hay alguien más. ¿Por qué lo hiciste? Nunca te detuviste a decirme un por qué. Cuando me convertí en este fantasma que soy ahora, tu lo presenciaste, y pudiste haberme salvado, pero preferiste salvarla a ella. Elegiste tu camino.
Ahora estoy a la espera de algo que no llegará; quiero descansar pero sé que nunca podré mientras permanezca así. Somos incompatibles, pertenecemos a diferentes dimensiones y aunque he querido atravesar hacia donde estás, no me lo han permitido: ni las circunstancias, ni el destino, ni tú. Tú que dijiste que estaríamos juntos siempre.
Supongo que ahora que eres un ángel crees que no soy digna de ti. Pero a veces te descubro observándome por las noches, alumbrando mis pasos con tu luz. ¿Qué estamos haciendo?, ¿Por qué siento que algo no encaja? Tal vez si me dejarás entrar a tu corazón inmortal sería capaz de tener descanso al fin.
Estoy profundamente enamorada de ti y de cada una de tus virtudes. Conozco tus defectos y los acepto, solo deseo lo mejor para ti. Y cuando el momento llegué y los demás me pregunten, ¿por qué hiciste todo eso?, yo solo contestaré "Porque lo amo"
Me siento invisible; una vez, hace muchos meses yo escribí "No quiero ser un fantasma de tu pasado, uno que te acosa por no poder encontrar consuelo en los brazos de alguien más". ¿Me convertí en ese fantasma?, ¿acaso no me ves?, ¿no sientes mi presencia?, ¿no sientes mi anhelo?
Mi anhelo hacia el pasado que me mata lentamente. Que no me deja en paz.
Eres mi ángel, eres quien me salvó de convertirme en aquello que más temía, pero tal vez te convertiste en el ángel malvado que descendió del paraíso. Nunca puedo dejar de preguntarme, ¿por qué? y entre más me lo pregunto más dudas surgen. Tienes que venir, tienes que quitarte todas esas dudas y emociones que hacen que tu mente se nuble, tienes que darte cuenta. Date cuenta; siempre estaré aquí. Los fantasmas no mueren. No puedo vivir pero tampoco puedo irme. Tengo miedo. De que tu condición de ángel te vuelva inalcanzable al final, y entonces la pregunta cambiará por un ¿de qué sirvió todo?
En algún momento tuvimos la misma condición. Fuimos humanos y nos adoramos mutuamente, y cometimos las más grandes locuras. ¿Qué pasó? No dejo de dudar, no dejo de atravesar paredes en busca de respuestas, y en las noches no puedo dormir, y a veces entro a tus sueños solo para darme cuenta de que ya no estoy en ellos, yo ya no habito ahí; hay alguien más. ¿Por qué lo hiciste? Nunca te detuviste a decirme un por qué. Cuando me convertí en este fantasma que soy ahora, tu lo presenciaste, y pudiste haberme salvado, pero preferiste salvarla a ella. Elegiste tu camino.
Ahora estoy a la espera de algo que no llegará; quiero descansar pero sé que nunca podré mientras permanezca así. Somos incompatibles, pertenecemos a diferentes dimensiones y aunque he querido atravesar hacia donde estás, no me lo han permitido: ni las circunstancias, ni el destino, ni tú. Tú que dijiste que estaríamos juntos siempre.
Supongo que ahora que eres un ángel crees que no soy digna de ti. Pero a veces te descubro observándome por las noches, alumbrando mis pasos con tu luz. ¿Qué estamos haciendo?, ¿Por qué siento que algo no encaja? Tal vez si me dejarás entrar a tu corazón inmortal sería capaz de tener descanso al fin.
Estoy profundamente enamorada de ti y de cada una de tus virtudes. Conozco tus defectos y los acepto, solo deseo lo mejor para ti. Y cuando el momento llegué y los demás me pregunten, ¿por qué hiciste todo eso?, yo solo contestaré "Porque lo amo"
miércoles, 24 de septiembre de 2014
Un sueño me habla de ti
Y me dice las cosas que no me atrevo ni a pensar. ¿Qué pasaría si...? Me quedo en blanco, no hay más después de eso. No quiero ir más allá, no quiero saber. Te veo en todas partes, sobre todo pienso en ti en todo lugar y cuando veo que estás presente el corazón me da un salto y me dice "hey, ahí está, no te preocupes"
Ojalá fuera más fácil. Que pudiera controlar todo a mi alrededor, salirme con la mía. Pero no tengo el control, ni siquiera de mí misma.
Esta tarde estuviste en mis sueños y pareció tan real. Mi inconsciente me habla de ti y me dice justo lo que me gustaría oír. Es una lástima que no haya una fuente cercana a mí, porque sin duda alguna ya habría corrido a gastar cada centavo para desear que ese sueño se vuelva realidad. Tus brazos sobre mí, tu pelo, tus ojos, tu sonrisa. Y mi mejor amigo aprobando todo.
No tengo el valor. Te quiero solo para mí, para mí y nada más. Pero algo dentro de mi me sigue diciendo "tic, toc, tic, toc"; nada pasa. Tal vez las cosas no vuelvan a ser como lo fueron. Tal vez ahora no soy nada.
Te extraño. A cada segundo. No solo a la 1 de la mañana cuando recito poemas de amor en mi mente y todos te los dedico a ti. No solo cuando como pizza y no puedo evitar recordar nuestras tardes tan especiales. No solo cuando huele a whisky y sé que en algún lugar estás tú. No solo cuando paso por los parques y las bancas me susurran "aquí pertenecen él y tú".
Pertenecemos el uno al otro. Eres para mí, nadie te conoce mejor que yo. No importa el tiempo. Estaré aquí.
Un sueño me habló y me dijo que el cambio tal vez sea bueno. Que mi corazón tal vez tenga sentimientos que no quiero aceptar. Un sueño me habló de ti y yo quisiera hacerlo realidad.
Ojalá fuera más fácil. Que pudiera controlar todo a mi alrededor, salirme con la mía. Pero no tengo el control, ni siquiera de mí misma.
Esta tarde estuviste en mis sueños y pareció tan real. Mi inconsciente me habla de ti y me dice justo lo que me gustaría oír. Es una lástima que no haya una fuente cercana a mí, porque sin duda alguna ya habría corrido a gastar cada centavo para desear que ese sueño se vuelva realidad. Tus brazos sobre mí, tu pelo, tus ojos, tu sonrisa. Y mi mejor amigo aprobando todo.
No tengo el valor. Te quiero solo para mí, para mí y nada más. Pero algo dentro de mi me sigue diciendo "tic, toc, tic, toc"; nada pasa. Tal vez las cosas no vuelvan a ser como lo fueron. Tal vez ahora no soy nada.
Te extraño. A cada segundo. No solo a la 1 de la mañana cuando recito poemas de amor en mi mente y todos te los dedico a ti. No solo cuando como pizza y no puedo evitar recordar nuestras tardes tan especiales. No solo cuando huele a whisky y sé que en algún lugar estás tú. No solo cuando paso por los parques y las bancas me susurran "aquí pertenecen él y tú".
Pertenecemos el uno al otro. Eres para mí, nadie te conoce mejor que yo. No importa el tiempo. Estaré aquí.
Un sueño me habló y me dijo que el cambio tal vez sea bueno. Que mi corazón tal vez tenga sentimientos que no quiero aceptar. Un sueño me habló de ti y yo quisiera hacerlo realidad.
lunes, 22 de septiembre de 2014
Perspectiva
Así que estaba navegando por este mundo cibernético y encontré una frase bastante interesante:
"Estoy tratando de ver las cosas con perspectiva. Mi perra quiere una mordida de mi sandwich de chocolate y mantequilla de maní. Sé que no puedo darle, porque el chocolate hace que los perros se enfermen. Mi perra no entiende esto. Ella ruega y se enreda alrededor de mi pierna como una bufanda y trata de convencerme de darle solo un pedacito. Cuando no cedo, ella eventualmente se rinde y se acuesta en una esquila, debajo del piano, triste. Espero que el universo tenga el mejor interés en mí como yo lo tengo en mi perra. Cuando quiero algo con todo mi ser, y el universo me separa de ello, espero que el universo piense 'Chica tonta. Ella piensa que esto es lo que quiere, pero ella no entiende cuando le dolería.'" Blythe Baird
Y bueno, me puse a pensar y descubrí que conforme pasa el tiempo y las cosas parecen más y más lejanas, todo parece tomar forma y obtener sentido. Como hoy, que salí al fin de mi casa y me pasé a comprar un hielito afuera de la escuela primaria, que me queda bastante cerca. Y ahí estaba: con su ropa característica, shorts deportivos y una camisa. Descubrí que no ha cambiado ni un poquito y también descubrí, que ya no existe lo que un día creí sentir por él. Hace como 4 años hubiera dado lo que sea por haber estado con este chico, y hoy lo descubrí ahí, con dos niños pequeños y con la que seguramente es su esposa, y me dije "vaya, como cambian las cosas con el paso de los años". Y creí que tal vez sentiría algo en el fondo del estómago, como recordándome "estuviste enamorada de él", pero no hubo nada; solo sentí un poco de tristeza y compasión por él, recuerdo que quería ser carpintero o algo así, y seguramente está trabajando para poder mantener a su familia, pero definitivamente sus sueños no se cumplieron. O quién sabe, igual y sí. Yo qué sé.
La cosa aquí es saber que lo que hoy parece tan doloroso e imposible, algún día resultará incluso gracioso. Me ha pasado, en su momento me sentí morir y sufrí con todo el corazón por un chico, por algo que decía querer con todo mi ser, y al final de cuentas me digo "Todo está bien ahora".
Doy gracias al universo que traza el camino. Doy gracias a las piedras que he superado ya, a los pozos en los que he caído, al lodo que me ha ensuciado. Porque sin eso entonces, ¿qué sería yo?
Y sé que parece difícil de creer, pero algún día comprenderé el por qué de lo que pasó hace 1 año. Quizá algún día pueda volver la vista atrás y decir "gracias".
"Estoy tratando de ver las cosas con perspectiva. Mi perra quiere una mordida de mi sandwich de chocolate y mantequilla de maní. Sé que no puedo darle, porque el chocolate hace que los perros se enfermen. Mi perra no entiende esto. Ella ruega y se enreda alrededor de mi pierna como una bufanda y trata de convencerme de darle solo un pedacito. Cuando no cedo, ella eventualmente se rinde y se acuesta en una esquila, debajo del piano, triste. Espero que el universo tenga el mejor interés en mí como yo lo tengo en mi perra. Cuando quiero algo con todo mi ser, y el universo me separa de ello, espero que el universo piense 'Chica tonta. Ella piensa que esto es lo que quiere, pero ella no entiende cuando le dolería.'" Blythe Baird
Y bueno, me puse a pensar y descubrí que conforme pasa el tiempo y las cosas parecen más y más lejanas, todo parece tomar forma y obtener sentido. Como hoy, que salí al fin de mi casa y me pasé a comprar un hielito afuera de la escuela primaria, que me queda bastante cerca. Y ahí estaba: con su ropa característica, shorts deportivos y una camisa. Descubrí que no ha cambiado ni un poquito y también descubrí, que ya no existe lo que un día creí sentir por él. Hace como 4 años hubiera dado lo que sea por haber estado con este chico, y hoy lo descubrí ahí, con dos niños pequeños y con la que seguramente es su esposa, y me dije "vaya, como cambian las cosas con el paso de los años". Y creí que tal vez sentiría algo en el fondo del estómago, como recordándome "estuviste enamorada de él", pero no hubo nada; solo sentí un poco de tristeza y compasión por él, recuerdo que quería ser carpintero o algo así, y seguramente está trabajando para poder mantener a su familia, pero definitivamente sus sueños no se cumplieron. O quién sabe, igual y sí. Yo qué sé.
La cosa aquí es saber que lo que hoy parece tan doloroso e imposible, algún día resultará incluso gracioso. Me ha pasado, en su momento me sentí morir y sufrí con todo el corazón por un chico, por algo que decía querer con todo mi ser, y al final de cuentas me digo "Todo está bien ahora".
Doy gracias al universo que traza el camino. Doy gracias a las piedras que he superado ya, a los pozos en los que he caído, al lodo que me ha ensuciado. Porque sin eso entonces, ¿qué sería yo?
Y sé que parece difícil de creer, pero algún día comprenderé el por qué de lo que pasó hace 1 año. Quizá algún día pueda volver la vista atrás y decir "gracias".
viernes, 19 de septiembre de 2014
Un poema de amor para mí
Me gusta la manera en que tus manos se mueven con la luz del sol.
Aún mejor, me gusta la manera en que tus manos se mueven sobre la piel que no te pertenece.
Dices demasiado, pero en realidad te guardas las palabras más importantes para ti misma.
O aún mejor, escribes ese caótico desastre y lo transformas en poesía.
¿Cómo lo haces?
¿Cómo puedes amar a tantos pero insistir en que no mereces el mismo amor a cambio?
Nunca he conocido a alguien tan desinteresada como tú.
Nunca me he encontrado con otra persona que sea capaz de dar a otros la cantidad de esperanza que tú das.
Así que, ¿por qué no te das un poco de esa energía a ti misma?
Gastas tanto tiempo tratando de arreglar las piezas rotas de aquellos que se van a ir cuando los hayas parchado.
¿Crees que eso es justo?, ¿crees que eso es amor?
¿Has intentado cocer tus propias heridas antes de usar ese hilo en alguien que terminará por romperlo?
Ahora sé que esto parece más una lección que un poema de amor, pero estoy siendo agresiva porque te amo más de lo que alguien puede prometer.
Espero que no me odies después de esto.
Espero que no veas tus errores como defectos, o tu dedicación como algo que debes remover.
Eres hermosa, y eres tan gentil como la manera en que la mañana besa a la niebla.
Así que por favor, trata de amarte más a ti misma.
Trata de ver que eres mucho más que la cuidadora de los débiles.
Trata de ver que necesitas tanto amor como aquellos tragados por su propia oscuridad.
Irradias tanta luz que sé que puede ser difícil ver las sombras a tus ojos.
Pero yo las veo, y sé que no eres tan fuerte como dices.
Así que voltea tu letrero que dice "abierto", cierra las puertas y usa tu tiempo libre para decirte a ti misma lo que siempre pareces decir a los demás; eres hermosa y vas a sobrevivir, lo prometo.
Porque si hay alguien que puede convertir su dolor en poesía, su dolor en una nueva forma de sanar, eres tú.
Aún mejor, me gusta la manera en que tus manos se mueven sobre la piel que no te pertenece.
Dices demasiado, pero en realidad te guardas las palabras más importantes para ti misma.
O aún mejor, escribes ese caótico desastre y lo transformas en poesía.
¿Cómo lo haces?
¿Cómo puedes amar a tantos pero insistir en que no mereces el mismo amor a cambio?
Nunca he conocido a alguien tan desinteresada como tú.
Nunca me he encontrado con otra persona que sea capaz de dar a otros la cantidad de esperanza que tú das.
Así que, ¿por qué no te das un poco de esa energía a ti misma?
Gastas tanto tiempo tratando de arreglar las piezas rotas de aquellos que se van a ir cuando los hayas parchado.
¿Crees que eso es justo?, ¿crees que eso es amor?
¿Has intentado cocer tus propias heridas antes de usar ese hilo en alguien que terminará por romperlo?
Ahora sé que esto parece más una lección que un poema de amor, pero estoy siendo agresiva porque te amo más de lo que alguien puede prometer.
Espero que no me odies después de esto.
Espero que no veas tus errores como defectos, o tu dedicación como algo que debes remover.
Eres hermosa, y eres tan gentil como la manera en que la mañana besa a la niebla.
Así que por favor, trata de amarte más a ti misma.
Trata de ver que eres mucho más que la cuidadora de los débiles.
Trata de ver que necesitas tanto amor como aquellos tragados por su propia oscuridad.
Irradias tanta luz que sé que puede ser difícil ver las sombras a tus ojos.
Pero yo las veo, y sé que no eres tan fuerte como dices.
Así que voltea tu letrero que dice "abierto", cierra las puertas y usa tu tiempo libre para decirte a ti misma lo que siempre pareces decir a los demás; eres hermosa y vas a sobrevivir, lo prometo.
Porque si hay alguien que puede convertir su dolor en poesía, su dolor en una nueva forma de sanar, eres tú.
martes, 16 de septiembre de 2014
Drama de un martes patrio
Esta vez el drama no tiene que ver conmigo, es más bien algo que presencié y tuve que salir huyendo de ello antes de que me afectara de más. No entraré en detalles porque no se trata de mí, pero quiero escribir acerca de que de todas las situaciones dramáticas de la vida podemos sacar algo bueno.
Todo empezó en la madruga del 15, cuando yo estaba profundamente dormida y probablemente soñando. Y mientras yo hacia esto en mi casa se armó una revolución de la que no supe hasta hoy en la tarde. ¿Y por qué me enteré? Porque entré al cuarto de mis papás como siempre lo hago y hay salió todo; drama por todas partes, inundando el lugar.
Y pensé para mis adentros, "de nuevo la misma historia", y de nuevo me preocupé y me puse a pensar en mi situación actual y en cómo me la paso sufriendo por las mismas cosas. Y me dije "Vaya cosa", y me dirigí a mi cuarto donde unas cuantas lágrimas cayeron y aterrizaron en mi almohada.
Luego, y como siempre, pensé que lo mejor sería irme de una vez a mi otra casa (en la ciudad donde estudio) y salir huyendo antes de que las cosas se complicaran. Y bien; la cosa positiva pasó. Hablé con mi papá. No es de sorprender que diga que nunca hablo con él, las conversaciones más largas que tenemos no duran mas de unos minutos, y justo ayer estaba pensando en cómo me gustaría que tuviéramos una mejor relación.
Terminamos por hablar durante casi la mayor parte del camino. Y eso fue un gran avance. A veces los dramas unen a las familias. Y me dijo tantas cosas que ni siquiera sabía acerca de su vida y de su relación con mi mamá, y yo estaba ahí, mirando hacía la carretera y pensando "mira todo lo que te estás perdiendo"
Y llegando a mi casa me armé de valor y me dije "ya basta", ya no tienes porque seguir aguantando que te hagan menos, ya no tienes porque seguir ocultándote, no tienes por qué sentir miedo: el daño está hecho, tienes heridas; sí, pero ya es hora de que sanen. Y no puedes pasar la vida pensando "algún día...", porque ese día no llegará. Ese día tiene que ser hoy y solamente hoy. No existe el mañana y el ayer ya se fue para no regresar. Dramas habrá siempre; nos encantan. Pero sacarle lo bueno a las situaciones depende de nosotros mismos, y sobre todo depende de nosotros mismos parar el drama. Decir "esto no es para mí", "yo merezco algo mejor"
Y sí, se siente raro que después de tanto tiempo al fin puedas encontrar la paz en ti. Pero vale la pena.
Todo empezó en la madruga del 15, cuando yo estaba profundamente dormida y probablemente soñando. Y mientras yo hacia esto en mi casa se armó una revolución de la que no supe hasta hoy en la tarde. ¿Y por qué me enteré? Porque entré al cuarto de mis papás como siempre lo hago y hay salió todo; drama por todas partes, inundando el lugar.
Y pensé para mis adentros, "de nuevo la misma historia", y de nuevo me preocupé y me puse a pensar en mi situación actual y en cómo me la paso sufriendo por las mismas cosas. Y me dije "Vaya cosa", y me dirigí a mi cuarto donde unas cuantas lágrimas cayeron y aterrizaron en mi almohada.
Luego, y como siempre, pensé que lo mejor sería irme de una vez a mi otra casa (en la ciudad donde estudio) y salir huyendo antes de que las cosas se complicaran. Y bien; la cosa positiva pasó. Hablé con mi papá. No es de sorprender que diga que nunca hablo con él, las conversaciones más largas que tenemos no duran mas de unos minutos, y justo ayer estaba pensando en cómo me gustaría que tuviéramos una mejor relación.
Terminamos por hablar durante casi la mayor parte del camino. Y eso fue un gran avance. A veces los dramas unen a las familias. Y me dijo tantas cosas que ni siquiera sabía acerca de su vida y de su relación con mi mamá, y yo estaba ahí, mirando hacía la carretera y pensando "mira todo lo que te estás perdiendo"
Y llegando a mi casa me armé de valor y me dije "ya basta", ya no tienes porque seguir aguantando que te hagan menos, ya no tienes porque seguir ocultándote, no tienes por qué sentir miedo: el daño está hecho, tienes heridas; sí, pero ya es hora de que sanen. Y no puedes pasar la vida pensando "algún día...", porque ese día no llegará. Ese día tiene que ser hoy y solamente hoy. No existe el mañana y el ayer ya se fue para no regresar. Dramas habrá siempre; nos encantan. Pero sacarle lo bueno a las situaciones depende de nosotros mismos, y sobre todo depende de nosotros mismos parar el drama. Decir "esto no es para mí", "yo merezco algo mejor"
Y sí, se siente raro que después de tanto tiempo al fin puedas encontrar la paz en ti. Pero vale la pena.
lunes, 15 de septiembre de 2014
Origen de los síntomas
Los desórdenes de comportamiento como síntomas
Un comportamiento perturbado que suscite alarma o
disgusto en otras personas puede constituir el primer indicio de que un niño
lucha con un problema emocional. Lo más corriente es que estas presiones
procedan del ambiente.
El comportamiento perturbado es una adaptación defectuosa.
Un síntoma es el comportamiento reiterado de
inadaptación. El síntoma es una comunicación. Es un mensaje disfrazado.
Para comprender el significado concreto de un síntoma es
necesario explorar las situaciones de vida, pasadas y presentes, pensamientos y
sentimientos.
Los desórdenes de comportamiento en el niño pueden
clasificarse útilmente en dos grupos
principales: 1) desórdenes de
comportamiento neurótico debidos a ansiedad excesiva; y 2) trastornos producidos por una
sociabilitación defectuosa.
Síntomas neuróticos y mecanismos de defensa
La ansiedad es la clave para comprender los síntomas
neuróticos. Ansiedad en diferentes etapas del desarrollo:
1) Ansiedad
primaria, temor de disolución o ruptura, consecuencia del conflicto entre
necesidades interiores y las provisiones ambientales inadecuadas: etapa oral.
2) Ansiedad
ligada a la vergüenza y a la pérdida del amor propio, consecuencia del
conflicto entre los impulsos primitivos y su prohibición exterior: etapa anal.
3) Ansiedad
causada por el sentimiento de culpabilidad, consecuencia del conflicto entre
impulsos primitivos y los dictados por la conciencia: etapa genital.
La ansiedad se produce cuando existe un conflicto, ya sea entre los deseos e
impulsos interiores de un lado, y el mundo exterior del otro, ya sea entre
impulsos interiores y la propia conciencia. Cuando la ansiedad se torna
insoportable, entran en acción ciertos procesos psicológicos que protegen al
individuo de la desorganización total. Estos medios son llamados mecanismos de defensa. El mecanismo
fundamental es el de
1) represión:
el deseo o impulso es reprimido hacia
el inconsciente. Pero estos recuerdos
no se pierden: siguen luchando por existir y de hecho hallan expresión de diversas
maneras indirectas.
2) Regresión:
se vuelve al comportamiento peculiar de una etapa anterior.
3) Negación:
falsificación de la expresión con fines de comodidad mental. La disminución de
su propia estimación y el agudo sentimiento de culpabilidad le impiden hacer
frente a sus propios actos.
4) Desplazamiento:
los sentimientos e impulsos apuntados contra una persona se cambian hacia otra.
5) Formación
de las reacciones: los sentimientos e impulsos desagradables se convierten en
sus contrarios.
6) Proyección:
implica atribuir a otros los propios impulsos inaceptables.
7) Aislamiento:
la emoción que acompaña a una experiencia se separa de ella, cuando los
sentimientos y las experiencias se aíslan unos de otras.
8) Caída
de la fantasía,
9) Intelectuación
o racionalización y,
10) Comportamiento
ritualista.
11) Sublimación:
creación de impulsos primitivos. Los impulsos en conflicto con el ambiente o la
conciencia se traducen en acciones sociales positivas.
Ninguno de los mecanismos de defensa descritos es anormal
en sí mismo.
Siempre que se emplean los mecanismos de defensa para
apagar la ansiedad ya no se dispone de los sentimientos reprimidos para probar
la realidad y para su modificación con la edad y la madurez. Siempre que se
reprimen conflictos infantiles en vez de resolverse por medio de la
sublimación, se produce alguna distorsión de la personalidad. Si el individuo
tiene que acudir a maniobras defensivas en forma masiva para alejar la
ansiedad, entonces buena parte de su personalidad sigue siendo infantil. El uso
desmedido de mecanismos de defensa en la niñez predispone a la persona al
desarrollo de neurosis en la vida posterior.
La sociabilización defectuosa como causa de síntomas.
1) Síndrome
de comportamiento agresivo no sociabilizado: delincuencia, agresión, soledad y
aislamiento. Aparece en niños con antecedentes de rechazo paterno caracterizado
por aspectos tales como ilegitimidad, rechazo directo y hostilidad indirecta.
2) Síndrome
de comportamiento agresivo bien equilibrado: actividades delictivas y agresivas
de pandilla en niños que se llevan bien con sus compañeros. Antecedentes de
indiferencia paterna y delincuencia en la familia.
3) Comportamiento
sobreinhibido: represión familiar, compuesta de un padre inconsciente y supercrítico,
una madre dominante y falta de sociabilidad en ambos padres: o afección o defecto
físico en el niño.
Bibliografía:
Bibliografía:
- Wolff, S. (1970), Trastornos psíquicos en el niño: causas y tratamiento. México: Siglo XIX.
miércoles, 10 de septiembre de 2014
Recomendaciones
Este día quise hacer una pequeñita lista con cosas que recomendar (todas relacionadas con mi carrera, pero no es necesario que sean psicólogos o psicólogos en formación para entenderlas):
- Libro: Los renglones torcidos de Dios.
Es un libro que nos recomendó mi maestro de Psicopatología
en adultos no psicótica, y la verdad es que al principio no sabía ni qué
esperar, pero conforme se va desarrollando la historia, se pone muy interesante
y hasta emociona. Se trata de una mujer llamada Alice que dice ser una
detective privada y que se internó en un hospital psiquiátrico para resolver un
caso, pero llega un momento en que ya no sabes si Alice está verdaderamente
loca o si solo está fingiendo o si se está volviendo loca por estar internada
ahí. Muy recomendado, muy sencillo de entender y de disfrutar, sobre todo
invita a la reflexión.
- Serie: In treatment (en español: en terapia)
Una serie bastante interesante, entretenida y hasta cierto
punto muy educativa. Trata de un psicoanalista que atiende 4 casos, uno por
cada día de la semana, y en el 5to día él es quien se somete a terapia con una
colega. Nos la recomendó mi maestro de Psicopatología infantil, y la verdad es
que la vi por primera vez y desde el primer capítulo quedé enganchada: los
casos son muy buenos, la manera de abordarlos también. Obviamente nos da una
imagen de lo que es ser terapeuta, y remarca el hecho de que no por ser psicólogo
ya tienes la vida resulta.
- Artículo: Una visión relacional de los trastornos de personalidad.
Este artículo se encuentra muy fácilmente si se busca en
google. Es muy bueno, explica los distintos tipos de trastornos desde una
perspectiva sistémica. Muy recomendado ya que es simple, muy entendible y
también invita mucho a la reflexión. Personalmente no soy partidaria de ninguna
corriente de psicología aún, pero esta manera de explicar el por qué las
personas adquieren trastornos me convence.
martes, 9 de septiembre de 2014
lunes, 8 de septiembre de 2014
Darse Cuenta
Hay un planteamiento o principio importante dentro de la Gestalt que se llama "Darse Cuenta", la persona debe de hacer presente aquello que lo acompleja, aquello que le está molestando en este preciso instante. Una vez que hace esto, el mismo cuerpo genera una homeostasis: la persona entiende las cosas y eso ayuda en su proceso de sanación.
Hoy sentí esto más que nunca. Pasó mientras tenía mi clase de Psicopatología Infantil y estábamos hablando acerca de la lactancia y como las mamás no deben amamantar más allá de los 6 meses, y de repente el tema cambió drásticamente hacia las extorciones y secuestros telefónicos y de ahí giró hacía el hecho de recalcar la importancia de saber que en esta vida tenemos el PODER de decidir. Tenemos la capacidad de tomar decisiones basándonos en nuestros propios criterios, ¿hay algo mejor que esto? No lo creo. No se vale la mentalidad de "es que esto me tocó", "ya ni modo". Me parece lo más lógico del mundo ahora que me doy cuenta, ¿para qué gastar la energía en las cosas que NO funcionan?
El maestro nos repitió varias veces que debemos escoger a la persona con que vamos a compartir la vida no basandonos en su apariencia física, en su gran fortuna, en cosas superficiales, porque a fin de cuentas a la larga todo esto pasa a segundo plano. ¿Qué mejor que encontrar a alguien que nos acepte tal cual somos? Con patologías, con manías, con tics nerviosos, con defectos, con kilos de más, con nuestros gustos culposos. ¿Qué mejor que encontrar a alguien con quien pasar platicando toda la vida? acerca del día a día, acerca de nuestros miedos, de nuestros sueños. ¿Qué mejor que encontrar a alguien que sea una buena persona? Con los demás, con su familia, que sea bueno consigo mismo.
En fin, después de eso me invadió una sensación desconocida por mi cuerpo hasta el momento: me gusta mi carrera. Me gustan mis materias. Me gusto a mí misma. Estoy contenta así; con mis constantes somatizaciones, con mis obsesiones, con mis miedos. Con mis cosas buenas pero sobre todo me acepto con las cosas malas.
Estudiar psicología es estudiar para la vida. Te preparas para enfrentar tantas cosas y nadie te dice que en proceso vas a descubrirte a ti mismo, vas a descubrir cosas de tu propia familia, de los que te rodean. Y vas a pensar diferente, y vas a ver las cosas con otros lentes.
Te vas a dar cuenta. Y entonces tendrás finalmente las herramientas necesarias para cambiar.
Hoy sentí esto más que nunca. Pasó mientras tenía mi clase de Psicopatología Infantil y estábamos hablando acerca de la lactancia y como las mamás no deben amamantar más allá de los 6 meses, y de repente el tema cambió drásticamente hacia las extorciones y secuestros telefónicos y de ahí giró hacía el hecho de recalcar la importancia de saber que en esta vida tenemos el PODER de decidir. Tenemos la capacidad de tomar decisiones basándonos en nuestros propios criterios, ¿hay algo mejor que esto? No lo creo. No se vale la mentalidad de "es que esto me tocó", "ya ni modo". Me parece lo más lógico del mundo ahora que me doy cuenta, ¿para qué gastar la energía en las cosas que NO funcionan?
El maestro nos repitió varias veces que debemos escoger a la persona con que vamos a compartir la vida no basandonos en su apariencia física, en su gran fortuna, en cosas superficiales, porque a fin de cuentas a la larga todo esto pasa a segundo plano. ¿Qué mejor que encontrar a alguien que nos acepte tal cual somos? Con patologías, con manías, con tics nerviosos, con defectos, con kilos de más, con nuestros gustos culposos. ¿Qué mejor que encontrar a alguien con quien pasar platicando toda la vida? acerca del día a día, acerca de nuestros miedos, de nuestros sueños. ¿Qué mejor que encontrar a alguien que sea una buena persona? Con los demás, con su familia, que sea bueno consigo mismo.
En fin, después de eso me invadió una sensación desconocida por mi cuerpo hasta el momento: me gusta mi carrera. Me gustan mis materias. Me gusto a mí misma. Estoy contenta así; con mis constantes somatizaciones, con mis obsesiones, con mis miedos. Con mis cosas buenas pero sobre todo me acepto con las cosas malas.
Estudiar psicología es estudiar para la vida. Te preparas para enfrentar tantas cosas y nadie te dice que en proceso vas a descubrirte a ti mismo, vas a descubrir cosas de tu propia familia, de los que te rodean. Y vas a pensar diferente, y vas a ver las cosas con otros lentes.
Te vas a dar cuenta. Y entonces tendrás finalmente las herramientas necesarias para cambiar.
domingo, 7 de septiembre de 2014
La interacción padres-lactante
Los datos de la observación directa
Antes el bebé era concebido como un objeto pasivo sometido a la influencia de los deseos y comportamientos paternales. La noción de interacción ha conducido a considerar también los efectos que sobre los padres ejerce el bebé y, en consecuencia, su capacidad de influir en los cuidados que recibe.
La constitución del vínculo madre-recién nacido
Según Klaus y Kennel existe en la madre, inmediatamente después del parto, un estado psicoafectivo particular en forma de un durante el cual la constitución del vínculo madre-recién nacido (o <bonding>) se establece de forma óptima.
La interacción en el momento de la lactancia.
Durante la lactancia se producen diferentes modalidades de comunicación: la mirada mutua, el, el <holding>, el contacto táctil, la palabra y las vocalizaciones, y diferentes experiencias gustativas y olfativas del bebé.
En la lactancia con biberón también se han visto varios tipos diferentes de interacción. I. Lezine describe a madres rígidas y crispadas, que mantienen al bebé a tanta distancia que evitan el contacto. Parecen no darse cuenta de las expresiones de afecto de sus hijos, ni respetar las interrupciones de la succión. Parecen no captar las señales del bebé, o no las tienen en cuenta, o las interpretan de forma errónea.
Un segundo tipo de madres parece percibir las señales del niño pero es incapaz de darles respuesta.
Un tercer tipo de madres adopta una posición confortable; el bebé está acurrucado y el contacto piel a piel es estrecho.
La comunicación a través de la mirada
La comunicación con la mirada, durante la lactancia y en otras situaciones interactivas, tiene, una gran importancia. Durante la lactancia, al pecho o con biberón, los lactantes. desde la segunda semana, fijan los ojos en el rostro de su madre durante fracciones significativas de tiempo. La madre, cuando recuerda sus sentimientos positivos ante sus bebés, los asocian frecuentemente con las miradas.
Los gritos de los lactantes
Los gritos constituyen, para los lactantes, una de las principales formas de comunicación.
Para Bowlby, los gritos son comportamientos que favorecen la restauración de la proximidad y, por lo tanto, el vínculo.
El análisis de los gritos por medio de un espectógrafo sónico permite distinguir tres tipos: el grito fundamental tiene una frecuencia entre 200 y 600 Hz. Y una intensidad regular en el tiempo. Un segundo tipo llamado disfonatorio se caracteriza por su timbre ronco y rudo. El tercer tipo es el hiperfonatorio, un sonido agudo y silbante.
Reciprocidad en la interacción padres-lactante
La calidad de una secuencia de interacción viene determinada no sólo por lo que hace o dice la madre o por los comportamientos del lactante, sino también por el tipo de relación, por la naturaleza del vínculo y comunicaciones. Se distinguen: 1)comportamientos o señales de la madre que están en relación con los del lactante y parecen corresponder a los deseos o necesidades expresadas por el bebé; 2) respuestas que se relacionan con el comportamiento del bebé pero que contradicen los deseos o necesidades que expresa el bebé; 3) respuestas que parecen no tener relación con el comportamiento del bebé.
El juego es una estructura jerarquizada en la que unidades de comportamiento elementales se combinan para formar unidades de nivel superior. Se describen cuatro niveles. El primero es de los <actos> de la madre y del bebé; vocalizaciones, gestos, sonrisas y otras expresiones del rostro.
El nivel de integración inmediatamente superior es el de los períodos de atención mutua. El lactante mira a su madre sin girar los ojos.
El tercer nivel es el de los, comportamientos , con simples variaciones menores a lo largo de cada uno de los episodios de atención mutua;.El cuarto nivel es el del conjunto de las diferentes secuencias de juego.
La interacción afectiva
¿Cuál es el contenido de la comunicación padres-lactante? Este contenido no está formado esencialmente por las emociones y los afectos de los dos miembros de la pareja.
Los gritos y los llantos son el mejor modo de comunicación de sus afectos. A partir de los dos meses y medio aproximadamente se establece una nueva modalidad expresiva: es la sonrisa. Esta que aparece al mismo tiempo que otros fenómenos ha sido llamada por Spitz . La sonrisa induce en los padres la sensación de verse reconocidos y valorados por el niño.
Otra expresión afectiva característica del segundo trimestre de la vida es la sorpresa.
La reacción de angustia frente a la llegada de una persona desconocida se manifiesta entre los siete y los nueve meses.
La interacción padre-lactante
Algunos padres presentan con sus hijos alegría, orgullo, idealización y placer al tocarles. Otros por el contrario, presentan psicosis en la paternidad o depresión paterna en el postparto.
La interacción padre-lactante es, por un lado, directa y, por otro, indirecta a través de la relación entre el padre y la madre.
La interacción se caracteriza por la reciprocidad y la regulación mutua. Pero la interacción padre-lactante es claramente más, más estimulante para el bebé. Los padres recurren, con más frecuencia que las madres, a y no a .
La excitación con los padres se manifiesta a través de los ojos.
Por otro lado, los padres interactúan de manera diferente con sus hijos que con sus hijas. Desde el nacimiento, la interacción es más rica, vocal y táctilmente, con los niños que con las niñas. Los padres estimulan más a sus hijos de entre tres semanas y tres meses, bajo la forma de contactos físicos, miradas y utilización de juguetes.
La interacción padre-lactante favorece el desarrollo cognitivo de los chicos.
Alteraciones en la interacción madre-lactante
Los excesos de estimulación se observan en díadas en las que la madre da la impresión de mostrarse intrusa y no respetar las señales con las que el bebé indica que está excesivamente estimulando. La hipoestimulación se observa en los casos de depresión materna de carácter esquizoide o en la inhibición neurótica.
El bebé prematuro puede con frecuencia dar origen a un sufrimiento psicológico en los padres, ansiosos, culpabilizados y vulnerados en su narcisismo.
Sin embargo, la prematuridad no es más que un factor de riesgo y, en la mayor parte de los casos, la interacción madre-lactante evoluciona armoniosamente.
El factor pronóstico más importante, en el caso de los prematuros, es la calidad de la interacción madre-lactante.
Bibliografía:
Antes el bebé era concebido como un objeto pasivo sometido a la influencia de los deseos y comportamientos paternales. La noción de interacción ha conducido a considerar también los efectos que sobre los padres ejerce el bebé y, en consecuencia, su capacidad de influir en los cuidados que recibe.
La constitución del vínculo madre-recién nacido
Según Klaus y Kennel existe en la madre, inmediatamente después del parto, un estado psicoafectivo particular en forma de un
La interacción en el momento de la lactancia.
Durante la lactancia se producen diferentes modalidades de comunicación: la mirada mutua, el
En la lactancia con biberón también se han visto varios tipos diferentes de interacción. I. Lezine describe a madres rígidas y crispadas, que mantienen al bebé a tanta distancia que evitan el contacto. Parecen no darse cuenta de las expresiones de afecto de sus hijos, ni respetar las interrupciones de la succión. Parecen no captar las señales del bebé, o no las tienen en cuenta, o las interpretan de forma errónea.
Un segundo tipo de madres parece percibir las señales del niño pero es incapaz de darles respuesta.
Un tercer tipo de madres adopta una posición confortable; el bebé está acurrucado y el contacto piel a piel es estrecho.
La comunicación a través de la mirada
La comunicación con la mirada, durante la lactancia y en otras situaciones interactivas, tiene, una gran importancia. Durante la lactancia, al pecho o con biberón, los lactantes. desde la segunda semana, fijan los ojos en el rostro de su madre durante fracciones significativas de tiempo. La madre, cuando recuerda sus sentimientos positivos ante sus bebés, los asocian frecuentemente con las miradas.
Los gritos de los lactantes
Los gritos constituyen, para los lactantes, una de las principales formas de comunicación.
Para Bowlby, los gritos son comportamientos que favorecen la restauración de la proximidad y, por lo tanto, el vínculo.
El análisis de los gritos por medio de un espectógrafo sónico permite distinguir tres tipos: el grito fundamental tiene una frecuencia entre 200 y 600 Hz. Y una intensidad regular en el tiempo. Un segundo tipo llamado disfonatorio se caracteriza por su timbre ronco y rudo. El tercer tipo es el hiperfonatorio, un sonido agudo y silbante.
Reciprocidad en la interacción padres-lactante
La calidad de una secuencia de interacción viene determinada no sólo por lo que hace o dice la madre o por los comportamientos del lactante, sino también por el tipo de relación, por la naturaleza del vínculo y comunicaciones. Se distinguen: 1)comportamientos o señales de la madre que están en relación con los del lactante y parecen corresponder a los deseos o necesidades expresadas por el bebé; 2) respuestas que se relacionan con el comportamiento del bebé pero que contradicen los deseos o necesidades que expresa el bebé; 3) respuestas que parecen no tener relación con el comportamiento del bebé.
El juego es una estructura jerarquizada en la que unidades de comportamiento elementales se combinan para formar unidades de nivel superior. Se describen cuatro niveles. El primero es de los <actos> de la madre y del bebé; vocalizaciones, gestos, sonrisas y otras expresiones del rostro.
El nivel de integración inmediatamente superior es el de los períodos de atención mutua. El lactante mira a su madre sin girar los ojos.
El tercer nivel es el de los
La interacción afectiva
¿Cuál es el contenido de la comunicación padres-lactante? Este contenido no está formado esencialmente por las emociones y los afectos de los dos miembros de la pareja.
Los gritos y los llantos son el mejor modo de comunicación de sus afectos. A partir de los dos meses y medio aproximadamente se establece una nueva modalidad expresiva: es la sonrisa. Esta
Otra expresión afectiva característica del segundo trimestre de la vida es la sorpresa.
La reacción de angustia frente a la llegada de una persona desconocida se manifiesta entre los siete y los nueve meses.
La interacción padre-lactante
Algunos padres presentan con sus hijos alegría, orgullo, idealización y placer al tocarles. Otros por el contrario, presentan psicosis en la paternidad o depresión paterna en el postparto.
La interacción padre-lactante es, por un lado, directa y, por otro, indirecta a través de la relación entre el padre y la madre.
La interacción se caracteriza por la reciprocidad y la regulación mutua. Pero la interacción padre-lactante es claramente más
La excitación con los padres se manifiesta a través de los ojos.
Por otro lado, los padres interactúan de manera diferente con sus hijos que con sus hijas. Desde el nacimiento, la interacción es más rica, vocal y táctilmente, con los niños que con las niñas. Los padres estimulan más a sus hijos de entre tres semanas y tres meses, bajo la forma de contactos físicos, miradas y utilización de juguetes.
La interacción padre-lactante favorece el desarrollo cognitivo de los chicos.
Alteraciones en la interacción madre-lactante
Los excesos de estimulación se observan en díadas en las que la madre da la impresión de mostrarse intrusa y no respetar las señales con las que el bebé indica que está excesivamente estimulando. La hipoestimulación se observa en los casos de depresión materna de carácter esquizoide o en la inhibición neurótica.
El bebé prematuro puede con frecuencia dar origen a un sufrimiento psicológico en los padres, ansiosos, culpabilizados y vulnerados en su narcisismo.
Sin embargo, la prematuridad no es más que un factor de riesgo y, en la mayor parte de los casos, la interacción madre-lactante evoluciona armoniosamente.
El factor pronóstico más importante, en el caso de los prematuros, es la calidad de la interacción madre-lactante.
Bibliografía:
- Lebovici, S; Diatkine, R; Soile., (1989) Tratado de psiquiatría del niño y del adolescente T I. España: Biblioteca nueva.
jueves, 4 de septiembre de 2014
Septiembre
Este es el grito desesperado de la niña que con 17 años se enamoró de ti y te entregó por completo su corazón.
Este es mi corazón que un día sonreía al verte y ahora se entristece cada que hablan de ti.
Esta es mi sonrisa que un día te perteneció y fue nada más que tuya: y ahora ha desaparecido por completo.
Estos son mis ojos que se posaron en ti un día de septiembre y vieron algo especial, creyeron haber decubierto a aquel que sería su verdadero amor, y ahora de ellos no paran de salir lágrimas del dolor que haz causado.
Estas son mis lágrimas que un día fueron de felicidad al enterarme que tú también me querías, que en ti encontraba la reciprocidad que jamás había conocido en la vida, las lágrimas de escucharte decir "Te Amo" por primera vez, y ahora estas lágrimas son reflejo del lamento que no he podido pronunciar.
Estos son los Te Amo que te dije en tantas ocasiones, ¿Recuerdas la primera vez?, nunca en mi vida había estado tan segura al pronunciar esas palabras, y eran solo para ti, y ahora no logro acordarme de cuando fue la ultima vez que de tus labios escuché salir aquella frase.
Estos son mis labios que bien sabes que te pertenecen, te los regalo...quédate con ellos y hazles lo que quieras, ya no los necesito pues de ellos no saldrán más palabras de amor.
Soy tuya, esta soy yo...la niña de 17 años que un día se fijó en ti y te creyó el más especial de los hombres, ¿Me recuerdas?, a la que juraste tratar como a una princesa y dijiste que jamás la ibas a herir.
Rompiste tus promesas.
Me rompiste como a un trozo de papel y me echaste a la basura.
Ahí esta, muy en el fondo un alma que sufre por amor.
Esa es mi alma, tómala, llévala contigo, guárdala en el bolsillo donde guardas los objetos mas preciados.
Este es mi corazón que un día sonreía al verte y ahora se entristece cada que hablan de ti.
Esta es mi sonrisa que un día te perteneció y fue nada más que tuya: y ahora ha desaparecido por completo.
Estos son mis ojos que se posaron en ti un día de septiembre y vieron algo especial, creyeron haber decubierto a aquel que sería su verdadero amor, y ahora de ellos no paran de salir lágrimas del dolor que haz causado.
Estas son mis lágrimas que un día fueron de felicidad al enterarme que tú también me querías, que en ti encontraba la reciprocidad que jamás había conocido en la vida, las lágrimas de escucharte decir "Te Amo" por primera vez, y ahora estas lágrimas son reflejo del lamento que no he podido pronunciar.
Estos son los Te Amo que te dije en tantas ocasiones, ¿Recuerdas la primera vez?, nunca en mi vida había estado tan segura al pronunciar esas palabras, y eran solo para ti, y ahora no logro acordarme de cuando fue la ultima vez que de tus labios escuché salir aquella frase.
Estos son mis labios que bien sabes que te pertenecen, te los regalo...quédate con ellos y hazles lo que quieras, ya no los necesito pues de ellos no saldrán más palabras de amor.
Soy tuya, esta soy yo...la niña de 17 años que un día se fijó en ti y te creyó el más especial de los hombres, ¿Me recuerdas?, a la que juraste tratar como a una princesa y dijiste que jamás la ibas a herir.
Rompiste tus promesas.
Me rompiste como a un trozo de papel y me echaste a la basura.
Ahí esta, muy en el fondo un alma que sufre por amor.
Esa es mi alma, tómala, llévala contigo, guárdala en el bolsillo donde guardas los objetos mas preciados.
Toma a esta mujer que ahora tiene 20 años y nunca la olvides.
Pues para ella eres lo mas increíble e importante que ha acontecido en su rutinaria vida.
Todos los recuerdos me los quiero borrar, pero están tan anclados en mi alma que ya no podré.
Por eso llévala contigo siempre.
No la mates como hiciste con mi corazón.
Y si acaso un día me extrañas mira dentro de ella y ahí encontraras cada parte de mi.
Tal vez quieras volver a armar este rompecabezas en el que me haz convertido...
Pues para ella eres lo mas increíble e importante que ha acontecido en su rutinaria vida.
Todos los recuerdos me los quiero borrar, pero están tan anclados en mi alma que ya no podré.
Por eso llévala contigo siempre.
No la mates como hiciste con mi corazón.
Y si acaso un día me extrañas mira dentro de ella y ahí encontraras cada parte de mi.
Tal vez quieras volver a armar este rompecabezas en el que me haz convertido...
Este es mi grito desesperado, que tarde un año entero en dar.
No lo ignores.
Sal a mi encuentro.
Salva mi alma.
No lo ignores.
Sal a mi encuentro.
Salva mi alma.
martes, 2 de septiembre de 2014
Rechazo, sobreprotección y perplejidad de la madre
Los investigadores de la conducta parental no deben perder de vista que si el modo característico de acción dice mucho sobre las actitudes de los padres hacia el hijo, no anticipa su desarrollo futuro con ningún grado de certeza, a menudo produce inesperados resultados.
Una delgada linea separa lo normal y necesario de lo patógeno, lo patógeno puede ser rectificado por unas interacciones durante otros períodos del desarrollo; o, a inversa, la actitud positiva puede volverse negativa en condiciones que modifiquen sus sentimientos hacia el hijo o que tengan duradero influjo sobre su personalidad. El rechazo materno es la más de las veces destructivo para el recién nacido, mientras que la cualidad sobreprotectora en pocos casos le infligirá daños. La genuina protección y sensibilidad de respuesta hacia el hijo es una manifestación de la cualidad materna normal.
Perplejidad parental es un síntoma bien definido del progenitor, que a su vez genera un síntoma definible en el hijo. El padre está mejor defendido de la perplejidad que la madre, puesto que no es su función biológica cuidar al lactacte.
Se demostró que todas las ventajas que le procuraría después de gozar de una vida familiar se pueden arruinar si el niño careció de una relación cálida y satisfactoria en su primer periodo. El niño depende de la madre para sus satisfacciones. Si ella demuestra ser una proveedora consoladora y lícita para sus preciosas necesidades, él empezará a amar su persona, y no sólo sus experiencias de cumplimiento de deseo. Él se vuelve capaz de amar, primero a la madre y después al padre y otras figuras importantes de su mundo exterior.
Acerca del concepto de madre rechazante
Muchos lactantes, en lugar de ser mantenidos lo mas cerca posible de la madre, pasan aislados muchas horas al día; otros sufren separaciones traumáticas de su madre; no pocos, al término de la lactancia, tienen buenas razones para sentirse abandonados cuando les nace un hermanito; y los hay también indeseados. No hay un solo tipo de madre rechazante, sino muchos. Están las que se sienten responsables de su actitud rechazante, y es posible entonces exhortarlas, aconsejarlas y ayudarlas; y están aquellas para quienes el rechazo queda fuera de su control.
Rechazo por contrariedad de la madre
La relación de una madre con su bebé es muy exigente. Es de esperar demasiado, entonces, que desempeñe esa tarea si no asumió voluntariamente la maternidad, si se le fue impuesta.
Las razones de la contrariedad de la madre pueden ser externas. muchas mujeres están incapacitadas para la maternidad en virtud de su masculinidad.
Además, están las madres que oscilan entre el rechazo y la aceptación del papel materno. Durante su embarazo una mujer puede mostrarse por completo renuente y ser seducida y tentada luego por el bebé, hasta el punto de entablar una relación tierna; en estos casos, la presencia viva del hijo les despierta lo que solemos llamar el instinto de madre.
No es la madre verdaderamente contrariada la que ejerce el influjo más desastroso sobre el futuro de su hijo. La madre que oscila entre el rechazo y el afán posesivo es la que inflige el daño más irreparable.
Rechazo por anormalidad de la madre
La madre psicótica puede incluir a su hijo en su propio mundo de sentimientos y de reacciones con centro en el sí-mismo (narcisismo)
Rechazo por separación
Puesto que el bebé no puede comprender la razón de la desaparición de su madre, toda separación equivale para él a un abandono. En consecuencia, no distinguirá entre separaciones breves y prolongadas.
El shock de separación suele expresarse en una perturbación de las funciones corporales, como alteraciones en el dormir y el comer o del aparato digestivo; mayor susceptibilidad para las infecciones, muchos bebés retroceden en su desarrollo; el logro más reciente en el desarrollo es el que se pierde primero.
El bebé necesita de una persona viva en el mundo exterior que sea capaz de satisfacer sus necesidades, además de servirle como objeto de amor. No puede vivir sin un sustituto de la madre. Y un repetido rechazo por separación produce individuos insatisfechos, vacíos y, lo peor, dados a la promiscuidad en sus relaciones.
Rechazo por inconstancia afectiva
Son muchos los pequeños que presentan los efectos del rechazo, por más que nunca estuvieron sujetos a una separación física de su madre.
Las madres pueden perder la retención afectiva de sus hijos pequeños; y esto, a su vez, puede inducir al niño a apartarse, perderse, irse lejos.
Las madres pueden sufrir la pérdida de otro hijo o de sus propios padres. Si esto sucede, sus sentimientos se restan al bebé y se empeñan en el duelo. Los bebés reaccionan frente a esas circunstancias como su se tratara de rechazo y abandono o con una mayor desobediencia y agresividad hacia la madre.
El rechazo por abandono parece ser también el factor más poderoso en la conmoción afectiva del niño pequeño cuando le nace un hermanito.
Alternancia entre rechazo y aceptación
Una madre puede ser rechazante hacia s bebé en los primeros estadios de este, y aceptarlo en el período en que es posible enseñarle cosas, etc.
Estas alternancias de rechazo y aceptación anclan en lo profundo del alma de la madre. No puede dejar de reaccionar así frente al niño si la conducta de este le despierta viejos conflictos.
Rechazo a pesar de la devoción
Aunque ningún ser humano es amado totalmente, hay mujeres que llegan muy cerca de esta meta con la relación a su hijo. Son más madres que esposas, y para ellas la posesión de un hijo significa el cumplimiento de sus más profundos deseos.
Cosa bastante paradójica: la madre más devota puede llegar a ser, por esta vía, la más rechazante para el hijo.
Se cree, que la actitud materna alterará la concepción del niño en la vida, su postura hacia los demás, su bienestar psíquico y hasta su destino. Dos hijos de los mismos progenitores presentarán diferencias profundas de personalidad si la madre muestra una actitud diversa hacia cada uno de ellos.
El monopolio madre-hijo
Una vez bien desarrollada la actitud e sobreprotección, la madre halla en su hijo la solución de todas sus necesidades afectivas.
Tipos de sobreprotección
Una clasificación clínica de la sobreprotección incluiría los siguientes tipos: 1) no materna, 2) transitoria, 3) atemprada, 4)mixta, 5) provocada por un sentimiento de culpa, y 6) pura.
puesto que tratamos con madres de diversas extracción cultural y pertenecientes a grupos económicos y sociales diferentes, las pautas de conducta materna con los hijos que en un grupo se estiman, correctamente, como sobreprotectoras, pueden ser fenómenos típicos en otro.
El tipo clínico más frecuente de sobreprotección materna se encuentra en el grupo en que la sobreprotección enmascara un fuerte rechazo o es su compensación.
Características de la sobreprotección materna
Sobreprotección materna es sinónimo de cuidado excesivo de los hijos por la madre.
La sobreprotección se puede definir como un proceso en que el poder infantil no modificado, conoce montruoso crecimiento que tiende a yugular a los progenitores.
Las madres de los hijos dominadores son consentidoras; las de los niños sumisos son dominadoras.
Factores maternos y paternos
Una delgada linea separa lo normal y necesario de lo patógeno, lo patógeno puede ser rectificado por unas interacciones durante otros períodos del desarrollo; o, a inversa, la actitud positiva puede volverse negativa en condiciones que modifiquen sus sentimientos hacia el hijo o que tengan duradero influjo sobre su personalidad. El rechazo materno es la más de las veces destructivo para el recién nacido, mientras que la cualidad sobreprotectora en pocos casos le infligirá daños. La genuina protección y sensibilidad de respuesta hacia el hijo es una manifestación de la cualidad materna normal.
Perplejidad parental es un síntoma bien definido del progenitor, que a su vez genera un síntoma definible en el hijo. El padre está mejor defendido de la perplejidad que la madre, puesto que no es su función biológica cuidar al lactacte.
El concepto de madre rechazante
Acerca del concepto de madre rechazante
Muchos lactantes, en lugar de ser mantenidos lo mas cerca posible de la madre, pasan aislados muchas horas al día; otros sufren separaciones traumáticas de su madre; no pocos, al término de la lactancia, tienen buenas razones para sentirse abandonados cuando les nace un hermanito; y los hay también indeseados. No hay un solo tipo de madre rechazante, sino muchos. Están las que se sienten responsables de su actitud rechazante, y es posible entonces exhortarlas, aconsejarlas y ayudarlas; y están aquellas para quienes el rechazo queda fuera de su control.
Rechazo por contrariedad de la madre
La relación de una madre con su bebé es muy exigente. Es de esperar demasiado, entonces, que desempeñe esa tarea si no asumió voluntariamente la maternidad, si se le fue impuesta.
Las razones de la contrariedad de la madre pueden ser externas. muchas mujeres están incapacitadas para la maternidad en virtud de su masculinidad.
Además, están las madres que oscilan entre el rechazo y la aceptación del papel materno. Durante su embarazo una mujer puede mostrarse por completo renuente y ser seducida y tentada luego por el bebé, hasta el punto de entablar una relación tierna; en estos casos, la presencia viva del hijo les despierta lo que solemos llamar el instinto de madre.
No es la madre verdaderamente contrariada la que ejerce el influjo más desastroso sobre el futuro de su hijo. La madre que oscila entre el rechazo y el afán posesivo es la que inflige el daño más irreparable.
Rechazo por anormalidad de la madre
La madre psicótica puede incluir a su hijo en su propio mundo de sentimientos y de reacciones con centro en el sí-mismo (narcisismo)
Rechazo por separación
Puesto que el bebé no puede comprender la razón de la desaparición de su madre, toda separación equivale para él a un abandono. En consecuencia, no distinguirá entre separaciones breves y prolongadas.
El shock de separación suele expresarse en una perturbación de las funciones corporales, como alteraciones en el dormir y el comer o del aparato digestivo; mayor susceptibilidad para las infecciones, muchos bebés retroceden en su desarrollo; el logro más reciente en el desarrollo es el que se pierde primero.
El bebé necesita de una persona viva en el mundo exterior que sea capaz de satisfacer sus necesidades, además de servirle como objeto de amor. No puede vivir sin un sustituto de la madre. Y un repetido rechazo por separación produce individuos insatisfechos, vacíos y, lo peor, dados a la promiscuidad en sus relaciones.
Rechazo por inconstancia afectiva
Son muchos los pequeños que presentan los efectos del rechazo, por más que nunca estuvieron sujetos a una separación física de su madre.
Las madres pueden perder la retención afectiva de sus hijos pequeños; y esto, a su vez, puede inducir al niño a apartarse, perderse, irse lejos.
Las madres pueden sufrir la pérdida de otro hijo o de sus propios padres. Si esto sucede, sus sentimientos se restan al bebé y se empeñan en el duelo. Los bebés reaccionan frente a esas circunstancias como su se tratara de rechazo y abandono o con una mayor desobediencia y agresividad hacia la madre.
El rechazo por abandono parece ser también el factor más poderoso en la conmoción afectiva del niño pequeño cuando le nace un hermanito.
Alternancia entre rechazo y aceptación
Una madre puede ser rechazante hacia s bebé en los primeros estadios de este, y aceptarlo en el período en que es posible enseñarle cosas, etc.
Estas alternancias de rechazo y aceptación anclan en lo profundo del alma de la madre. No puede dejar de reaccionar así frente al niño si la conducta de este le despierta viejos conflictos.
Rechazo a pesar de la devoción
Aunque ningún ser humano es amado totalmente, hay mujeres que llegan muy cerca de esta meta con la relación a su hijo. Son más madres que esposas, y para ellas la posesión de un hijo significa el cumplimiento de sus más profundos deseos.
Cosa bastante paradójica: la madre más devota puede llegar a ser, por esta vía, la más rechazante para el hijo.
El concepto de sobreprotección materna
El monopolio madre-hijo
Una vez bien desarrollada la actitud e sobreprotección, la madre halla en su hijo la solución de todas sus necesidades afectivas.
Tipos de sobreprotección
Una clasificación clínica de la sobreprotección incluiría los siguientes tipos: 1) no materna, 2) transitoria, 3) atemprada, 4)mixta, 5) provocada por un sentimiento de culpa, y 6) pura.
puesto que tratamos con madres de diversas extracción cultural y pertenecientes a grupos económicos y sociales diferentes, las pautas de conducta materna con los hijos que en un grupo se estiman, correctamente, como sobreprotectoras, pueden ser fenómenos típicos en otro.
El tipo clínico más frecuente de sobreprotección materna se encuentra en el grupo en que la sobreprotección enmascara un fuerte rechazo o es su compensación.
Características de la sobreprotección materna
Sobreprotección materna es sinónimo de cuidado excesivo de los hijos por la madre.
La sobreprotección se puede definir como un proceso en que el poder infantil no modificado, conoce montruoso crecimiento que tiende a yugular a los progenitores.
Las madres de los hijos dominadores son consentidoras; las de los niños sumisos son dominadoras.
Factores maternos y paternos
- Anticipación prolongada: Las madres que pasan por las angustias de una prolongada anticipación del recién nacido, de largos periodos de esterilidad relativa, de abortos, es natural que se vuelvan más aprensivas y protectoras.
- Desajuste sexual: Una mujer dedicada a su marido no puede ser exclusivamente madre.
- Restricción de la actividad social: los padres de los niños sobreproegidos tienen muy escasa vida social compartida.
- El hambre de afecto: En las vivencias de la niños de estas madres hallamos algunas pruebas evidentes de privación de ternura parental y de juego infantil. La falta de amor materno es característica en la vida de estas mujeres.
- Cuidados y responsabilidades hogareñas de la madre en su niñez temprana: La mayoría de estas madres han desempeñado un papel maternal, en el sentido de agresivo y responsable, desde su niñez.
- Las ambiciones coartadas de la madre: Realización a través del hijo. Compensar en el hijo lo que a ellos se les negó.
- Agresividad materna: Las madres sobreprotectoras manifiestan desde su niñez tendencias agresivas y auxiliadoras.
- Lactancia: En investigaciones sobre periodos de lactancia prolongados y breves, se descubrió una correlación significativa ente los primeros y la proporción de actitudes sobreprotectoras.
- Pulsiones masculinas no resueltas en la madre:El psicoanálisis considera que la maternidad es primariamente un retoño del instinto sexual, y el hijo, como objeto de amor, el sustituto del pene añorado.
- El padre periférico:Los pares de los niños sobreprotegidos se pueden caracterizar en general como maridos sumisos, estables y providentes, que desempeñan escaso o ningún rol autoritativo en la vida del hijo.
- Abuelos entrometidos: Aumentan el consentimiento de la madre oponiéndose a cualquier correctivo que se pretenda aplicar, y sabotean la disciplina de los padres.
El concepto de perplejidad materna
La perplejidad parental es una actitud anímica de desconcierto exagerado, y por ende anómalo en la relación entre el progenitor y el hijo. Desde luego que en todo progenitor se produce alguna perplejidad: es la incertidumbre natural en cualquier individuo que aprende una tarea nueva.
La perplejidad parental es característica, sobre todo, de los padre de niños esquizofrenicos. En el caso de estos padres, las respuestas frente a las experiencias corrientes de la crianza están muy lejos de ser las normales.
Bibliografía:
- Anthony, E., et. all. (1970) Parentalidad. Argentina; Amorrortu.
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