viernes, 25 de septiembre de 2020

Cuestionando todo lo que sé: Pt 1

Este mes, se siente como si pronto llegara el año nuevo, como si de pronto septiembre se convirtiera en diciembre y estamos a punto de contar 3, 2, 1, ¡yay!

Han cambiado muchas cosas: mis miedos más grandes ahora se ven pequeñitos y los que no habían aparecido desde que era pequeña a veces vuelven a surgir. Pero, dentro de todos estos cambios laborales y el estrés, decidí que me iba a cuestionar todo, ¿por qué creo lo que creo?, y una de mis preguntas más recurrentes es, ¿por qué creo que los doctores -tienen la solución a mis problemas?, la verdad es que, bueno, yo quería estudiar medicina pero no se pudo porque tengo miedo a la sangre y a ver tejidos humanos en vivo y a todo color, pero el caso es que desde hace muchísimo años he preferido la medicina natural a la tradicional, sí, a veces tengo dolores de cabeza y lo primero que hago es tomarme una pastilla, igual cuando tengo gripe porque es lo más rápido, pero, sé muy bien que la medicina solamente me va a quitar el síntoma y no atacará nada de raíz, es lo que conviene, es como las farmacias se han adueñado del mundo y ahora hay una en cada esquina hasta de mi pueblo (not kidding). 

Entonces, hace algunos días (o semanas), estaba en la playa con una de mis mejores amigas y me recomendó a un chico que hace Acupuntura, (wow, acupuntura, qué interesante), yo, no sé nada, pero quiero ir, entonces le pido su número y a la semana ya tengo cita (ayer), voy, con cero expectativas: no estoy enferma, no parezco de nada, sé que me va a decir que mis ojos no funcionan, vienen teniendo defectos desde hace más de 10 años, y ya. Llego a mi cita y me siento en una camita, me toma el pulso y me hace preguntas acerca de las cosas que me han estado molestando por años o recientemente. "¿cómo están los ojos?, ¿duermes bien?, ¿ansiedad?", luego me dio un masaje que no sé qué hizo pero me relajó, y después wow, el gran momento de ponerme las agujas, no me puso tantas la verdad, como unas 8, me dijo "vamos a dejar las agujas por unos 25 minutos, yo no me voy a ir, me voy a quedar aquí tocando unos puntos de tus pies", ok, cierro los ojos, un dolor en mi rodilla, que luego pasa a la otra rodilla, luego a mi cabeza y luego se va, ¿y qué más se va?, los pensamientos, ¡por primera vez en la vida no tengo pensamientos en mi cabeza!, logro relajarme tanto que me duermo. NUNCA, jamás jamás me puedo dormir ni siquiera en los masajes, para mi esto fue una revelación, un milagro. Me dijo que todo está bien conmigo pero necesito suplementos alimenticios, vitaminas, ok, sí, lo sabía. Le doy las gracias y me voy sonriendo, sé que voy a regresar.

Me siento tan relajada todo el día, y a las 9pm me quedo dormida, me despierto a las 2 pensando que ya había dormido 8 horas. Hoy, tengo el mejor humor del mundo: me levanto y voy al gym, trabajo, me compro flores, y hasta me siento tan bien que saludo a todos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

videos sobre bioneuromeción, de Corbera:

las enfermedades son reflejos de nuestra psicología, mente tranquila cuerpo sano; cada parte de nuestro cuerpo (la parte que se enferma) representa un aspecto psicológico en específico que estemos recorriendo