martes, 20 de febrero de 2018

The Love Club: El adiós

Tefi estaba en el cuarto de Mauricio, ambos no se estaban prestando atención en absoluto, hasta que Tefi habló:
-Mauricio, ¿te gustan los hombres?
-¿Eh? -respondió él, fingiendo que no había escuchado.
-Que si te gustan los chicos.
-Pues gustar de que algún día tendré un novio, no. -Y Tefi esperó a que siguiera hablando, pero él ya no dijo nada, siguió usando su celular.
-¿Por qué nunca me lo dijiste?
-¿Qué cosa? -y Tefi comenzó a irritarse.
-Eres mi mejor amigo y al menos espero que me cuentes que te has acostado con chicos -las lágrimas casi estaban por desbordarse, así que hizo una pausa y luego continúo -yo te lo cuento todo.
-Pensé que ya lo sabías, era obvio, ¿no? -Pero Tefi no dijo nada, ni siquiera hizo una seña con la cabeza.
-Todo esto me hizo preguntarme si verdaderamente somos tan amigos como todo el mundo cree. Yo te lo cuento todo y apenas si sé en qué rayos andas últimamente.
Mauricio dejó su teléfono en las piernas y miro fijamente a Tefi:
-Somos mejores amigos Tefi, somos mas que eso, ¿no?
Y Tefi quería decir que sí pero ni una palabra salió de su boca.

Cuando se hizo de noche, Morgan se les unió y todos fueron a cenar. Nadie decía una sola palabra, lo cual era extremadamente raro.
-Morgan, ¿sigues trabajando en El Bar? -le pregunto Tefi, tratando de matar el silencio.
-Sí, en realidad siento que no hago nada interesante con mi vida.
-No empieces -le dijo Mauricio, y Tefi solo volteó los ojos.
-A veces no entiendo por que salen conmigo, creo que preferiría no tener amigos -siguió Morgan, y Tefi y Mauricio se miraron confundidos.
-Te queremos por como eres, eso es lo que hacen los amigos -dijo Tefi, aunque sintió que sus palabras eran falsas.
-¿Qué paso con tu hombre casado? -le preguntó Mauricio y Morgan no dijo nada. Después de eso la comida llegó y nadie dijo mucho por el resto de la noche.

Una semana después, casi era San Valentín, así que Paul invito a Tefi a cenar, ella aceptó, así que en punto de las 8 pm, Paul pasó a recogerla a su trabajo.
-¿Entonces? -le preguntó Tefi -¿qué plan tienes para San Valentín?
-Nada, pensaba invitar a alguien a salir, pero primero quiero ver si las cosas funcionarán, ¿y tú?, ¿planeas algo?
-Adam quiere que vayamos a cenar y después a ver que pasa -Y sonrío ampliamente, a Paul se le encogió el corazón en cuanto mencionó a Adam -y, ¿quién es la chica especial a la que quieres invitar a salir?
-¿Sigues saliendo con Adam? -respondió precipitadamente -pensé que era algo de una noche.
-De hecho... -Y Paul la miro preocupado, porque de nuevo tenia una de esas miradas que le indicaban que estaba a punto de cometer alguna locura por amor -me invitó a ir a Europa con él.
-Pero no vas a ir, ¿verdad?
-¿Por qué no? estoy harta de estar atrapada aquí, imagina lo increíble que seria irme a Europa.
- ¿Y que piensas hacer?, ¿casarte con el?, ¿cómo vas a vivir allá?, no seas tonta Tefi, lo acabas de conocer hace dos semanas y ya quieres irte -la miró fijamente -por eso nada te sale bien Tefi, porque te emocionas demasiado rápido.
-Eso piensas, ¿de verdad? -en su cara se notaba el enojo.
-¿Sabes qué? -Paul alzó la voz-  estoy harto, si te invité hoy es porque al fin estaba listo para decirte que te quiero, te quiero de verdad Tefi, pero al parecer tú solo quieres seguir jugando juegos.
Él se dispuso a irse, casi se paraba de la silla cuando Tefi le tocó la mano indicándole que se quedara.
-¿Qué estás diciendo? no puedes estar hablando en serio, no puedes estar enamorado de mí, no otra vez por favor... -y Tefi no pudo contener el llanto - Paul, soy un desastre.
-Y yo te quiero así -Tomó su mano aún con más fuerza mientras Tefi hacía un esfuerzo por sonreír. Pero entonces su celular sonó, y Paul pudo ver que era Adam quien la llamaba, así que solo la miró a los ojos, esperando una respuesta, pero ella no dijo nada, solo contestó el teléfono, así que Paul se soltó de su mano, se levantó y caminó sin mirar atrás.
-¿Adam? -respondió Tefi, intentando sonar lo más emocionada que pudo -estoy lista, la respuesta es sí, claro que me iré contigo.

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