domingo, 5 de octubre de 2014

Mentiras, mentiras, mentiras...

Un circulo, un espiral, una caída libre. Cada día descubro que más y más cosas no eran verdad. ¿Cómo puede alguien ir por la vida diciéndo tantas mentiras?

Di que lo sientes. Dilo al menos una vez. El problema es que ahora ya no sé cuándo creerte y cuándo no. Pideme perdón y haz que salga del fondo de tu corazón. Ya me cansé, ya no puedo ni quiero. Tengo unas ganas inmensas de ir a sacudirte de los hombros; "Mirame, reacciona, ¡Date Cuenta!"
Por favor date cuenta. Estás plantando bombas en todo mi jardín, tengo miedo de pisar una y por eso no salgo de casa. El temor me inunda incluso en las noches, cuando creo que vas a venir a arrojar una piedra solo para que todo explote.

Si  tan solo dijeras que lo sientes, si tan solo pidieras perdón...

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