domingo, 26 de diciembre de 2010

viernes, 24 de diciembre de 2010

It's almost here...

Hace ya más de un año que escribí esto:

Bueno, pues hoy tienes gripa, sí hoy es 18 de diciembre, jeje pues fuiste a la peñita con tus papás y compraste la revista 15 a 20 ajá sí esa donde sale roberto tomás. En fin, decia algo de un concurso y hoy intentaste escribir pero nada, nada. ¿mandaste el e-mail? ¿ganaste!?

Sí lo mandé, y me alegro de decir que sí gané!

ya tienes novio?

No, lo siento.

ILOVEYOUFOREVER! y espero que shiny toy guns sigan siendo tu grupo favorito.

Claro que lo es, yo también te quiero. Janeth del pasado.



Jojo, mandense una carta a ustedes mismos (who am I talking to?); http://futureme.org/

And by the way...Feliz navidad.

martes, 14 de diciembre de 2010

I'm a Believer

Casi se acaba el año... y como no tengo ideas acerca de algo para escribir (bueno, sí tengo ideas, pero no quiero escribir sobre eso ahora mismo), y no tengo tarea (bueno, sí tengo, pero no tengo el libro que necesito), ...and the list goes on.
Así que voy a decir que últimamente he escuchado mucho a Kate Nash, porque su nuevo disco es lo mejor que me pudo pasar (My best friend is you), y tiene canciones bien geniales, y TODAS me gustan.
Peeero, si a música se refiere, mi grupo favorito 4ever es Shiny Toy Guns. Y por cierto que tengo una anécdota chistosa acerca de ellos; pues resulta que como aquí en México no venden sus discos (buuu), pues los tengo que encargar de Estados Unidos, y se los encargo a cierta persona que ya está bastante mayor de edad, y la primera vez que le pedí que por favor me trajera un disco de Shiny Toy Guns, ¡se la pasó buscando unas pistolas de juguete!, y es que...
Shiny Toy Guns, en español se traduce como "Pistolas de juguete brillantes" (nombre tonto, I know...pero es que su música es lo mejor de lo mejor)
Como sea...voy a hacer un TOP de mis canciones favoritas de mis artistas favoritos, sólo porque sí, porque no tengo ideas y ya.




1. "You are the one" de Shiny Toy Guns.
As I said before, Shiny Toy Guns es mi banda favorita, por lo tanto se merece el primer lugar. Y esta canción me gusta MUCHO, demasiado. Es genial y me gusta el video también, aunque este que escogí es en vivo.



2. "Suffocation" de Crystal Castles.
De Crystal Castles hay muchísimas canciones que me gustan, pero esta en especial me encanta, más que nada por la letra.



3. "Speechless" de Lady GaGa.
Hay muchas canciones (TODAS) de Lady GaGa que amo, pero esta en especial, es hermosa, y gaga canta muy bien en vivo y...¡Oh Dios!, me voy a morir cuando venga a Guadalajara y yo no vaya :(

Y básicamente esos son mis 3 artistas favoritos. Y mención honorífica a las 2 cantantes que he estado escuchando recientemente.



* "I hate seagulls" de Kate Nash
No tengo palabras para describir esta canción, es tan perfecta...PERFECTA, y me muero por tener a alguien a quien dedicarla.



* "Believer" de M.I.A.
Esta genial, todas sus canciones están geniales, aunque claro; muchos no gustan de la música de M.I.A. que porque no tiene sentido, que por la mezcla de ritmos, yo digo que M.I.A. es única.

That's it.

lunes, 13 de diciembre de 2010

Do-da-doo.

Escuchando: Early Christmas Present - Kate Nash

"How could I be so stupid and so blind, you know I think I had a hunch, about this anyway, about this whole thing.
I can't take it, I can't take it, I can't take it anymore..."

ODIO todo esto. Lo que siento, lo que eres, lo que me haces sentir. ODIO todo de ti, la manera en que hablas, como te expresas, la manera que escribes y tu mala ortografía, la manera en que te da igual todo y que seas un mal estudiante, la manera en que tus ojos sonríen (sí, lo hacen) y como tratas a la gente. ODIO a todos lo que te hablan, porque ellos reciben más atención de tu parte de la que yo algún día recibiré. ODIO a las chavas que has mirado, por lo afortunadas que son. ODIO que me hayas hablado tan bien un día, y que al siguiente no fuera igual. ODIO que no tengas tiempo para pensar en mi, y que ni si quiera intentes hablar conmigo. ODIO que solo vengas hacia mi por cosas estúpidas, es que claro, ¿por qué esperaría algo mas de ti?
ODIO que seas tan idiota, ODIO como te peinas, ODIO que parezcas un niño de 10 años y te comportes como uno de 5. ODIO como bailas, eres tan patético...



Pero espera, creo que estoy equivocada, aquí la patética soy yo.
ME ODIO a mi misma, porque justo cuando digo una cosa hago la otra, y porque hago cosas en contra de mi voluntad y solo porque tu lo dices. Me haces sentir estúpida y me haces sentir tan culpable.
ODIO lo que siento por ti. LO DETESTO.

viernes, 10 de diciembre de 2010

Revienta. (Parte 3)

EMPATÍA
“Simetría, debes trabajar en simetría. Debes ganarte su empatía, empatía, empatía. Abajo, abajo, las ciudades caen sobre mí.”

Estaba mirando fijamente a una foto colgada sobre la pared; era una mujer de mediana edad, con ojos de color azul, era bella, y estaba sonriendo, toda ella parecía tan feliz. “Feliz. Felicidad.” Pensó. Mientras esa misma mujer entraba y tomaba asiento en frente de él.
“Si pudiera regresar el tiempo…yo nunca pensé que las cosas se pondrían tan mal” Tenía muchas ganas de decirle a la psicóloga que los problemas se habían salido de control, que su mejor amiga estaba ahora comportándose como una loca, y que él sólo la quería de vuelta. “Quiero que seas la misma” Le había dicho hacía poco “regresa a lo que eras, por favor”

-Leni, que sorpresa. Creí que no volverías aquí.
-Es por ella, doctora. No puedo seguir así, ella no puede seguir así.
-¿Qué está pasando?
-No ha parado de buscarlo, estoy preocupado por ella.


“… Estuve a punto Leni, a punto. Pero pasó algo y me hizo cambiar de opinión, no sé qué me fue exactamente, sabes que no creo en esas cosas del destino ni mucho menos. Esta vez fue diferente. Quisiera que nos viéramos, ¿quieres? Sé que no es lo mejor, sé que en cuanto recibas este mensaje vas a llamar a esa estúpida doctora a la que me hacen ver desde el accidente.
En fin, solo quiero decirte que te extraño, muy a mí manera, pero te extraño Leni.”


-No te esperaba. En absoluto.
Sonreía, hace mucho tiempo que no lo hacía, parecía una persona distinta, todo su semblante cambiaba solo con ese gesto, se veía más viva. Leni la miraba fijamente, hace tantos años que la conocía, y hace poco tiempo hubiera dado su vida a cambio de ver por siempre aquella sonrisa.
-¿Estás bien? Ha pasado un tiempo. No sabía nada de ti.
-No pasa nada. Todo…todo está igual que antes, te lo prometí, ¿recuerdas?
-Tu doctora me llamó por teléfono. No te has reportado. ¿Por qué haces esto? Porque sigues intentando localizar a alguien que ni siquiera conoces, a alguien con quien no tienes vínculo alguno. ¿Qué pasa contigo?
-Yo... creo que lo encontré Leni… -dijo mientras Leni estaba a punto de cerrarle la puerta a la cara - Espera, ¡Espera!, no te vayas, no. ¡Yo no puedo estar sin ti!, no lo ves no puedes ver que a quien necesito para salir de esto es a ti…Leni –sollozo, mientras se tragaba sus últimas palabras, sabía que Leni no había alcanzado a oírla.
-No puedo soportar esta situación. Ya no. –Murmuró Leni mientras una lágrima resbalaba por su mejilla.


-Dime cómo fue que empezó. Si no me lo dices, no podemos avanzar. Tienes que cooperar.
-Si te lo cuento, ¿me vas a dejar en paz?, vas a dejar de llamarme y a pedirme que venga a tus estúpidas citas, ¿vas a hacerlo, doctora?
-Prometido.
-Conocí a Leni hace mucho tiempo. No puedo recordarlo ahora, pero él siempre habla de eso. Creo que se enamoró de mí desde que me vio, no puede ocultarlo, ¿sabes? –La doctora asintió – Ni siquiera recuerdo cómo nos hicimos amigos. Pero tengo mucho cariño hacía él. Aunque nunca lo quise como un novio, jamás. Creo que tal vez es eso lo que le haga sentir rencor hacia mí; tantos años y yo sigo sin sentir algo por él. –Hizo una pausa pequeña, parecía recordar algo importante, luego continúo- Todo lo que he hecho, ya sabe; el tomar drogas, el desistir a la vida, eso no tiene que ver con él. Creo que es mi propia culpa. Era pequeña cuando mis padres murieron, ahora ya no recuerdo nada de ellos, NADA. Y cada día que pasa ciento un vacío más y más grande. He tratado… -Las lágrimas comenzaron a salir- De verdad he tratado de encontrar una sola razón para decir “YO PUEDO CONTINUAR”, pero no puedo descifrar nada. No hay un solo motivo en este mundo que me haga feliz. Aunque cuando estoy con Leni…él me hace sentir bien, ¿sabe? Pero no puedo sentir amor, nunca he podido. Es como si todo lo que quiero tiene que terminar igual de destruido que yo…


Caminaba lentamente sobre la fría calle. No tenía puestas sandalias, sentía sus pies congelados. Había salido hace 10 minutos y ya se sentía muy mal. ¿Cómo había llegado a ese estado? No podía recordar nada. Antes del accidente –o del fallido suicidio, las cosas eran más o menos normales. Tal vez había sido el hecho de que nunca estaba conforme lo que la había llevado a querer suicidarse. O el hecho de que jamás se había sentido amada, “Qué estúpida soy” se dijo “Tengo a Leni, que me ofrece su amor, pero no puedo aceptarlo”
Llego al lugar donde se habían citado. Tenía miedo. Y no era un miedo común; a las cosas simples, a la obscuridad, a la soledad, a las arañas. “Tengo miedo porque no sé qué sigue, si lo encuentro hoy, y hablo con él, será el fin. Ya no tendré más motivos por qué luchar…”
Caminó un tramo más, y se detuvo frente a un edificio blanco, grande. Los ventanales estaban en su mayoría rotos, y las paredes llenas de grafitis y palabras obscenas. Ya no soportaría más si se quedaba allí, dudando. “Toda mi vida se basa en esto. Y no tengo el valor para enfrentarme a lo que me está matando, a lo que me ha llevado a la locura. Quienquiera que sea ese hombre; tiene el poder de liberarme de esto”
Tomó una bocanada de aire y entró al edificio. Se sorprendió por lo que vio.
-Adelante…-Le dijo el hombre.

jueves, 2 de diciembre de 2010

Bueno, vamos a ver...

...Después de que decidan que estoy deprimida o lo que sea, me darán medicina, cierto? Y… conozco a cientos de personas que los toman y ellos están bien. De verdad. Volveré al trabajo con mis nuevos antidepresivos, cenaré con mis padres, los convenceré de que he vuelto a ser la persona normal que nunca les da problemas. Un día, un chico me pedirá que me case con él. Él será lo suficientemente lindo, y hará a mis padres realmente felices. El primer año haremos el amor todo el tiempo, y luego en el segundo y el tercero menos y menos. Pero justo cuando nos estamos hartando el uno del otro, me embarazaré, cuidaré de los niños, trabajando, pagando hipotecas, nos mantendrá a flote por un tiempo. Y después de diez años, él tendrá una aventura porque yo estoy demasiado ocupada y muy cansada. Y lo descubriré. Trataré de matarlo. A su amantes. A mí misma. Lo superaremos, unos cuantos años después, tendrá otra aventura. Y esta vez voy a fingir que no sé nada porque de alguna manera hacer un escándalo no merece la pena esta vez. Y viviré el resto de mis días, algunas veces deseando que mis hijos puedan tener la vida que no tuve. Otras veces, secretamente complacida de que se estén convirtiendo en repeticiones de mí. Estoy bien. De verdad.

-Veronika Decide Morir (película)




*Me voy a acampar el fin de semana, bye bitches.

martes, 30 de noviembre de 2010

Leni

~There are times when I will need you~

Sabía que en esta vida habría algo más, algo que sin duda tendría ese poder que cambiaría mi vida, en fin, eso que la gente llama amor.
Comenzó aquel día, aún me resulta extraño, porque si pienso en ello pareciera que lo estoy viviendo de nuevo. El poder de los recuerdos, así le llamo. Es eso que me hace sentir vivo, hoy, y me hará vivir un día más, claro, si el destino lo desea.
Tengo a mis dos mejores amigos; Trash, el clásico tipo que cree ser filósofo y me dice el tiempo no pasa en balde, y Crybabies, ese que jamás se lo piensa dos veces, “el instinto manda”, ese sin dudas es su lema.
Bien, debo decir que siempre estaba deseando conocer chicas, era más que nada la combinación de hormonas en mí, la rebeldía de la adolescencia y el instinto el que me llevaba al punto más bajo de mi ser, pues bien, a ella la conocí de la manera más rara.

-Eras mi mejor amiga y mira como te has comportado, pedazo de perra, desgraciada.
Trash insistía en que jamás debíamos meternos en una pelea de chicas, sobre todo porque su ego estaba lastimado, y nosotros, ni con la mejor de las suertes podríamos contentarlas, mucho menos hacerlas calmar. Pero algo, en ese mismo instante me indicó que debía conocerla. A pesar de verla allí, despeinada y con los ojos desorbitados de coraje, pude distinguir la belleza de esa chica.
-¿Y qué estás viendo?, ¿te parece gracioso, eh?
Me miró con sus ojos grises, los más hermosos que he visto en mi vida. Yo no sabía qué hacer, ¿qué le podía contestar?
-Lo lamento…eh, no…yo…
-Mejor te vas, ¿quieres?
Tomé un respiro y me alejé lo más rápido que pude. ¿Por qué me había afectado tanto el verla allí, peleando con su…amiga? O era acaso que todo lo que me decía Crybabies era verdad, y yo estaba mal de la cabeza. Lo mejor que pude hacer en esos momentos fue ir a casa de Trash y contarle todo lo que había pasado.
-Leni, amigo. ¿Acaso estás loco? No puedes andar por la vida interrumpiendo a las chicas cuando están luchando por… ¿por qué estaban pelando?...cómo que no sabes…si vas a andar por allí interrumpiendo peleas, hazle un favor al mundo y presta más atención. Eres un distraído Leni, no me sorprendería que dieras positivo en un examen de ADD.
Cállate Trash!
Nunca habían sido útiles nuestras pláticas, aunque Trash sentía que era el ser más sabio en la faz de la tierra.


Dos días después, en la escuela, nos reunimos los tres como siempre hacíamos. No era como si fuéramos los más populares ni mucho menos, de hecho, creo que eran contados lo que conocían mi nombre, pero allí estábamos.
-Leni, cuéntale a Crybabies lo que pasó con esas chicas. Quiero volver a reír, anda.
-¿Qué pasó?
-Nada Crybabies, nada. Trash está delirando, como siempre.
Después de que Trash relató cada detalle a Crybabies, ambos rieron, y yo me sentía humillado. ¿Qué me pasaba? En otras circunstancias, yo también hubiera reído, pero no podía. En esos momentos, aún me estaba preguntando quién era aquella chica misteriosa.
-Leni… ¿estás ahí amigo? …¿Lo ves Crybabies? Te dije que esa chica lo dejó todo absorto, no reacciona, tiene una cara más idiota que de costumbre.
Cállate Trash!, y no, ella…no me dejó idiota.
-Pues claro que no Leni, tu ya estabas idiota.

El resto del día me lo pasé tratando de poner buena cara, pues me sentía bastante mal como para soportar las bromas de mis amigos. Pero como mi padre solía decir “las cosas llegan en el momento que menos esperamos”, y fue durante la salida, justo cuando Trash hacía su última broma del día, que la vi.
Llevaba el pelo negro recogido en una coleta, una blusa a rayas de color negra y un pequeño short de mezclilla, pude notar que sus ojos brillaban y en su rostro se dibujaba una sonrisa mientras veía a un chico. ¡Eso debía ser una broma!
-¿Qué pasa Leni?, ¿Es ella?
-Qué…demonios…Quiero decir, sí, es ella. La de los ojos grises y brillantes.
-“Ojos grises y brillantes” ¡Pero qué pasa contigo! Escúchate a ti mismo Leni.
-Crybabies, creo que sé porque Leni tiene esa cara de quien se ha muerto; mira a quién le está sonriendo su chica ideal.
-Ella no es mi chica ideal Trash, y…no me importa con quién esté. Me da igual
En ese punto traté de convencerme más a mí mismo que a Trash, y es que a leguas se notaba que estaba enfadado.
-De todos los chicos del mundo, debía ser él, ¿verdad Trash? No puede ser. Esa suerte tuya Leni, pero bueno, no me sorprende.
-…por qué…por qué debía ser Ethan.

ETHAN. ¿Cómo comienzo a describir a Ethan?
Yo nunca he sido de esos que tienen muchos amigos, de hecho estoy feliz así. Pero es que siempre debe haber alguien que nos arruina la diversión…y en mi caso, ese es Ethan. Siempre engreído, siempre presumiendo que estaba una banda y que algún día sería famoso. No era nada espectacular en él, NADA. De hecho, creo que hasta podría considerarse feo, hablo en serio, doy mi palabra. Pero por alguna rara razón del destino, allí estaba la chica misteriosa (aún no sabía su nombre) y estaba con Él. (Bastardo con suerte).

-Oye Leni, anímate. No creo que esa chica esté interesada en Ethan, no es más que un tipo sin gracia, tranquilo.
-¡Bah! Quién ha dicho que me importa.
¿Quién lo había preguntado, en primer lugar? Nadie. Nadie jamás debía saber que me había interesado en ella desde el primer momento en que la vi. Era ridículo, lo sabía, pero no podía controlar el sentimiento que causaba en mí.
Recorrí el camino de la escuela a mí casa caminando “porque necesito despejar mi mente”, según mi propia excusa, pero en realidad solo quería sacarla de mi cabeza.
Había muchas chicas allí afuera, lo sabía. Así que ¿por qué me fijaba en la misteriosa chica de ojos grises? Era un patético, una persona patética, sin dudas.


Al cabo de 15 minutos, me di cuenta de que no estaba solo, una persona caminaba detrás de mí, pero muy silenciosamente. No le presté atención al principio, pero luego intenté inútilmente concentrarme en otra cosa. Comencé a cantar una canción mentalmente If I’m lost please don’t find me, If I jump let me sink, y para cuando me di cuenta, estaba tarareando y luego cantando bajito We descended from no one, with a wink
Una voz detrás de mí interrumpió mi canto. Me volteé para ver que sucedía, y mis ojos no lo podían creer.
When it’s cold outside, hold me, don’t hold me. When I choose to close my eyes, coax me, don’t coax me”
Ella estaba cantando. Una voz angelical, sin lugar a dudas, y yo me quedé con la cara de estúpido. O al menos eso supongo, porque poco después me sonrió como quien le sonríe a un loco.
-Hola. Eres Leni, ¿cierto?
Sabía como me llamaba, ¿era posible? ¿Se lo había dicho Ethan? Ese maldito y gran idiota.
-Eh, sí. Soy Leni.
Le lancé una sonrisa desesperada. Ridículo. Esa palabra me describía en esos momentos.
-Me llamo…bueno, todos me dicen Goodbooks. Tú eres el famoso Leni, creo que nos conocemos, ¿cierto? Eres el chico que me vio pelear con Halcyon. Lamento eso, a veces no me controlo.
-…Sí…te recuerdo.
-No sabía que estábamos en la misma escuela, pero mira que coincidencia, uno de tus amigos...cómo es el nombre...Ah claro, Crybabies, él está en mi clase de álgebra, no es muy bueno, aunque claro, es un tipo genial, realmente gracioso.
También soy un tipo genial, ¿Te has fijado en eso? Cierto... jamás te fijarías en alguien como yo
-Lo es. Pero trata de pasar más de una hora con él, terminarás muerta de aburrimiento.
Caminamos un rato más, la calle era más y más angosta, en mi cabeza rondaban ideas tontas, ¿Debía hacerle más plática?
-Goodbooks...yo...creo que...
Me miró, no sé si fue eso o el hecho de que mi estupidez estuviera aumentando a un ritmo vertiginoso, porque aunque intentaba hablar, mi voz no salía. Esa chica sí que me estaba atontando.
-Nos vemos Leni. Y por cierto, me gusta esa canción, tienes buen gusto.
Dio la vuelta a la calle, se volteó y sonrío de nuevo. Jamás me sacaría esa sonrisa de la mente.

lunes, 29 de noviembre de 2010

I'm Katie Fucking Fitch

Hoy me levanté diciendo "Hoy será un buen día", sobre todo porque dormí bastante bien, no me quejo.Pero empieza el día y empiezan los problemas, como que tengo un maestro completamente loco,que se cree tan sabio y que cree que nadie tiene derecho a llevarle la contraria...y justo cuando me digo "vamos a cambiar" y le reclamo ciertas cosas (nada que no fuese la verdad) le da por regañarme y...nah, no puedo mentir diciendo que me afectó, pero, bueno.
...Y ahora resulta que mi laptop tiene virus.

Que bonito, que bonito.

domingo, 28 de noviembre de 2010

De lunas, pájaros y monstruos.

Ya viene diciembre y con este mes llega la -Navidad-
Yo no soy muy fans de eso, más que nada porque siento que es una época de "vamos-a-ser-hipócritas-lalala" Pero me gustan los regalos :) ¿A quién no le gustan?


Y esta navidad, lo que quiero es:
  • Girls Le Disko - Shiny Toy Guns. Es un disco de remixes de mi grupo favorito Shiny Toy guns. No soy de las personas a las cuales les gustan los remixes, pero este disco ES mi excepción.
  • Heartbeats ep - Versant. Son como 5 canciones creo, de este grupo que recomiendo al 100%, y solo porque está mi cantante favorita; Carah Faye.

Quisiera mil discos más, pero no tengo el dinero, y pues...

  • Maquillaje. Quiero comprarme mucho maquillaje, de Clinique, The Body Shop y de Cover Girl. Así que si alguien quiere regalarme aunque sea un lipstick, recibido será.

Recientemente adquirí "My Best Friend Is You" de Kate Nash, y es un disco bien genial, amo la voz de Kate y su acento es genial. Compré Revlon Custom Creations, que es una base de maquillaje y es muy buena, me gustó. Compré unas sombras de cover girl, una mascara y corrector de Avon...y eso es todo lo que he comprado ultimamente*



...*Este fue un post sin uso. Ultimamente estoy más floja que de costumbre.

martes, 23 de noviembre de 2010

Hot Mess


You were a problem child
Been grounded your whole life
So now you running wild
Playing with them good girls
No that ain't your style

You think your hot shit
You cool, I love it, I love it
Yeah, yeah
Stumbling but yeah, you're still looking hella fine
Keep doing what you're doing and I'ma make you mine

Well, you're a hot mess and I'm falling for you
And I'm like hot damn let me make you my boo
cause you can shake it shake it shake it
Yeah you know what to do
You're a hot mess
I'm loving it, hell yes

I've been hypnotized
The city's your playground,
I watch you take a bite
At 5am roaming in the streets
Drunk all night

If you're dancing up on tables
You go you go, you got it girl
Say that you're unstable
You go coco, you got it girl
Dancing up on tables
Say that you're unstable
You're a haha haha ha yeah you're a hot mess
Haha haha ha we're singing hell yes.

miércoles, 17 de noviembre de 2010

Todos somos fantasmas...

...Fantasmas de los que un día fueron nuestros padres y de lo que hoy en día nos hemos convertido. Siempre terminamos por aceptar que así somos y ya, sin una mínima explicación. Por casualidad, hace días hojeé un libro de Paulo Coelho, y al azar, leí un pequeño texto que hablaba acerca de las costumbres que sin razón tenemos, y que no nos preguntamos ¿por qué hago esto?, ¿Por qué me estoy comportando así?
Simplemente decimos "Así soy. Esto es lo que hago." Y ya, punto.

Desde que leí Veronika Decide Morir, mi forma de ver a las personas es otra. Y es que es verdad que me importa mucho lo que otras personas puedan decir de mí, cosa que es estúpida, lo sé. A fin de cuentas es mi cuerpo, mi vida y mi mente. Mis decisiones son solo mías y por lo tanto debo tener cuidado y alocarme solo cuando sea necesario.
¿A cuantos de nosotros nos han llamado locos alguna vez? A todos, supongo.

Pero basándome en mi vida, en lo que soy y en que NO quiero ser. Prefiero no ser como todos, romper un poco las reglas (o un mucho), y decir que soy una persona que SABE lo que quiere (ser escritora, por favor y gracias) a ser igualita que todos los demás, y usar sus mismas ropas, hablar como ellos hablan y lo que es peor (realmente) escribir como todos escriben. No soporto la mala ortografía, Amén.

A fin de cuentas; ¿Qué es un loco?*

*Te contaré una historia -dijo Zedka-. Un poderoso hechicero, queriendo destruir un reino, colocó una poción mágica en un pozo del que todos sus habitantes bebían. Quien tomase aquella agua, se volvería loco
.>>A la mañana siguiente, toda la población bebió y todos enloquecieron, menos el rey, que tenía un pozo privado para él y su familia, donde el hechicero no había conseguido entrar. El monarca, preocupado, intentó controlar a la población ordenando una serie de medidas de seguridad y de salud pública, pero los policías e inspectores habían bebido el agua envenenada, y juzgando absurdas las disposiciones reales, decidieron no respetarlas de manera alguna.
>>Cuando los habitantes de aquel reino se enteraron del contenido de los decretos, quedaron convencidos de que el soberano había enloquecido y por eso disponía cosas sin sentido. A gritos fueron hasta el castillo exigiendo que renunciase.
>>Desesperado, el rey se declaró dispuesto a dejar el trono, pero la reina lo impidió diciendo: "Vayamos ahora hasta la fuente y bebamos también. Así nos volveremos iguales a ellos."
>>Y así se hizo: el rey y la reina bebieron el agua de la locura y empezaron inmediatamente a decir cosas sin sentido. Al momento sus súbditos se arrepintieron: ahora que el rey estaba mostrando su sabiduría, ¿por qué no dejarle gobernar?
>>El país continuó en calma, aunque sus habitantes se comportasen de manera muy diferente a sus vecinos. Y el rey pudo gobernar hasta el fin de sus días.
Veronika se rió .-Tu no pareces loca - dijo .
-Pero lo soy , aunque esté siendo curada , porque mi caso es simple : basta recolocar en el organismo una determinada sustancia química , Sin embargo , espero que esta sustancia se limite tan sólo a resolver mi problema de depresión crónica ; quiero continuar loca viviendo mi vida de la manera que yo sueño y no en que otros desean .¿ Sabes lo que hay allá afuera , detrás de los muros de Villete ?
-Gente que bebió del mismo pozo.
-Exactamente -dijo Zedka -. Creen que son normales porque todos hacen lo mismo . Voy a fingir que también bebí de aquella agua .
-Pues yo bebí y éste es , justamente mi problema .Nunca tuve depresión , ni grandes alegrías o tristezas que durasen mucho .Mis problemas son iguales a los de todo el mundo. "

miércoles, 10 de noviembre de 2010

You're just too good to be true.

Hoy voy a hablar de 2 libros que leí hace mucho, (de verdad) mucho tiempo. Y me hicieron cambiar, no en lo psicológico o algo así, sino que hicieron que me interesara más en los libros de suspenso, terror y misterio.

Lo a-d-o-r-o. Aunque a lo mejor si lo vuelvo a leer se acabará el encanto, quién sabe. Se trata de unos turistas americanos que vienen a México, y visitan unas ruinas Mayas, donde una planta...les arruina más que solo sus vacaciones. (Hay partes del libro donde describe cosas demasiado fuertes, el escritor es muy bueno o yo era muy ingenua cuando lo leí). Además, hay película de este libro, donde hicieron un revoltijo de personajes y...sí me gustó, me dio asco/miedo/ y desde entonces me dieron miedo las enredaderas. Aquí el trailer:








Ah, también me vestí de uno de los personajes en Halloween del '08. Creo que tenía una foto por allí, pero no sé donde quedó.



(La de la flecha era yo)

JURO por todo en lo que creo que para ese entonces, ME TRAUMÉ. Me dio mucho miedo, y había partes en los que de plano, sentía que el mismo diablo me estaba contando la historia (Tal vez si lo vuelvo a leer, ya ni me asuste, lo sé). Trata de una maldición que tiene cierta familia, donde cada mujer, cuando cumple cierta edad, es asesinada...Ya no me acuerdo mucho de los detalles, pero sí, es muy buen libro.

Este tienen que leerlo para entender de qué rayos hablo.

PD. Ayer fue mi cumpleaños y pues... hoy ya soy un año más vieja, Já.

domingo, 7 de noviembre de 2010

Decifrar es una palabra importante.

Creo que toda mi vida ha sido igual. Y no tengo que leer un libro para darme cuenta. Yo ya lo sabía.
Siempre lo he sabido, es solo que no lo quiero aceptar. No aún. No cuando parece que tengo una oportunidad de salir de mi zona de confort, y... yo no quiero cambiar. Eso es lo que más me decepciona.
Siempre hay algo, señales, fechas, días diferentes, personas nuevas. Siempre hay algo que me dice "esto es lo que necesitas, yo soy lo que necesitas"
Pero prefiero no arriesgarme. Porque prefiero no ganar.
Nunca he ganado. ¿O sí? A fin de cuentas no tengo nada para perder tampoco.
Es difícil darse cuenta de lo que uno realmente es. Porque vivimos engañados, creyéndonos fuertes, perseverantes, pero vivimos en la rutina, vivimos haciendo cosas "porque debemos hacerlas".
Hay días, en los cuales me siento "FELIZ", si es que es posible. Pero esos días son contados.
Necesito algo, necesito a alguien, que me haga entender que la vida se vive una vez, y yo ya estoy creciendo, en todos los sentidos lo estoy haciendo, y en vez de envejecer, me siento más joven. Y con menos ganas de salir adelante.

Soy como María, y espero, de verdad espero que con el paso del tiempo (a veces rápido, a veces muy lento) me dé cuenta de que no tuve la culpa de mis errores, y sí, cometí uno en especial del que me siento aún culpable.
Miro atrás y aún no logro perdonarme. Aunque sé que no fue ni será mi culpa. ¡Por qué no lo dejo ir!
Así como ella creyó haberse enamorado, su primer amor... cuando tenía 11 años y dejó pasar la oportunidad por timidez, porque era niña, y los niños son así. Yo creí también, que me había enamorado a los 14 años, cuando conocí a unos ojos brillantes que me hablaban en un idioma distinto y me daban esperanza, pero a diferencia…yo no lo dejé pasar, no fui ni la culpable ni la que lo quiso así. Ahora, en la actualidad, me gusta pensar (tal vez por comodidad) que fue obra del destino, que así Dios lo decidió.
Quiero pensar que va a llegar un día en el que todo va a cambiar. Porque siempre pasa, lo he visto antes; entre más seguridad creo (o creemos) tener, más débil me comporto, y entonces algo pasa. Porque así es la vida, porque nos pone pruebas.
No pido mucho, no pido irme a otro país, ni hablar un idioma distinto, no pido un trabajo donde descubra que no sirvo para nada, no pido a un hombre que necesite que lo salve.
No pido ser una escritora en busca de su destino, de su esposa que se escapó con un extranjero, no pido cruzar un país entero, ni cruzar el Camino de Santiago. No pido ser una alquimista en busca de un tesoro, ni pido encontrar a una mujer en la mitad de la búsqueda. No pido ser Verónica, ni pienso suicidarme con unas pastillas para dormir, que me lleven a un hospital, y ahí encontrar a un esquizofrénico a quien amar. No, yo no pido vivir en un pueblo pequeño, trabajar en un hotel, donde un día encuentre a un extranjero y que sea un demonio, que me tiente a mí y que me pida que mate a alguien…
Yo solo quiero que todo esto tenga sentido.

Porque un nuevo año comienza para mí, pero siento un vacío que no puedo llenar.

jueves, 4 de noviembre de 2010

De un pájaro y mi vida.

Érase una vez un pájaro, adornado con una par de alas perfectas y plumas relucientes, coloridas y maravillosas. En fin, un animal hecho para volar libre e independiente, para alegrar a quien lo observase. Un día una mujer lo vio y se enamoró de él. Se quedó mirando su vuelo con la boca abierta de admiración, con el corazón latiéndole más deprisa, con los ojos brillantes de emoción. Lo invitó a volar con ella, y los dos viajaron por el cielo en completa armonía. Ella admiraba, veneraba, adoraba al pájaro.
Pero entonces pensó: "¡Tal vez quiera conocer algunas montañas distantes!" Y la mujer tuvo miedo. Miedo de no volver a sentir nunca más aquello con otro pájaro. Y sintió envidia, envidia de la capacidad de volar del pájaro.
Y se sintió sola.
Y pensó: "Voy a poner una trampa. La próxima vez que el pájaro venga, no volverá a marcharse"
El pájaro, que también estaba enamorado, volvió al día siguiente, cayó en la trampa y fue encerrado en la jaula.
Todos los días ella miraba al pájaro. Allí estaba el objeto de su pasión, y se enseñaba a sus amigas, que comentaban: "Eres una persona que lo tiene todo" Sin embargo, empezó a producirse una extraña transformación: como tenía al pájaro, sin poder volar ni expresar el sentido de su vida, se fue consumiendo, perdiendo el brillo, se puso feo, y ella ya no le prestaba atención, excepto para alimentarlo y limpiar su jaula.
Un buen día, el pájaro murió. Ella se puso muy triste, y no dejaba de pensar en él. Pero no recordaba la jaula, recordaba sólo el día que lo había visto por primera vez, volando contento entre las nubes.
Si profundizase en sí misma, descubriría que aquello que la emocionaba tanto del pájaro era su libertad, la energía de las alas en movimiento, no su cuerpo físico.
Sin el pájaro, su vida también perdió el sentido, y la muerte vino a llamar a su puerta. "¿Por qué has venido", le preguntó a la muerte.
"Para que puedes volar de nuevo con él por el cielo -respondió la muerte-. Si lo hubieses dejado partir y volver siempre, lo admirarías y lo amarías todavía más; sin embargo, ahora necesitas de mí para poder encontrarlo de nuevo."

miércoles, 3 de noviembre de 2010

Runaway.

Luego de un fin de semana sin internet (que se prolongó más de lo que debía). Me he dado cuenta de varias cosas.
  • Soy increíblemente más floja de lo que algún día imagine.
Y no lo digo sólo porque sí, ¡es que en serio!, me sorprendo a mí misma. Desde el viernes que llegué a casa me dije "Voy a recoger mi cuarto, voy a barrer mi cuarto, blah, blah". De nada ha servido. Me pasé todo el tiempo diciendo "que flojera, mejor luego lo hago", y sí, gracias a alguna fuerza mayor fui capaz de acomodar mi -muy- desordenado cuarto, pero hasta el último día.
  • La vida -o mejor dicho; MI vida sin internet, no es vida.
De verdad, ¿qué me la pasaba haciendo 2 ó tal vez 3 años atrás?. Ni idea. Soy una vergüenza. Me la pasaba el día comiendo-viendo la tv-comiendo-viendo una película-comiendo.


  • Esto del horario nuevo no me va.
No me va porque siento que cuando me levanto es tardisimo y ¡apenas son las 7am!, y no me va porque cuando son las 7pm pareciera que son las 9pm. Bueno, no queda de otra más que acostumbrarse.

Y finalmente:
  • Estoy cansada.
Así nada más. Simple. Cansada de verme a mí misma en situaciones ridículas, ¡Y en las que yo misma me metí! Cansada de vivir en un lugar donde lo más emocionante que puedes hacer es ir al mar y tomar el sol. Cansada de estudiar cosas sin sentido y que me van a ser completamente inútiles por el resto de mi vida. Cansada de buscar excusas y más excusas para no escribir, porque -necesito una idea. Y si la tengo, no sé cómo desarrollarla. Cansada de fingir que me agrada cierta gente, cuando no es así. Cansada de fingir ante mis padres, ante mi familia, ante algunas de mis amigas.


Quisiera cambiar pero no sé como. Quisiera ser más sincera, más abierta a las nuevas posibilidades, a la aventura, a hacer nuevas cosas...pero esa no soy yo. No sé que hacer, para ser honesta.

miércoles, 27 de octubre de 2010

You were everything ...


Yo también tengo una historia que contar. Desgraciadamente no es el tipo de historia que me gustaría. No soy interesante, y lo que hago tampoco. Pero hubo una vez, sólo una. En donde me sentí extremadamente feliz. Pensaba "Él es lo que quiero" y luego, así, de la nada; Me partió el corazón. Ha pasado ya tanto tiempo, y aún me duele, aún siento la herida abierta. ¿por qué soy tan patética?, ¿Por qué no lo dejo ir y conservo los sentimientos que dejó en mí?
Porque para mí fue más importante de lo que tenía que ser. Fue una verdadera estupidez, pero así...así con los defectos que tenía, así con las veces que lloré, así con los momentos en que me sentí humillada por su culpa... Aún así lo quería.
Me tomo las cosas muy en serio, supongo.
En cualquier lado lo veía, cualquier cosa me recordaba a él. ¿por qué?
Me encontraba destrozada y feliz, y era por él. Todas mis emociones... y él las controlaba.

Ahora las cosas han cambiado, gracias al paso del tiempo me di cuenta de muchisimas cosas. Que soy más fuerte de lo que pensaba, que él jamás fue lo que yo pensaba que era, que le dejaba pasar tantas cosas...
en fin, no quiero volver a lo mismo. Si hablo de esto ahora es para recordarme que allá afuera, hay demasiada gente, y que en algún lugar, voy a encontrar a la persona que será la indicada.
Sí, voy a cometer muchos, muchos errores. Pero de algo van a servir.
NADA acontece porque sí, tenemos una lección.

Voy a decir NO a seguir pensando en mi ex-Chuck Bass.

lunes, 25 de octubre de 2010

Revienta (parte 2)

Sofocación.

“Si te sofocas, prométeme que no resucitarás, y si cambias de idea, es demasiado tarde. Estás desperdiciando tus días como desperdiciaste tus noches y desperdiciaste tu juventud. Estás… esperando por alguien y esperaste en vano porque no hay nada para ti. Sofocación.”

“¿Dónde estás...?, ¿Dónde estás...?, ¿Dónde estás...?” No paraba de escuchar esa voz en su cabeza. Sentía que ya nada valía la pena. Ni un esfuerzo. Y, ¿por qué estaba allí? Se sentía desesperada, con ganas de gritar. Los extraños pasaban y la miraban, con ojos llenos de lujuria. Ella solo les devolvía la mirada con enojo, con rabia. ¿Por qué tenía que ser así?

“Siempre es lo mismo” pensó.

Y entonces la primera lágrima cayó. No lo podía controlar más. Toda la tristeza, toda la furia, estaban saliendo al fin. Una tras otra las lágrimas se deslizaban por sus mejillas. “¿Qué estoy haciendo?” sollozo.


-Entonces, ¿qué dices? Vamos, tienes que salir, siempre estás sola.

-Eso no te importa Rosa. No es de tu incumbencia.

-¿De qué hablas?, solo estoy invitándote a salir conmigo; va a ser divertido.

-Dices que es como una cita doble, ¿no?

-Sí. ¡Anímate! No tienes nada que perder…


Los coches seguían pasando, uno tras otro, sin detenerse. Los veía y cada vez se sentía más sola. La espera se volvía más y más sombría. Pero a fin de cuentas, ¿Qué estaba esperando?, no era como si un superhéroe fuera a llegar mágicamente por ella. Claro que no, hace mucho que había dejado de creer que el amor existía, que los milagros eran posibles. ¿Cómo iba a esperar que de la nada alguien la salvara?

Se había secado las lágrimas. Poco a poco dejaron de salir. En vez de ellas, un enojo se apoderaba de ella ahora. Enojo hacía todo; hacía ella misma, por haber sido tan estúpida como para creer que las cosas iban a mejorar, ¡Ni en una simple cita le iba bien! Enojo hacía Leni, por no estar allí cuando más lo necesitaba. ¿Por qué había decidido que lo mejor no era estar cerca de ella? “Es tan simple que no lo quiero aceptar. No puedo hacerlo, si Leni dice que nuestra amistad no es buena, adelante, voy a seguirle el juego.”

¿Pero por qué en ese momento? En el que más sola se sentía; rodeada de tanta gente, y aún así sola. Eso era lo que más la hacía enojar, el hecho de que estuviera rodeada de gente estúpida, sin sentido, llenos de deseos simples y con sueños imposibles.

Pensó en Leni, y lo en lo que él significaba. No pudo evitarlo, y comenzó a llorar de nuevo. Esta vez no trató de disimular; estaba en la calle, sentada, con demasiados desconocidos que veían su dolor.

De pronto algo la tomó por sorpresa, era una mujer mayor. La miraba con ternura, y se paró allí, enfrente de ella.

-¿Te puedo ayudar en algo?

No pudo responder, ¿qué necesitaba? Nada. Porque no había algo en el mundo que calmara el dolor, nada en el mundo podría hacerla volver a lo que era antes.

La anciana dejó caer una mano hacía ella, tenía la intención de tocar su mejilla, pero se sobresalto ante un inesperado grito.

-¡No me toqué!

-Lo siento, querida. Yo…

-¿No me ha oído? ¡No me toque! No quiero su compasión. Aléjese.


Estoy sentada, comiendo un helado junto a un imbécil. De todas las personas del mundo, mi amiga Rosa me ha traído como cita a un imbécil. Esto solo me pasa a mí. Pero a quién engaño, en primer lugar; no debería haber venido. No pertenezco a esto…ni a la gente normal, ni a las chicas normales, ni siquiera puedo tener una cita normal. El chico que está junto a mí está hablando acerca de su escuela y de cómo ha peleado ya con algunos chicos, ¿cree que le presto atención?

Me digo mentalmente que toda esta farsa acabará pronto, él tipo regresará su casa, y yo seré miserable de nuevo.

-¿Qué te parece? –me dice.

-¿Disculpa?

-No me prestaste atención, lo ves. Te he contado una historia interesante y tú estabas en otro mundo. ¿Pasa algo?

No le respondo, tal vez así se exaspere ante mi falta de interés y decida marcharse.

-¿Quieres que…nos vayamos?

No digo nada. Esto se ha pasado de la raya. En general, estoy odiando a Rosa por conseguirme la peor cita del mundo.

Me paro y empiezo a caminar lentamente. No creo que me siga; mejor. No estoy dispuesta a dar explicaciones. Camino más rápido y la cabeza me da vueltas, siento pánico. ¿Qué me está pasando? Antes de tener una respuesta en concreto, comienzo a correr, rápido y sin mirar atrás. “¡Espera!” Le oigo decir.

No pienso detenerme, pero las piernas me fallan y en un segundo estoy en el piso. Me siento mal, muy mal, parece como si todo el mundo girara muy rápido, todo está borroso y no puedo dejar de mirar a los lados, en busca de alguna respuesta.

-Así que te ha dado por jugar, ven aquí… -me dice, mientras pone sus labios sobre los míos. Yo lucho, lucho con todas mis fuerzas por liberarme. Pero no puedo. Él es más fuerte, y parece que no me soltará dentro de poco. Tomo una bocanada de aire y solo logro cansarme más. ¿Por qué no puedo liberarme?, ¿qué me está pasando?

En un intento desesperado por librarme de su beso, lo golpeó. Le doy con todas mis fuerzas en su mejilla, y parece funcionar. Mientras está distraído me paró y empiezo a correr de nuevo. No sé a dónde voy, solo pienso en escapar.


Todo se empieza a poner más oscuro, ¿qué hora era? No lo sabía, y tampoco estaba segura de dónde estaba. Parecía haberse quedado hipnotizada por el sonido de los carros, por sus luces, por sus colores. Estaba sentada, pero quería marcharse, y entre más pronto mejor. Tal vez si no le hubiera gritado a la anciana, ahora tendría cómo regresar a casa. Pero estaba demasiado cansada para pedir ayuda. ¿Por qué había salido sin celular? Ni siquiera tenía dinero suficiente para pagar un trasporte. “No hay esperanzas. Estoy aquí, rodeada de tanta gente, pero no soy capaz de hacer algo respecto a mi situación”

Cerró los ojos, y cuando los abrió logró ver un rostro conocido, corría hacía ella y pareció gritarle. Pero no escuchaba nada. Cerró los ojos de nuevo, deseando que todo acabara, que todo desapareciera. Apretó sus parpados, cerrándolos con fuerza. “Todo va a estar mejor si yo muero” pensó, y después, todo a su alrededor se desvaneció.

sábado, 23 de octubre de 2010

How to behave.

Es el dolor que cargas.
Son las canciones que cantas.
Es la constante falta de cualquier cosa normal.
Es la vida que das,
cuando ellos dicen mi nombre.
Son los problemas serios,
no sé cómo comportarme.

Aunque nunca has tenido que ir,
siempre hay una habitación para dos.
Aunque nunca has caído,
hay una red de seguridad para ti.

Todo lo que tengo es suficiente
para llevar a donde voy.
Todo lo que he visto es suficiente
para recordar dónde he estado.


Es más difícil ahora de lo que solía ser.
Se está haciendo un poco tarde.
Cuando tus ojos deciden lo que deberías ver,
es más de lo que puedes soportar.

miércoles, 20 de octubre de 2010

Revienta. (Parte 1)

Ella no sabe lo que quiere. Ella esta perdida. Perdida como cada uno de nosotros, en este sendero, el que nos indica que todo está bien, qué no pasa nada. Pero ella sabe bien lo que pasa en realidad. Sabe que hay peligros escondidos y que nadie la va a poder salvar, por que es su turno, y la muerte no juega. Ella viene. Y las miradas, esta vez están perdidas, no hay tiempo para pensar, la salida esta más y más lejana. Y entonces, allí, donde todo y todos tienen miedo; a lo desconocido, a que las cosas salgan mal, sí, esos miedos que son reales, nada de estupideces, porque no va a soportarlo más. Es allí cuando tuvo la visión, de que tenía un destino que cumplir, y si desistía, si abandonaba este mundo, entonces el infierno la estaría esperando.
Pero no lo hizo, se trago sus palabras y regreso a la tierra de los vivos, de los vivos que están muertos, esos que solo piensan en cosas superficiales. Nunca le gusto vivir allí, pero ella tenía algo que hacer, y aquí empieza.

-Quiero algo más que esto Leni. No, no me mires así, quítate de una vez las dudas. Estoy bien, he dejado las ideas de la muerte, estoy aquí, ¿lo ves?
-¿Qué te han hecho?
-Vamos, esta vez quiero escucharte gritar Leni, no te detengas, vamos Leni, vamos. Grítales, a ellos, grítales.
- No estás bien, me voy. Quisiera quedarme aquí. Pero no más.
-¿Qué pasa? Ya no puedo soportar esto, Leni, ¿no lo entiendes? No quiero vivir en un mundo donde todos se interesan por cosas sin importancia. Tienes que ayudarme.

Días antes. Había hecho su plan a la perfección, cada simple detalle, lo había cuidado, no debía dejar nada inconcluso. Estaba segura de que su muerte había llegado.
No tenía a nadie a quien decir adiós. Su único amigo la consideraba una rara chica suicida, así que, cuando se enterara de que ella había tomado la decisión, finalmente, de irse de este mundo, sabía que no se sorprendería en absoluto. Tal vez –pensó, hasta lo va a considerar un alivio, sí, un alivio a la preocupación hacía mí. Leni estará libre cuando termine con esto.
Tomó su chaqueta favorita, y salió a la calle, luciendo despampanante como siempre, con su cabello negro mezclándose con el viento.
Llevaba casi una semana pensando en la manera más fácil de salir de este mundo, pero no lograba pensar nada. Las pastillas eran un método fácil, pero la espera se convertiría en agonía, y tal vez hasta podría arrepentirse. Ahorcarse, eso no era una opción, no. Esperar para ahogarse, eso sería desesperante. Así que cuando pensó que no tenía más opciones, se decidió por una que dejaría a alguien más con la mente llena de culpa, quién sabe, a lo mejor le iba a cambiar la vida a alguien después de muerta.
Se sentó en una pequeña banca, tomó un cigarro, el último –pensó. Atravesó la calle, sin temor alguno, sabía que para una de esas personas, la vida no sería igual. Tomó un último respiro y se paró justo en medio del camino, esperaba que pasara rápido. Que un coche solo pasara y acabara con el dolor, con el sufrimiento que el día a día traía.

-Nunca tuve una sola oportunidad, ¿sabes? Estuve la mayor parte de mi vida sola. Ni siquiera sé qué es la felicidad. Estoy aquí sin una razón. No sé para qué existo, yo no tengo idea.
-¿Qué quieres? Porque no puedes ver lo hermoso de cada día. Eres muy exigente.
-Tú no tienes idea, no tienes ni la más mínima idea, así que déjame aquí. ¡Yo no pedí nacer!, yo solo quiero salir de aquí.

“Sola. Sentada en el vacío. Buscando una droga que calme mí padecer. Siempre estuve sola, bueno capaz no. Capaz siempre tuve a alguien. Pero, de todos modos, igualmente me siento sola. La gente me abandona, me miente, me usa, me traiciona.
Algunas veces quisiera ser normal. Poder pensar en cosas básicas. Que me gusten cosas que a la gente le gustan. Ser aceptada. Ser feliz. LLenarme muy fácil...
Pero no creo que pueda.
La gente es falsa, yo no puedo serlo. Capaz ellos sean mayoría. Pero la ignorancia se mueve en masa. Aunque... si lo pienso bien, no sé que es normal. Nadie lo sabe. Yo solo sé que simplemente no lo soy.
Adiós Leni. Yo ya estoy muerta.”

-Te tomó mucho tiempo despertar, parece que ya estás mejor. ¿Sabes? Intentamos localizar a algún familiar tuyo, pero no hay registro. ¿Quieres que contactemos a alguien?
No se movió. Ni un centímetro, permaneció inmóvil; estaba asimilando la situación. ¿Dónde estaba?, y por qué no recordaba nada. Un recuerdo la golpeó con fuerza, era ella, corriendo, corriendo libremente por un campo, saltando y cantando una alegre canción, ¿estaba soñando? No. Se vio a sí misma en el piso, llena de sangre, y con gente a su alrededor. ¿Había muerto? No. Allí estaba, en una cama de hospital.
-¿Cuánto tiempo llevo aquí?
-No te exaltes, linda. Llevas aquí casi una semana. Gracias a Dios no ha sido grave. ¡Imagina lo que hubiera pasado! Pero él es bueno. Él te ha pagado todo.
-¿Quién…es él?

¿Cielo?
¿Infierno?
No sé donde estoy. ¿Qué es esto? Nunca le he temido al final, a la muerte, a lo desconocido. ¿No pueden aceptar que no hay nada? Es la simplemente la nada misma, ya lo descubrí. ¿Por qué no lo había hecho antes? Las heridas desaparecen, los recuerdos se van. Creo que me estoy yendo. Ya no hay realidad, ya nada existe. No veo luz, mis ojos se acostumbraron a la oscuridad y ahora todo lo que veo son llamas, me están cegando. Pareciera que el mundo se cae, el vacío es abrumador. Ahora me está llegando el arrepentimiento. No hay salida, ¿cómo llegué aquí? Necesito a la oscuridad, la voy a llamar, “ven, por favor”, le digo. Creo que me escuchó. Va llegando, sí, ya está aquí. No hay escapatoria. “Leni…” pienso por última vez.

-¿Qué quieres encontrar a quién?
-Leni, ya te lo expliqué tantas veces… ¿acaso no es simple? Tengo que encontrarlo a él.
-Seguro, ¿pero quién es el él? No estás bien. Ya te lo he dicho. Deberías haberte quedado en el hospital. Estoy preocupado por ti, lo sabes, ¿verdad?
-Yo quiero encontrarlo a él. Eso es lo que quiero. No me importa nada más. ¿Por qué Leni?, ¿Por qué no quiso que yo supiera su identidad?, ¿Qué trata de ocultar?
-¡Nada! Él quiere alejarse de ti porque te has parado en medio de una maldita carretera, y te has dispuesto a morir. A él le tocó pasar por esto. Él creía que ibas a morir, no podía con la culpa, ¿Es que no piensas? Déjalo así, por favor regresa a lo que eras…por favor.

Siempre es lo mismo. Termino llorando hasta quedar dormida, mirando mis cicatrices, mis piernas destrozadas. Todos dicen que he contado con mucha suerte. ¡Mentiras!, no es más que estupidez lo que sale de sus bocas. Suerte hubiera sido si yo hubiera muerto.
Y ahora Leni…él piensa que estoy loca, que he perdido la razón. A veces dice palabras que me hieren como cuchillos. No puede entenderme. Ni siquiera yo misma me entiendo. ¿Por qué me ha pasado esto? Leni dice que yo misma me lo busqué. Me gustaría algún día descifrar todo esto. Duele. El dolor es más fuerte cada día. Siento que si no lo encuentro, cada día que pasa una parte de mí se va.